Málaga no es solo sol y playa. Eso ya lo sabe todo el mundo, pero cada vez más personas miran hacia la oferta del interior, donde se pueden vivir todo tipo de experiencias relacionadas con la naturaleza, la gastronomía, el deporte, etcétera. Buenos ejemplos de ello son el Caminito del Rey, el Torcal, los Dólmenes de Antequera, Ronda... 

Turismo Costa del Sol realiza cada año un informe en el que analiza cómo ha sido el comportamiento del turismo en el interior de la provincia de Málaga y los resultados de 2023 han sido ciertamente positivos, en sintonía con los del conjunto provincial en el que se ha batido el récord. En el caso concreto del interior, el año pasado fue visitado por 1,36 millones de turistas, un 13% más interanual, que generaron un impacto económico de 1.481 millones de euros, un 23,6% más.  

Así lo ha detellado el presidente de la Diputación de Málaga y Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, en Fitur, quien ha recalcado que se crearon 13.569 empleos en la zona, un 15% más. Hay ya casi 7.300 establecimientos turísticos en el interior con más de 60.000 plazas, un 10% más, lo que le lleva a ser líder en el conjunto andaluz. 

"Turismo Costa del Sol lo tiene claro. Va a seguir apostando por el interior", ha dicho Salado, quien ha hecho hincapié que gracias a este tipo de turismo se apuesta por la sostenibilidad y se lucha contra la despoblación de las localidades del interior. 

Entre los proyectos puestos en marcha por la Diputación de Málaga están el Corredor Verde del Guadalhorce, un ambicioso plan que abarca ocho municipios y que busca la recuperación ambiental y paisajística de la región, la Gran Senda de Málaga, la Senda Litoral, el Caminito del Rey y la pasarela de madera de la desembocadura del Guadalhorce, entre otros.