Ana Pardo de Vera.

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Protagonistas

Ana Pardo de Vera presenta 'Chantaje a una jueza': “Los casos aislados de corrupción no existen”

La periodista y filóloga publica un libro que, aunque es de ficción, se inspira en casos de corrupción y forma de hacer política que se dan en España.  

14 septiembre, 2022 01:57

Chantaje a una jueza (Espasa, 2022) comienza con una afirmación: "No parece que haya mucho que investigar". Sin embargo, si la biografía de Ana Pardo de Vera, filóloga y periodista, tuviera un comienzo, podría ser justamente el opuesto. Porque esta colaboradora habitual de medios de comunicación -actualmente es directiva en Público, aunque ha colaborado en muchos otros, y fue asesora en tres ministerios durante la etapa de gobierno de Zapatero- encuentra múltiples ángulos desde los que seguir preguntándose sobre los temas más espinosos, como el que ahora la ocupa.

Admite haber querido siempre escribir ficción porque como periodista se termina generando una deuda con la complejidad. “¿Cuántas cosas te dejas en el tintero cuando escribes una información en todas sus variedades, reportaje, análisis, incluso cuando escribes opinión…? A veces es necesaria la ficción para retratar toda la realidad, los ambientes, las implicaciones estructurales… Pero esto no es nuevo, conocemos mucha historia de España y del mundo gracias a la ficción”, añade categórica.

El escenario principal de su novela, inspirada en una parte de realidad, lo ubica en Galicia. “Mi tierra, la provincia de Lugo, la fría y hermosísima zona de Os Ancares, el mejor lugar del mundo”, señala. “También Santiago de Compostela, donde estudié la carrera de Filología, y que constituye el núcleo institucional gallego; el meollo del poder, pero no solo. He tomado muchas ideas de hechos reales, sí, de sumarios judiciales sobre corrupción, trata de mujeres…, sobre toda la trama de la novela”.

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Confiesa cómo se ha imbuido directamente de casos que conoce bien, es más, que aborrece. “También me he inspirado en una forma de hacer política que conozco, sigo y repudio. Y no, no he llevado la ficción a máximos: está pasando”.

La corrupción y el poder

En cuanto a la temática, sin duda peliaguda, relata cómo ella misma barajó varios temas, “pero la cultura de la corrupción en España, y no digamos en Galicia, de donde yo soy, siempre me ha fascinado. Ortega y Gasset ya alertaba contra ella: tenemos un problema y cada acción corrupta nos afecta a todos y todas. Los casos aislados no existen”.

Portada de 'Chantaje a una jueza'.

Portada de 'Chantaje a una jueza'.

Para Pardo, “el poder es lo que mueve el mundo y, en demasiadas ocasiones, en contra de los intereses del mundo y la mayoría de sus habitantes. Y eso, desde un punto de vista de pura ética y democracia, debe ser vigilado para evitar la corrupción en toda la amplitud de la palabra, esa que arrasa con todo y causa tantísimo dolor en la gente, en personas con nombres y apellidos, que es también lo que trato de contar en la novela”.

¿Da usted a entender que el poder corrompe inevitablemente? ¿Qué solución encuentra?

Que el poder corrompe es un hecho, y ahí está la historia de la humanidad para confirmarlo. ¿Un o una poderosa nace corrupto o se hace?

Ese es un debate amplísimo y muy interesante, también con connotaciones psicológicas, pero lo importante es la confirmación, por un lado, de que el poder vitalicio, no democrático o de larga duración, acaba corrompido casi siempre y, por otro, de que los controles públicos y democráticos al poder son imprescindibles y deben ser muy estrictos: es el dinero de la gente quien paga a esos poderes. No basta la alternancia, hay que vigilar, sancionar y expulsar si es necesario. Nos jugamos mucho.

Su publicación trata "las múltiples ramificaciones de la corrupción", ¿a qué se refiere con eso?

A que los casos aislados no existen, mucho menos al más alto nivel del poder, público o privado. Si hay un corrompido, hay un corruptor, y si hay corrompido y corruptor, hay un ‘modus operandi’, que va desde pagar y aceptar dinero sin facturar por arreglar un grifo hasta montar un sistema de salarios en B para altos cargos de un partido o de comisiones para un rey.

Cuanto antes asumamos el daño multidimensional que hace la corrupción y su capacidad de penetrar y pudrirlo todo, mejor para nosotros.

"Lista era, carallo, muy lista... La mujer más lista que he conocido", dice uno de sus personajes. ¿Cuáles son las mujeres que ha conocido que más la han inspirado?

Las mujeres de mi familia, sin duda: mi madre, mi abuela materna y mis tres hermanas, Isabel, Cristina y Margot. Escritoras y mujeres potentísimas y conocidas como Emilia Pardo Bazán, periodistas actuales como Julia Otero o heroínas del día a día como las periodistas mexicanas y de otros países que se enfrentan a una auténtica cultura de la muerte por hacer su trabajo, que es mi trabajo también. Y tienen toda mi admiración, ellas y otras muchas mujeres anónimas que literalmente, sobreviven rebelándose cada día en entornos hostiles y hasta violentos.

Periodismo y literatura

Lectora imparable, las referencias literarias y periodísticas que alude Ana Pardo de Vera le llegan por lecturas pasadas de todo tipo, “por todos los lados, desde Clarín con La Regenta hasta Emmanuel Carrère con Limónov, Yoga o El Adversario, pasando por Valle-Inclán, Rosalía de Castro, Pérez Galdós, Emilia Pardo Bazán, Castelao, el naturalismo de Zola, el true crime de Truman Capote en A sangre fría o de Nicola Lagioia en La ciudad de los vivos, que acabo de terminar; la novela negra nórdica del sueco Henning Mankell, o la canaria de Alexis Ravelo, pasando por los clásicos latinoamericanos como García Márquez; la ‘narcoliteratura’ de Élmer Mendoza. Hay mucho y muy bueno que leer”.

Inmersa en la promoción de su novela, comparte cómo “con este oficio nuestro de periodismo es difícil ponerse a escribir una novela sin encomendarse a nadie, sin saber si te la publicarán… Estoy muy agradecida a Rosa, mi editora, y a Espasa-Planeta por haberme dado ese empujón”.

“Mi próximo proyecto”, termina explicando, “es el de siempre: hacer periodismo, “el mejor oficio del mundo”, que decía García Márquez. Contar, denunciar, informar… Es lo que me gusta, lo que me motiva. Soy una privilegiada por poder dedicarme a un periodismo libre y comer de ello. ¡Y por supuesto! ¡Ojalá ver Chantaje a una jueza en la pantalla! No puedo imaginar un reconocimiento más ilusionante, pero con verme aquí entrevistada porque me haya publicado una novela una editorial tan prestigiosa, créame que estoy satisfecha y muy agradecida”.