El Asilo de los Ángeles de Málaga sobrevive a sus problemas económicos y seguirá ayudando a los mayores

El Asilo de los Ángeles es un lugar emblemático en Málaga. Ayuda a personas necesitadas desde el año 1893, entonces con el nombre de Liga para el Socorro de Indigentes y Extinción de la Mendicidad en Málaga, y en 1913 pasó a llamarse con su denominación actual.

Más de 130 años, por tanto, implantado en el distrito de Bailén-Miraflores contribuyendo a mejorar la calidad de vida de las personas mayores, especialmente aquellas que están solas y tienen un alto grado de dependencia o enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer o Parkinson, entre otras.

Tienen a 48 personas y 30 empleados, ya que cada uno de los residentes necesita una atención completa y continuada prácticamente las 24 horas del día. 

Pese a ser un lugar emblemático y dar una gran asistencia social, su situación económica era complicada. Tanto que se temía incluso por su continuidad o, al menos, en las mismas condiciones que las actuales. 

En este contexto, Unicaja y la Fundación Unicaja han decidido echar una mano y garantizar el presente y futuro de esta institución a través de un apoyo social y financiero. 

Ha sido un gran alivio para los gestores del Patronato Hogar Nuestra Señora de los Ángeles, encabezado por su presidente Luis Plaza. Para dar a conocer este acuerdo y dar visibilidad a la estabilidad del proyecto, este lunes ha habido un acto en el asilo al que han acudido el presidente de la Fundación Unicaja, José M. Domínguez; el CEO de Unicaja, Isidro Rubiales; el director general de la Fundación Unicaja, Sergio Corral, y la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos de la Junta de Andalucía, Carolina España, entre otros.