Una imagen del mencionado estandarte.

Una imagen del mencionado estandarte.

Cofradías

Ni rastro del estandarte franquista en la procesión del Mutilado de Málaga: causó una gran polémica en 2024

Esta acción llegó a provocar que el Gobierno abriera un expediente informativo para determinar si vulneraba la Ley de Memoria Democrática.

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La pasada Semana Santa, la procesión del Santo Cristo de la Clemencia, siempre imponente por las calles de Málaga el Sábado de Pasión, quedó marcada por una polémica que llegó a trascender a nivel nacional: procesionó por el Centro de Málaga con un estandarte con símbolos franquistas, un gesto que llegó a provocar que el Gobierno abriera un expediente informativo para determinar si vulneraba la Ley de Memoria Democrática.

Este Sábado de Pasión, había quien lo buscaba en el cortejo, pero finalmente, ni rastro de él. En su lugar, al parecer, procesionan cinco estandartes con escenas de la Pasión portados por penitentes. La polémica se desató porque en el estandarte, además de un crucificado, figuraba el clásico águila franquista y el lema 'Una, Grande y Libre' bajo la inscripción 'Franco, 18 de julio de 1936'.

Pero aquel hecho no quedó en una simple anécdota. El portador del estandarte siguió avivando el fuego después de lo ocurrido. Se trata de Fernando Javier Olea, en ese momento, al menos, delegado de la organización del sindicato Solidaridad en Málaga. El hombre sacó pecho de haber llevado en sus manos el mencionado estandarte: "Un privilegio y honor portar el estandarte junto a mis compañeros de la Cofradía del Santísimo Cristo Mutilado, (por los correligionarios del odio, la izquierda española, la de "arderéis como en el 36")", se leía en un lapidario mensaje que publicó en 'X', anterior Twitter, que arrancaba con otra afirmación contundente: "Con @sanchezcastejon de ejemplo, es muy sencillo comprender la grandeza de Franco". Ahora ya no se puede acceder a su perfil.

La polémica obligó a responder a la corporación, que lanzó incluso un comunicado al respecto: "Esta Hermandad de Penitencia se desmarca, de manera rotunda, de cualquier opinión expresada por sus hermanos y de cualquier manifestación política, debiéndose en exclusividad a la Santa Madre Iglesia, a su doctrina social y a sus propios fines como Hermandad erigida canónicamente", expresa en un comunicado oficial.

En el mismo recordaba que muchos de sus elementos patrimoniales "cuentan con más de tres cuartos de siglo de antigüedad, correspondiendo tanto en diseño, como en iconografía y en técnicas, a aquellos propios de esas décadas. En la actualidad figuran tan solo como elementos patrimoniales e históricos, sin ninguna simbología más allá de la religiosa".

En un tercer punto del escrito, aseguraban que la hermandad ha trabajado varias décadas en la actualización, restauración y adecuación de su patrimonio con el fin de ceñirlo, de manera exclusiva, a lo estrictamente religioso.

Y se añadía que el hábito nazareno, tal y como reflejan "nuestras Santas Reglas, nos revisten de Dios y guardan nuestro anonimato frente a Él, quedando terminantemente prohibida la asistencia a la iglesia del Sagrado Corazón de Jesús vistiéndolo, así como la publicación de imágenes particulares de nazarenos a medio vestir".

"Esta Hermandad se reserva el derecho de tomar las acciones legales o canónicas que estime necesarias en cuanto al rompimiento de sus Santas Reglas y al uso indebido de sus símbolos, patrimonio y hábito nazareno, con la intención de ligarlos a cualquier manifestación política o de otra índole ajena a la religiosa", concluía el comunicado.