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La videovigilancia 'conquista' Málaga: a finales de 2025 habrá unas 140 cámaras funcionando en zonas clave

El Ayuntamiento de Málaga contrata la protección de monumentos icónicos. Solicita el permiso para ampliar el sistema a los parques empresariales San Luis y La Estrella.

Más información: Cuenta atrás para que Málaga blinde con videovigilancia sus monumentos más icónicos: del Marqués de Larios a Picasso

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El mapa de la videovigilancia se expande como mancha de aceite por la ciudad de Málaga. La semilla que se sembró hace ahora once años, con la colocación de las primeras cámaras en la calle Larios y su entorno más directo, ha germinado y ha crecido de manera notable.

Y no solo en el casco histórico, el gran escaparate de la urbe, invadido casi a diario por cientos de turistas y visitantes.

La estrategia diseñada por el equipo de gobierno en los últimos mandatos sigue avanzando y consolidando la apuesta clara por este sistema como medida para, de un lado, disuadir la comisión de delitos y, por otro, detectar casi de inmediato a los infractores.

A la espera de que se cumplan los calendarios previstos, Málaga podría cerrar el presente ejercicio 2025 con alrededor de 140 dispositivos repartidos por la capital.

De este conjunto forman parte las diferentes etapas de ampliación del sistema por la almendra del casco antiguo, así como su vecino barrio del Soho, con 68 cámaras.

A ellas hay que sumar las 12 dispuestas en el túnel de la Alcazaba, aprovechando la reciente remodelación del eje viario.

Estos dispositivos también están presentes en los polígonos industriales Guadalhorce, Azucarera y Santa Bárbara, con 29 cámaras activas desde hace varios años.

Objetivo: llegar a San Luis y La Estrella

Todos ellos forman parte de la primera fase de control de las zonas industriales, que el Consistorio quiere ampliar a los parques empresariales San Luis y La Estrella. Un movimiento estratégico para el que ya han sido solicitados los permisos necesarios.

El último paso relevante del área de Seguridad en materia de videovigilancia es el de salvaguardar más de una veintena de monumentos y esculturas de la ciudad con este sistema.

En total, 30 cámaras serán las que velarán por que estos espacios icónicos de la urbe, como la estatua del Marqués de Larios o la de Pablo Ruiz Picasso, en la Plaza de la Merced, queden protegidas de posibles actos vandálicos.

Para allanar el camino a esta nueva etapa, el Ayuntamiento acaba de formalizar los contratos de instalación de la fibra óptica y de suministro de las cámaras. El calendario permite prever que estarán en funcionamiento a finales de este año.

Esta es la fotografía presente e inmediata que se puede tomar de la ciudad. Pero la mirada municipal va más allá.

Desde hace meses, el Consistorio trabaja en la licitación del contrato para extender la videovigilancia al barrio de La Trinidad y al Parque de San Rafael.

Además, se está tramitando la implantación de otros 14 dispositivos para el entorno de las estaciones de trenes y autobuses, abarcando las calles Héroe de Sostoa, Paseo de los Tilos, Mendívil, Eguiluz, Mauricio Moro y avenida de las Américas.