El itamae Gregori Gómez flambeando sushi en BarraCruda.

El itamae Gregori Gómez flambeando sushi en BarraCruda. Mar León

Ocio

La nueva barra de sushi judía en Madrid: con certificado de la Sinagoga, en un puesto de mercado y cerrada en 'sabbat'

El chef José Zapata de BarraCruda en el Mercado de Ibiza define su puesto como "alta cocina sin cocina", al que añade una barra japonesa.

23 mayo, 2024 02:04

En una antigua frutería del Mercado de Ibiza (calle Ibiza, 8) abrió hace un año y medio el chef José Zapata su restaurante BarraCruda en versión puesto de mercado (un Solete Repsol y premio American Express al mejor restaurante innovador 2024). Ahora, justo al lado, en lo que era una zapatería, inaugura la barra de sushi BarraCruda.

Esta última, con la misma esencia que la primera. Es decir, "sin cocina. BarraCruda significa que somos un restaurante de alta cocina sin cocina con mucho sabor", explica el chef venezolano al frente del Grupo BarraCruda.

Los protagonistas en su cocina son los crudos y semicrudos, las cocciones a baja temperatura y el producto de temporada con su sabor más natural. Por eso, el sushi no lo acompaña con complementos como la salsa de soja o el jengibre, a no ser que lo solicite el cliente. Asimismo, los nigiris, makis, gunkans y rollitos son del pescado fresco del día que le vende la pescadería vecina del mercado. 

El chef José Zapata en su nueva barra de sushi de BarraCruda en el Mercado de la Paz.

El chef José Zapata en su nueva barra de sushi de BarraCruda en el Mercado de la Paz. M. L.

La barra de sushi no requiere de mayor decoración que de madera, hierro, cemento crudo, un letrero fluorescente de la cerveza japonesa Asahi y utensilios de cocina, ya que el joven maestro itamae Gregori Gómez es el encargado de acaparar todas las miradas mientras prepara y flambea makis y nigiris.

El nuevo puesto de mercado de BarraCruda, en el local 31, ha sido diseñada para ocho comensales y el ticket medio es de unos 50 euros por persona y su menú degustación de seis pases cuesta 35 euros (bebida no incluida), un precio muy asequible al tratarse de una barra de sushi.

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Fuera de los nigiris y los makis, puedes encontrar un sabroso wakame, tatakis de atún y salmón o coquitos de corvina o salmón. Sin duda, uno de los platos imprescindibles para empezar son los pimientos de padrón en una versión nipona deliciosa. Asimismo, la barra tiene influencia nikkei con bocados como el anticucho tuna roll y el ceviche roll.

Makis.

Makis. BarraCruda

A su vez, se combinan las cocinas de ambos espacios, que al estar tan próximos, permiten pedir tanto de la carta de BarraCruda como en la barra de sushi.

Ambos espacios cuentan también con el centro de calidad Kosher, el distintivo que otorga el Rabinato Principal de Madrid desde la Sinagoga de la capital para que el pueblo judío pueda comer en él. Algo que saben de sobra los numerosos clientes de esta religión que reciben a diario, y es que no es tan común encontrar un restaurante que cumpla las características para conseguir el distintivo. 

El chef Zapata, venezolano con raíces judías, apunta que lo principal es no trabajar en sabbat: "No abrimos los viernes al anochecer ni el sábado. Es algo que otros restaurantes no se pueden permitir porque con lo que facturan esos dos días sacan adelante el negocio".

El puesto de BarraCruda junto a la nueva barra de sushi, al fondo.

El puesto de BarraCruda junto a la nueva barra de sushi, al fondo. M. L.

En 2019, José Zapata dejó de dirigir las cocinas del Grupo Charrúa para inaugurar su proyecto propio, que a día de hoy cuenta con su restaurante BarraCruda en el barrio de Barajas (calle Bahía de Palma, 8), donde también imparten cursos de cocina.

El restaurante, dentro del horario del Mercado de Ibiza, abre el lunes, viernes y domingos para comer; y de martes a jueves para comer y cenar.

BarraCruda es la nueva barra de sushi para el que busque precios contenidos, un trato cercano y producto fresco y de mercado. Para la comunidad judía no es necesario presentar a este puesto de mercado de alta cocina sin cocina.