Rusia mata a 34 civiles que celebraban el Domingo de Ramos en la ciudad ucraniana de Sumy con un ataque aéreo

El Gobierno ucraniano ha denunciado que un ataque aéreo ruso ha causado la muerte de al menos 35 personas en la ciudad Sumy, al noreste de Ucrania. También hay 117 heridos, de los cuales, 15 son niños.

Así lo ha reportado en su cuenta de Telegram el ministro del Interior ucraniano, Igor Klimenko, quien asegura que al menos dos misiles balísticos han impactado en la mañana de este domingo en el centro de la ciudad.

La zona del impacto estaba abarrotada de personas que celebraban el Domingo de Ramos, por lo que el misil se ha dirigido contra civiles. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha pedido "una respuesta fuerte del mundo al mortífiero ataque" y ha calificado de "escoria humana" a sus responsables.

El ataque llega después de que el enviado especial estadounidense Steve Witkoff visitase Moscú el pasado viernes y se reuniese con el presidente Vladimir Putin para poner en marcha nuevas conversaciones que aceleren un acuerdo de paz en Ucrania o, al menos, un entendimiento para acordar un alto el fuego que no acaba de producirse.

El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha asegurado este domingo que las conversaciones entre Washington y Moscú para encontrar una solución al conflicto en Ucrania avanzan "muy bien", pero que es "demasiado pronot para encontrar resultados inmediatos debido al daño que la administración Biden causó a la relación ruso-estadounidense".

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha condenado el ataque a través de su cuenta personal de X con un mensaje en el que asegura que solo "la escoria humana puede actuar así", en referencia a la muerte de decenas de civiles.

Witkoff escenifica su sintonía con Putin al aconsejar a Trump que reconozca como rusas las regiones ucranianas ocupadas

"El mundo debe responder con firmeza. Estados Unidos, Europa y todo aquel que desee que esta guerra y estas muertes acaben. Ellos quieren este tipo de terror. Sin presión contra Rusia, la paz es imposible. Las conversaciones nunca han logrado detener los bombardeos aéreos. Lo que necesitamos es una actitud hacia Rusia que les trate como a terroristas", apuntaba Zelenski en X.

Aunque el presidente estadounidense Donald Trump todavía no se ha pronunciado al respecto, el enviado estadounidense para Ucrania y Rusia, Keith Kellog, ha asegurado que el bombardeo cruza "líneas rojas".

"El ataque de las fuerzas rusas contra objetivos civiles en Sumy, perpetrado hoy el Domingo de Ramos, traspasa cualquier límite de la decencia. Hay decenas de civiles muertos y heridos. Como exlíder militar, entiendo los ataques y esto está mal. Por eso el presidente Trump se esfuerza por poner fin a esta guerra", ha asegurado en un mensaje en X.

Trump ha reconocido estar "molesto" al ver que los bombardeos contra Ucrania no se han detenido y el secretario de Estado, Marco Rubio, deslizó que era necesario avanzar y que la postura estadounidense no pasaba por aceptar "conversaciones interminables" que no lleguen a buen puerto. Sin embargo, no han ejercido medidas de presión significativos contra Rusia más allá de algún comentario público.

Desde que Kiev y Washington acordaron un acuerdo de alto el fuego de 30 días, Rusia ha continuado sus ataques sobre suelo ucraniano ignorando la existencia de conversaciones diplomáticas.

El pasado mes de marzo, 164 civiles ucranianos murieron en estos ataques, que han aumentado en un 30% si se compara con marzo del año pasado, cuando la administración Biden optaba por una postura opuesta a la de Trump y basada en un choque total con Rusia.

Según datos de Naciones Unidas, casi 13.000 civiles han muerto en Ucrania desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022.

Europa condena el ataque

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha compartido un mensaje denunciando que el ataque demuestra que Rusia "desea continuar la guerra" y que se están despreciando el derecho internacional y los "esfuerzos diplomáticos de Trump".

"Todo el mundo lo sabe: esta guerra fue iniciada solo por Rusia. Y hoy, es evidente que solo Rusia decide continuarla, con un flagrante desprecio por las vidas humanas, el derecho internacional y los esfuerzos diplomáticos del presidente Trump. Se necesitan medidas enérgicas para imponer un alto el fuego a Rusia. Francia trabaja incansablemente para lograr este objetivo junto con sus socios", reza el mensaje.

En la misma línea, el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, también ha culpado a Rusia de prolongar el conflicto "solo porque así lo decide" y ha mostrado su "indignación" por la "campaña de violencia rusa".

Además, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha calificado el ataque de "bárbaro" y de "especialmente vil" por haberse dirigido contra gente que se reunía "pacíficamente".

"Esta última escalada es un sombrío recordatorio: Rusia fue y sigue siendo el agresor, en flagrante violación del derecho internacional. Se necesitan urgentemente medidas enérgicas para hacer cumplir un alto el fuego. Europa seguirá colaborando con sus socios y manteniendo una fuerte presión sobre Rusia hasta que cese el derramamiento de sangre y se logre una paz justa y duradera, en los términos y condiciones de Ucrania", afirma en su mensaje.

En clave española, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha sumado en la tarde de este domingo a las reacciones de líderes europeos ante el ataque ruso.

"Putin ha vuelto a matar civiles inocentes. Esta vez, en la ciudad de Sumi. Su crueldad nos indigna. Nos entristece. Pero también nos une. España y la Unión Europea no dejarán de apoyar a Ucrania hasta que obtenga la paz justa y duradera que tanto merece", reza en un mensaje publicado en su cuenta de X.

Horas antes, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha condenado la "estrategia de terror" rusa por haber perpetrado "otra cruel matanza de civiles".