El conservador Luís Montenegro, al que dan ganador los sondeos, ejerciendo su derecho a voto este domingo.

El conservador Luís Montenegro, al que dan ganador los sondeos, ejerciendo su derecho a voto este domingo. Reuters

Europa

La participación sube seis puntos en Portugal en unas elecciones marcadas por la incertidumbre y los pactos

Los sondeos dan ventaja a la derecha de Luís Montenegro, pero proyectan un escenario sin mayorías absolutas, por lo que los pactos serán claves.

10 marzo, 2024 15:19
Miguel Flores S. de Diego | Agencias

La participación a las 16:00 horas en las elecciones legislativas en Portugal ha sido del 51,6%, un aumento de 6 puntos porcentuales respecto al nivel de electores a la misma hora en las elecciones legislativas de 2022, según datos del Ministerio de Administración Interna luso.

A lo largo de la jornada de hoy, se han sucedido los llamamientos de los políticos para que los ciudadanos acudan a ejercer su derecho en un país donde la participación no suele ser alta: en las elecciones de 2022, el porcentaje fue del 51,42%. En 2019, la participaron sólo llegó al 48,5%.

Los dos principales candidatos a primer ministro, el socialista Pedro Nuno Santos y el conservador Luís Montenegro, han apelado a los portugueses a que vayan a votar y expresaron su esperanza de que haya una alta participación.

[Quién es quién en los comicios de Portugal: de la seductora ultraderecha de Chega al enfado con Costa]

Montenegro, líder del Partido Social Demócrata, ha afirmado en el momento de votar que está "tranquilo". "Cualquiera que sea la forma en la que se comporten la temperatura o el clima no va a desanimar la voluntad de los portugueses para
decidir su futuro", ha dicho. Tenemos siempre la esperanza (de la baja abstención), pero nadie puede saberlo. Mi expectativa es que haya una alta participación", ha añadido.

Por su parte, el socialista Santos ha dicho que en un día como hoy "no debemos fallar ni dejar a otros la decisión sobre lo que queremos para el país", apelando a los electores indecisos con la esperanza de que "hayan recibido las aclaraciones debidas durante la campaña electoral". 

Misma línea ha mantenido el primer ministro saliente de Portugal, el socialista António Costa, que vestido con un jersey rojo y vaqueros ha recordado antes de votar que es la primera vez en casi 30 años que no es candidato de nada en unos comicios en Portugal.

[Portugal en la encrucijada: elecciones con un posible ascenso ultra o mantener a un socialismo 'manchado']

António Costa votando este domingo en un colegio electoral de Lisboa.

António Costa votando este domingo en un colegio electoral de Lisboa. Efe

Incertidumbre en los pactos

Los sondeos dibujan una incertidumbre total en la formación de alianzas. Muchos de ellos dan ventaja a la derecha liderada por el conservador Partido Social Demócrata de Luís Montenegro, pero proyectan un escenario sin mayorías absolutas, por lo que los pactos serán fundamentales para conseguir formar Gobierno y la ultraderecha de Chega podría tener un papel clave como tercera fuerza más votada.

Montenegro aseguró en campaña que sólo gobernaría si es el más votado y ha rechazado hasta la fecha estar dispuesto a negociar cualquier tipo de acuerdo con la extrema derecha de Chega, que apoya la pena de muerte, la castración química para los violadores reincidentes y quiere tolerancia cero para la inmigración ilegal. Además, Alianza Democrática sólo está dispuesta a formar un Gobierno en solitario o con Iniciativa Liberal (IL), un partido neoliberal favorable a las empresas.

Las probabilidades de la izquierda son menores y la mayoría aplastante que consiguió el Partido Socialiata hace dos años no promete repetirse. La dimisión de António Costa en noviembre ha pasado factura en el partido y la campaña de su sucesor Pedro Nuno Santos se ha basado en alertar del auge de Chega. "Votar socialista" es la única opción para frenar "la ultraderecha en Portugal y su influencia en cualquier futuro gobierno", dijo el candidato a Reuters en un mitin en Setúbal.