Globos con lemas de protesta se ven frente al edificio del Consejo Legislativo durante el aniversario de la transferencia de Hong Kong a China. Reuters
Trump castiga la represión impuesta desde Pekín contra Hong Kong con la sanción de seis funcionarios chinos
Desde la aprobación de la ley de seguridad nacional en 2020, las autoridades de Hong Kong han reprimido con dureza a activistas, periodistas y opositores.
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La Administración de Donald Trump impuso el pasado lunes sanciones a seis funcionarios chinos, alegando violaciones sistemáticas de los derechos humanos en Hong Kong y restricciones al acceso al Tíbet, según adelantó The Wall Street Journal.
Es la primera vez en este nuevo mandato que el Gobierno estadounidense penaliza a responsables directos de las políticas en Hong Kong. Entre los sancionados se encuentran Raymond Siu, comisionado de la Policía de Hong Kong, y Paul Lam, secretario de Justicia de la ciudad. Las medidas incluyen la congelación de activos en EE UU y la prohibición de operar dentro del sistema financiero estadounidense, lo que en la práctica dificulta su acceso a la banca internacional.
"Estas sanciones reflejan el compromiso de esta Administración con la rendición de cuentas para quienes reprimen derechos fundamentales en Hong Kong o ejercen persecución transnacional en suelo estadounidense", declaró el secretario de Estado, Marco Rubio.
Desde la aprobación de la ley de seguridad nacional en 2020, tras las masivas protestas prodemocráticas de 2019, las autoridades de Hong Kong han reprimido con dureza a activistas, periodistas y opositores.
Pese a la promesa de un "alto grado de autonomía" durante 50 años tras la transferencia del territorio del Reino Unido a China en 1997, Pekín ha reducido significativamente las libertades en la ciudad.
Aunque la estrategia general de Trump hacia China sigue centrada en cuestiones comerciales, como el déficit y los aranceles, Rubio, conocido por su postura crítica hacia Pekín, ha impulsado medidas más duras por razones éticas y geopolíticas.
El propio Rubio fue sancionado por China en represalia por acciones similares durante administraciones anteriores.
La relación entre Washington y Pekín continúa marcada por tensiones crecientes, incluido el conflicto latente con Taiwán. Este martes, el Ejército chino inició nuevas maniobras militares cerca de la isla, interpretadas como una advertencia a su presidente, Lai Ching-te, quien ha acusado a China de intensificar sus amenazas.
Además de las sanciones, esta semana se esperan nuevas medidas económicas, como el posible aumento de aranceles a productos chinos.
También están pendientes decisiones clave sobre la venta de TikTok por parte de su matriz china, ByteDance, así como la aprobación de un acuerdo liderado por BlackRock para adquirir puertos controlados por la firma hongkonesa CK Hutchison, algunos de ellos cerca del canal de Panamá.
Las sanciones también aluden a casos de represión extraterritorial. Activistas exiliados en Estados Unidos, el Reino Unido y Australia han sido blanco de órdenes de arresto y recompensas económicas por parte de las autoridades hongkonesas.
Una de ellas, Frances Hui, quien recibió asilo político en EE UU en 2022, fue incluida en una lista de cinco activistas por los que el Gobierno de Hong Kong ofreció recompensas de hasta 128.000 dólares en diciembre de 2023.
La respuesta de Pekín no se hizo esperar. La Embajada china en Washington calificó las sanciones como una "grave injerencia en los asuntos internos" y una violación del derecho internacional. Por su parte, el Gobierno de Hong Kong acusó a EE UU de "hegemonía bárbara" y de utilizar tácticas de "intimidación y coerción".
El Departamento de Estado también anunció restricciones de visado a funcionarios chinos por limitar el acceso al Tíbet, aunque no reveló sus identidades por razones de confidencialidad.
