Cientos de jueces y fiscales se concentran por primera vez ante el Supremo: "Que la política saque sus manos de la Justicia"

Uno de ellos, ya en tramitación parlamentaria por vía urgente, cambia el sistema de acceso a la carrera judicial. El otro, aún un anteproyecto, refuerza los poderes del fiscal general y devalúa al Consejo Fiscal, el único órgano de representación de la carrera.

Estos proyectos amenazan la independencia judicial y la autonomía de los fiscales, consideran las organizaciones convocantes: las mayoritarias Asociación Profesional de la Magistratura y Asociación de Fiscales, la Asociación de Jueces y Magistrados Francisco de Vitoria, Foro Judicial Independiente y Asociacion Profesional e Independiente de Fiscales.

Apoyadas por movimientos espontáneos de jueces y fiscales no asociados, las cinco asociaciones lideran el malestar acumulado por los sistemáticos ataques políticos (incluso desde el Gobierno, también del propio ministro de Justicia) a un poder del Estado al que nunca se han dado los medios necesarios para hacer frente a los millones de asuntos pendientes de respuesta en los Juzgados y que ahora es objeto de nuevas reformas que, a su juicio, incrementan la injerencia política.

"La independencia judicial, clave para hablar de una democracia real y de una verdadera integración en la Unión Europea, hoy está bajo amenaza por las recientes iniciativas legislativas", afirma un comunicado leído durante la concentración.

Desde magistrados del Tribunal Supremo como Diego Córdoba, Sebastián Moralo, Antonio del Moral, Antonio Fonseca, Eduardo Porres, José Luis Requero, Francisco Sospedra o Esperanza Córdoba; fiscales de Sala como Consuelo Madrigal, Jose Miguel de la Rosa Jesús Tirado, Elvira Tejada, Javier Zaragoza o Javier Huete; el fiscal de Sala y exmagistrado del Tribunal Constitucional Antonio Narváez o la exvocal del Consejo General del Poder Judicial Gemma Gallego y, sobre todo, cientos de jueces y fiscales de a pie han coreado bajo un sol de justicia proclamas a favor de la independencia judicial -la más oída- o "Fiscalía independiente". 

Unas 3.000 personas, según los organizadores, han secundado la concentración. Ante la imponente fachada del Palacio de Justicia, sede del Tribunal Supremo, los asistentes han exhibido pancartas en inglés apelando a Europa: "Europe, save the rule of law in Spain". ("Europa, salva el Estado de Derecho en España").

Decenas de personas durante una concentración de jueces y fiscales frente al Tribunal Supremo. E.P

Y muchas otras relacionadas con el contenido de las reformas que se rechazan: "Justicia independiente, equidad para todos, impunidad para nadie" o "mérito, capacidad y despolitización: garantía de independencia".

Los organizadores han remarcado el carácter apolítico de la iniciativa, que precede a la huelga de jueces y fiscales convocada para los próximas días 1, 2 y 3 de julio.

Incluso han acallado de forma vehemente a algunos de los presentes, ciudadanos ajenos a las carreras judicial y fiscales, que han comenzado a insultar al presidente del Gobierno o a pedir su dimisión. "Los insultos nos perjudican. No es necesario insultar. Los insultos no son de jueces y fiscales", ha gritado el portavoz de AJMFV, Sergio Oliva, que en ese momento leía el comunicado conjunto de las asociaciones

El escrito ha subrayado que el acto "no es contra el poder ejecutivo, tampoco es contra el poder legislativo: es un acto a favor del Poder Judicial: estamos aquí para defender lo de todos".

El comunicado resaltaba que la reforma judicial que se proyecta "no responde a demanda social alguna" y "ha recibido un informe técnico muy crítico por parte el Consejo General del Poder Judicial", recordaron.

Esa iniciativa "va a rebajar la excelencia de conocimientos en el acceso a las carreras judicial y fiscal, eliminando contenido esencial para nuestra formación, a la vez que introduce pruebas más subjetivas y susceptibles de filtración", señalaron.

"Pretende meter la política dentro del órgano que debe velar por la ética de los jueces" y "crea un centro de preparación de opositores dependiente directamente del Gobierno, esto es, el poder ejecutivo interviniendo en la selección de los miembros del poder judicial, con el consiguiente riesgo de selección ideológica de los futuros jueces y fiscales del país", añadieron.

Varias personas durante una concentración de jueces y fiscales frente al Tribunal Supremo, en Madrid.

Y "sin que Europa lo exija, se quiere modificar la base de ambas carreras convirtiendo en jueces y fiscales a mil jueces y fiscales sustitutos, o peor, a quienes simplemente acumulen cinco años de experiencia profesional en lo que sea, mediante la realización de un simple dictamen práctico y, consecuentemente, yendo en contra de los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, perjudicando a las promociones más jóvenes y a los miles de opositores que se están sacrificando para alcanzar su sueño de ser juez o fiscal", destacaron.

"En definitiva", resumía el comunicado, "se crean diferentes vías de acceso para ser juez o fiscal: una, ardua y difícil, de mucho estudio, para quienes no tienen contactos, y otra más sencilla para que la transiten aquellos a quienes le interese en cada momento al poder político".

Respecto a la carrera judicial, el comunicado ha subrayado que "se quiere aumentar el poder del fiscal general del Estado, quien, como jefe de todos los fiscales, seguirá nombrándose por el Gobierno sin ningún tipo de filtro previo".

"A la vez se pretenden eliminar las garantías de autonomía de los fiscales, reduciendo las posibilidades de oponerse a las órdenes de sus jefes", han denunciado. "Fiscales a los que, en estas condiciones, se les quiere dar dos cosas: el mando de la policía judicial (UCO y UDYCO incluidas) y la investigación de los delitos, en sustitución de los jueces de instrucción".

"Nadie duda de la alta capacitación y de la profesionalidad de los fiscales españoles", precisaron, "Lo que cuestionamos es el sistema en el que se pretende que ejerzan su trabajo, un sistema que, tal y como se quiere diseñar, incrementará aún más si cabe, en contra de las exigencias europeas, el riesgo de injerencias políticas en las causas que interesan a cualquier Gobierno, que son las causas de corrupción".

Las asociaciones pusieron el énfasis en el carácter no partidista de su reacción. "La existencia de un Poder Judicial fuerte e independiente no es un derecho de los jueces, es una garantía de todos, como lo es tener una Fiscalía verdaderamente imparcial y libre de injerencias políticas", señalaron

"Ambas exigencias, que suponen que la política saque sus manos de la Judicatura y la Fiscalía, son imprescindibles para preservar la buena salud democrática de un país".

"Se busca un Poder Judicial más débil"

A su parecer, estas reformas van encaminadas a convertir al Poder Judicial en "un poder con minúscula, un poder más débil en su función de servir de contrapeso, más maleable y sensible a las presiones mediáticas y del poder político".

"Los jueces y fiscales no queremos la huelga", aclararon. "Nos duelen los justiciables y sus abogados y procuradores porque sabemos que sus pleitos se demoran años por la falta de medios, y lo que menos necesitan es una suspensión o un aplazamiento", añadieron para recordar que llevan "lustros" reclamando una masiva creación de plazas judiciales y fiscales.

"Pero, llegados a este punto, parece que no nos queda más remedio que acudir a esa huelga", concluyeron ante la nula receptividad del Gobierno a sus demandas.

Las asociaciones dieron las gracias "a esos ciudadanos preocupados al ver a sus jueces y fiscales reclamando, no más salario ni mejores condiciones de trabajo, sino una mejor justicia, una mejor fiscalía. Gracias por haber decidido acompañarnos hoy, independientemente de vuestra ideología, para mostrar vuestro apoyo en la defensa y protección del Estado de Derecho".