Elisa Mouliaá, el pasado 11 de abril, cuando acudió al Juzgado para entregar su teléfono móvil, según acordó el juez./

Elisa Mouliaá, el pasado 11 de abril, cuando acudió al Juzgado para entregar su teléfono móvil, según acordó el juez./ EP

Tribunales

Íñigo Errejón se querella contra Elisa Mouliaá por afirmar que el exportavoz de Sumar "extorsionó" a dos testigos

La actriz "hizo afirmaciones falsas e inveraces a sabiendas" a través de mensajes en X "con el único fin de difamar, menoscabar el honor, destruir la credibilidad y honorabilidad" del exdiputado.

Más información: El juez ve indicios para llevar a juicio al exportavoz de Sumar Íñigo Errejón por una agresión sexual a Mouliaá

Madrid
Publicada

El exportavoz de Sumar en el Congreso Íñigo Errejón ha presentado este lunes una querella por un presunto delito de calumnias con publicidad contra la actriz Elisa Mouliaá por realizar en la red social X "afirmaciones falsas e inveraces a sabiendas de su inexactitud y con total conocimiento de su falsedad".

La querella se ha presentado después de que Mouliaá no compareciera al acto de conciliación señalado para el pasado 31 de octubre.

Y se produce tres días después de que el juez Adolfo Carretero haya acordado continuar el procedimiento contra Errejón para que sea juzgado por una presunta agresión sexual a Mouliaá.

Los hechos que han dado lugar a la querella arrancan el pasado 20 de junio, cuando el juez instructor tomó declaración a dos testigos, S.G. y B.V., anfitriones de la fiesta en la que se habría producido la agresión sexual de Errejón a Mouliaá en octubre de 2021.

Ambos testigos desmintieron la versión de Mouliaá y aseguraron que ella les hizo en el momento de los hechos un relato distinto del que luego plasmó en la denuncia que interpuso contra Errejón tres años después, en octubre de 2024.

Tras las noticias de prensa que ambos testigos habían contradicho a Mouliaá, ésta reaccionó en su perfil de X "difundiendo afirmaciones falsas y difamatorias contra Errejón respecto de su relación con dichos testigos, alegando que habría contactado con los mismos, imputándole falsamente un delito de extorsión para que testificaran a su favor e invocando la nulidad y contaminación de las referidas declaraciones testificales, para desvirtuar públicamente su valor probatorio", indica la querella.

Entre otros mensajes, Mouliaá escribió “NO. Errejón se negó a entregar su móvil porque había extorsionado a dos de mis testigos. No inventéis la realidad”, en respuesta a varias noticias de distintos medios de comunicación

En otro tuit manifestó que "lo fuerte es que sabiendo que Errejón no ha querido entregar su móvil y que ayer uno de mis dos testigos a los que extorsionó confesó haber estado hablando con el acusado… ¿Cómo es posible que se lancen estas noticias? Si es un discurso automáticamente NULO! No valen esos testigos. Automáticamente están contaminados".

La querella expone las conversaciones que Mouliaá mantuvo con S. G. por WhatsApp antes de que la testigo tuviera que declarar.

S.G. "le reiteró en varias ocasiones que ella se limitaría 'a contar la verdad' de lo que vio y escuchó, porque era su obligación legal y su deber como ciudadana íntegra, recalcando la injusticia que supondría hacer ingresar a un inocente en prisión, mientras Mouliaá la presionaba para que avalara su versión de los hechos y narrara judicialmente algo que no sucedió", dice la querella.

Cuando compareció ante el juez S.G. afirmó que no habló con Errejón tras la fiesta.

Por su parte, B. V. declaró en el Juzgado que "fue él mismo quien se puso en contacto con Errejón a través de correo electrónico, y no al contrario, ante el 'linchamiento' que estaba sufriendo, 'sintiéndose mal por él' por lo que consideraba una 'injusticia', ya que él percibió los hechos de esa noche de forma muy distinta a los expuestos por Mouliaá en su denuncia".

El testigo añadió que "en ningún momento Errejón le indicó lo que tenía decir".

Manifestó que "la versión de Errejón y la suya sobre lo sucedido esa noche era coincidente, por lo que no podía sentirse presionado por aquel en ningún sentido".

Y "si Errejón 'le hubiera intentado convencer de otra cosa, habría dejado de hablar con él'”, agregó.

La querella señala, además, que la denunciante "conocía perfectamente" que Errejón no entregó su móvil en el Juzgado al estar recurrida esa decisión del instructor, que fue revocada por la Audiencia de Madrid.

Elisa Mouliaá "actuó ilícitamente, con el único fin de difamar, menoscabar el honor, destruir la credibilidad y honorabilidad de Iñigo Errejón", afirma la querella.

Le imputó "falsamente" la comisión de un delito de extorsión respecto de dos testigos "que ofrecieron una versión favorable y coincidente con el relato del querellante en el marco del referido procedimiento penal, simple y llanamente porque declararon la verdad de lo sucedido esa noche".

Su objetivo era, además, "desacreditar, públicamente, el valor de dichas diligencias de investigación para contrarrestar las noticias de prensa", afirma.