El mes de agosto es sinónimo de vacaciones, por lo que para la administración de la Justicia se trata de unas fechas que resultan inhábiles. Esta circunstancia, trasladada a gran parte del tejido empresarial, ha llegado también a algunas iglesias de Málaga, que durante el verano ven reducidos de forma considerables sus horarios. Tanto es así que son varios los casos en los que las puertas de los templos permanecen completamente cerradas durante semanas.

Esta situación ha generado cierto malestar en parte de los cofrades de la ciudad, que ven cómo "poder rezar" a sus Cristos y a sus Vírgenes se convierte en algo prácticamente imposible. 

Uno de los casos más evidentes es el de la parroquia de San Agustín, situada en la calle homónima del Centro de Málaga, y que además arrastra durante todo el año unos horarios más que limitados. Este templo presentó hace meses el calendario para el tiempo estival; en la hoja parroquial se explicaba que durante julio, el horario del templo y el de oficinas se limitaba a los miércoles entre las 18:00 y las 20:00.

Del mismo modo, las misas y preceptos se celebrarían únicamente los domingos a las 10:00 (turno tradicional) y las 12:00. Un par de líneas más abajo, enmarcado en un recuadro, subrayado y en negrita, se podía leer: "La iglesia permanecerá cerrada al culto del 1 al 26 de agosto".

"Si de por sí los horarios de San Agustín son bastante malos, con el verano lo son aún más. ¿Para cuándo unos horarios dignos, para que podamos ver a nuestros Titulares de Pollinica?", se preguntaba un feligrés en Twitter.

Este debate ha saltado a las redes sociales hace pocos días, después de que la hermandad de las Penas informara que el Oratorio permanecerá cerrado desde el sábado 5 de agosto hasta el 4 de septiembre inclusive por "labores de conservación y limpieza".

¿El problema? Que mientras la casa hermandad y los columbarios estarán abiertos los martes entre las 18:30 hasta las 20:30, los fieles y devotos no podrán acercarse a las Imágenes.

Asimismo, se suma el problema de apertura que este espacio presenta, encontrándose con el candado echado durante una gran parte del día. "Que normalicemos que un templo permanezca cerrado durante un mes con sus titulares dentro es inconcebible", apuntaba otro cofrade malagueño. 

Se da el denominador común de que ambas sedes están ubicadas en el casco Antiguo, un espacio que a lo largo de estas semanas ve crecer la población foránea (principalmente por la presencia del turismo) en detrimento de la local. 

Existen otros ejemplos, alejados de este entorno, en el que el culto al público se mantiene, aunque sea de una forma más concentrada que durante el curso ordinario, pero sin dejar a un lado su finalidad. Así, entre las corporaciones que lo han anunciado a través de sus perfiles corporativos, encontramos los ejemplos de la Archicofradía de la Esperanza (que no modifica su horario habitual) o la iglesia de San Pablo.

Precisamente, esta parroquia trinitaria se ha limitado durante el mes de agosto al turno de mañana (de 9:00 a 13:00 de lunes a viernes -con misa a las 10:00- y los sábados de 18:00 a 20:00 -con misa a las 19:00 y a las 10:30 los domingos-).

Iglesias abiertas

Sobre este asunto, el cofrade y periodista Álvaro Cano exponía: "Es curioso como a los cofrades se nos juzga constantemente porque "la fe hay que vivirla todo el año y la iglesia no solo está abierta en Semana Santa", pero cuando llega verano los templos se cierran en masa, la Eucaristía deja de celebrarse, y nadie dice nada".

También añadía que estas quejas de devoto que no pueden "rezarle a sus imágenes" durante el verano no son nuevas, sino que se repiten todos los años. 

En respuesta a este tuit, otro usuario añadía que también hay que ver "la viga en el ojo propio": "(Tenemos que) reconocer que a los cultos de las cofradías en verano va el cura y 3 más. ¿El resto de cofrades que se ofende cuando cierran la iglesia por qué no van a esos cultos de sus cofradías? ¿Solo (van) en cuaresma?", argumentaba.