Alerta por la presencia del hongo mildiu en Málaga: amenaza al 80% de la cosecha de uva en algunas zonas

Los viñedos de algunas zonas de la provincia de Málaga están en peligro por la “grave” incidencia del hongo mildiu en los cultivos de la provincia debido a que la primavera ha sido “excepcionalmente” húmeda.

Así lo ha comunicado el Consejo Regulador de las Denominaciones de Origen “Málaga”, “Sierras de Málaga” y “Pasas de Málaga” que también ha advertido “sobre la crítica situación y el complicado panorama económico que se avecina en la próxima vendimia”.

En concreto, por zonas, en Manilva “la penetración de la enfermedad es muy extensa, estimándose una pérdida aproximada del 80% de la cosecha”.

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Por otro lado, en Axarquía Oriental, pese a que hay una alta superficie con hojas afectadas, estiman “una pérdida de cosecha de entre el 5% y el 30%”. En cambio, en la parte occidental, prevén pérdidas de hasta el 80%.

Un 70% de los viñedos tienen hongos de este tipo en la Comarca de Antequera, pero se desconoce el efecto que tendrá en la cosecha. Por último, en la Serranía de Ronda “tanto el nivel de detección de presencia del hongo como su incidencia en la cosecha se estima, por ahora, muy bajo”.

“La disparidad de incidencia en el viñedo refleja la diversidad y complejidad de los territorios que conforman la zona de producción, tanto en el aspecto climático, con distintos regímenes de temperatura y humedad, como en las condiciones de cultivo, que determinan el riesgo potencial de desarrollo de la enfermedad y la respuesta ante su aparición”, explican a través de un comunicado.

De igual forma, señalan que “aunque no es habitual que el mildiu amenace en estas latitudes, sus características biológicas lo hacen especialmente peligroso cuando aparece en la zona”.

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En cuanto a su estrategia de protección, está basada en la prevención, a través de la vigilancia de los parámetros ambientales y la presencia en planta de signos de las infecciones primarias que se dan en primavera cuando ocurre la regla de los tres dieces.

Esta regla se da cuando “las temperaturas son superiores a 10 grados, hay lluvias superiores a 10 milímetros y los brotes de la viña tienen entre 10 y 15 centímetros”.

En este momento, pese a que las condiciones ambientales actuales y la previsión climática no son favorables para el desarrollo de la enfermedad, "esta sigue parasitando a la planta, por lo que hay que mantener una estricta vigilancia para tratar de delimitar el daño producido, que ya es irreversible".

“La situación es grave y compartida con otras zonas vitícolas andaluzas. El Consejo Regulador de Málaga continuará coordinando con otras denominaciones de origen para sensibilizar a las instituciones ante la grave crisis ocasionada”, concluyen.