Eugeni Gay (Barcelona, 1946), ex vicepresidente del Tribunal Constitucional, órgano del fue magistrado durante casi 11 años, es crítico con una eventual ley de amnistía para los encausados por el proceso soberanista catalán. Aunque considera que el silencio de la Constitución permitiría legislar en ese sentido, afirma que una ley que borre delitos "no se compadece con la democracia" y se pregunta: "¿Cabe amnistiar a unos y no amnistiar a todos los que han cometido los mismos delitos, por ejemplo, el de malversación?".

Gay señala, rotundo, que Carles Puigdemont "está sometido a la ley" y "debe comparecer ante el tribunal que le ha citado". No es admisible, dice, que alegue que no ha cometido ningún delito: "No nos corresponde juzgarnos a nosotros mismos".

La conversación con EL ESPAÑOL se produce recién llegado Eugeni Gay desde Barcelona para participar en el homenaje a Juan José Laborda, expresidente del Senado, al que asistieron el pasado jueves en Madrid 150 personalidades de la vida pública española.

Inevitable recordar la época en la que Gay formaba parte del Tribunal Constitucional (TC), adscrito —según la etiqueta mediática— al sector progresista. El jurista ha rechazado siempre cualquier encasillamiento ideológico. Una muestra: se alineó con los magistrados conservadores en alguna sonada ocasión, como cuando votó a favor de suspender la aplicación de la ley del aborto de Zapatero mientras se resolvía el recurso de inconstitucionalidad del PP.

En sentido contrario, apoyó la legalización de Bildu en mayo de 2011, cuando el TC revocó, por el estrecho margen de seis votos a cinco, la sentencia del Tribunal Supremo que había anulado las listas de la coalición para los comicios municipales por considerar Bildu era el proyecto del complejo ETA/Batasuna para volver a las instituciones.

Sí admite una etiqueta: "Soy muy catalán", dice. Gay apoyó la sentencia del TC que avaló la mayor parte del Estatuto de Cataluña de 2006, pero formuló un voto discrepante de la "incorrecta" sostuvo afirmación del tribunal de que carecen de "eficacia jurídica interpretativa" las referencias que contenía el preámbulo de la norma a "Cataluña como nación" y a "la realidad nacional de Cataluña".

"Es indudable que Cataluña, como afirma el preámbulo del Estatuto, es fruto de un proceso histórico 'de muchas generaciones, de muchas tradiciones y culturas', origen de un 'pueblo' que ha expresado su vocación de autogobierno, de tal modo que la definición de Cataluña como nación resulta lógica en el contexto en el que así lo manifiesta", escribió en el voto particular.

El exvicepresidente Eugeni Gay, fotografiado por EL ESPAÑOL.

El exvicepresidente Eugeni Gay, fotografiado por EL ESPAÑOL. Javier Carbajal

Lleva a gala haber sido decano del Ilustre Colegio de Abogados de Barcelona (1989-1997) y fue el primer letrado no ejerciente en Madrid que presidió el Consejo General de la Abogacía Española (1993-2001)

La amnistía supone el olvido del delito sobre la base de que la ley no responde a los principios del Estado de Derecho o se ha aplicado de forma injusta. ¿Ésta es la situación de los afectados por el procés?

Lo primero que hay que decir es que hay que respetar el Estado de Derecho y los poderes del Estado de Derecho. El procés fue juzgado, sentenciado y luego, mientras los condenados estaban cumpliendo sus penas, obtuvieron el indulto, que es algo que prevé la Constitución y que prevé desde siempre el Derecho penal.

La amnistía cabe, pero no se compadece con la democracia. Por eso ninguna Constitución democrática prevé una ley de amnistía, porque la Constitución supone, precisamente, la constitución de un Estado de Derecho y un Estado de Derecho es el respeto a la ley de todos los españoles y el escrupuloso respeto a lo que haga cada uno de los poderes del Estado.

La Constitución no dice nada sobre la amnistía y el legislador es libre de poder legislar sobre eso. Ahora, ¿cabe amnistiar a unos y no amnistiar a todos los que han cometido los mismos delitos, por ejemplo, el de malversación? Yo quisiera ver qué tipo de ley de amnistía se piensa hacer porque, en principio, no está prevista una ley de amnistía, es decir, una ley de olvido o de inexistencia de un delito. Y ésa es la gran diferencia entre un país democrático como el nuestro y unas situaciones que no respondan a lo normal, por ejemplo, un estado de guerra o una dictadura en la que pueda haber perdón. Ahí cabe la ley de amnistía, como cupo la del año 77.

Pero entonces no había Constitución.

No había Constitución, pero cabía la amnistía porque estábamos construyendo un Estado de Derecho, y para hacerlo tenían que participar todas las fuerzas políticas y todas las sensibilidades. Todas las sensibilidades cupieron en la Constitución Española, incluso las que están contra la democracia. En la democracia y la nuestra no es una democracia militante cabe cualquier opinión política, aunque sea contraria a la Constitución, pero no puede saltarse la Constitución.

Una vez instaurado el Estado de Derecho, ¿qué encaje tendría una ley de amnistía?

Lo veo difícil. Se compadece mal con la democracia, no cabe duda. Si no, las constituciones democráticas preverían leyes de amnistía, lo que no sucede. Prevén el indulto y, en nuestro caso, prohíben los indultos generales, que vendrían a ser también una especie de amnistía.

Cuando los jueces han juzgado conforme a la ley, se han de respetar las resoluciones judiciales. No solamente respetar: cumplir. El Ejecutivo tiene la facultad de conceder una medida de gracia, como ha ocurrido en el caso del procés con los procesados que fueron juzgados. Otros señores que fueron citados por el Tribunal Supremo y debían comparecer no se presentaron y no han sido juzgados. Yo entiendo que deben presentarse porque han sido citados para ello.

Y someterse al proceso judicial...

Claro. No puedes decir: "Es que yo me someto voluntariamente al proceso". El proceso es una decisión de un órgano jurisdiccional y, si me citan, no puedo decir: "Me niego ir al proceso". Estoy sometido a la ley y si quien me procesa es una persona investida de la jurisdicción no puedo negarme a asistir.

O sea, la respuesta más acorde con los principios del Estado de Derecho sería, en su opinión, que Carles Puigdemont y los demás prófugos del procés regresaran, se sometieran al proceso y, en su caso, fueran indultados.

Hasta que no sepamos si van a estar o no presentes donde deben de comparecer, que es el tribunal que les ha citado, me resulta muy difícil pensar que se pueda amnistiar.

No tendrían que comparecer si son amnistiados porque la amnistía borra el delito.

Es que hay delitos de malversación. ¿Todos estos delitos quedan amnistiados para todos los que los han cometido y han sido condenados o solamente para unas personas?

Para los implicados en el procés.

Si solamente es para unas personas se pone muy en tela de juicio el principio de igualdad de los españoles. Tendría que resolver el Tribunal Constitucional si se adecúa o no a la Constitución, en el caso de que se impugnase.

Y el Tribunal Constitucional debate en Derecho, no puede debatir políticamente, ¿eh? Le puedo decir que mientras yo estuve en el Tribunal Constitucional, cuando alguien fundamentaba en valores no jurídicos, que el presidente o algún compañero le decían: "Perdón, que nos estamos separando de nuestros parámetros, nosotros no podemos hacer una valoración política de la ley".

Hay que debatir en Derecho, que es a lo que está sometido el juez constitucional, que jura la Constitución. Como también jura o promete el resto de los poderes. A veces no somos conscientes de qué juramos. Y un juramento o una promesa compromete la actuación delante de los ciudadanos. Haga el juramento que le parezca: "Juro la Constitución, que es muy buena" o "Juro la Constitución, que quiero cambiar". Pero, mientras jure la Constitución, está sometido a ella.

Puigdemont también prometió la Constitución como diputado el Parlamento de Cataluña.

Y por eso está sometido a la ley. Y por eso se juzgaron los hechos de otoño de 2017. Y hubo una sentencia de obligado cumplimiento para los que fueron juzgados. Hay que recordar que no a todos les pusieron la misma pena ni les condenaron por los mismos delitos. Aquellos que dicen: "Es que yo no tengo que comparecer, porque yo no he cometido ningún delito...". Bueno, mire, un asesino puede pensar que no ha cometido un delito y que ha hecho un acto de justicia y, sin embargo, ha sido un asesino. No nos corresponde juzgarnos a nosotros mismos. Nadie se puede juzgar a sí mismo.

¿Qué compromiso cree que deberían mantener los partidos con los electores? Se lo pregunto porque la amnistía ha sido considerada inviable por el partido en el Gobierno hasta el mismo 23 de julio. Y aparece de pronto en el escenario, sin estar en los programas electorales y también sin ser debatida en la campaña.

Me cuesta mucho juzgar las coherencias de las personas, pero no me parece bien. Aplaudo el discurso que hizo en la apertura de tribunales Francisco Marín Castán, cuando reclamó la renovación del Consejo General del Poder Judicial y dijo que la irresponsabilidad de los partidos políticos daña a la democracia. Si se ha dicho que no hay lugar a la amnistía, como mínimo hay que dar las razones de por qué se cambia, pero razones que sean inteligibles. Si la razón es que se quiere conservar el poder, yo no la comparto.

¿Sería un motivo legítimo para hacer una ley de amnistía que se necesita el apoyo de los amnistiados para seguir en el poder?

Eso lo tienen que decir los ciudadanos con los votos. Si consideramos que es ilegítimo, hemos de votar en contra. Si consideramos que es legítimo, podemos votar a favor. Ahora, decir una cosa un día y al día siguiente la contraria, sin justificarlo, no me parece correcto.

Eugeni Gay./

Eugeni Gay./ Javier Carbajal

Una amnistía que borrara la relevancia penal del procés ¿ayudaría a solucionar lo que se ha llamado el conflicto catalán? ¿O más bien abriría la puerta a otras reivindicaciones como el referéndum de autodeterminación?

Tengo mis dudas de que ayudara. El tema de Cataluña es un tema muy delicado, como el tema de España. Cataluña no es que sea España: Cataluña ha hecho España. No hay más que repasar la historia. Cataluña es España, ha fundado España. El Condado de Barcelona fue el principal de Cataluña y por eso había un príncipe de Cataluña. Luego fue Corona de Aragón, porque el príncipe se casó con la heredera del Reino de Aragón. Y luego el nieto de los Reyes Católicos fue heredero al trono de la Corona de Aragón y la Corona de Castilla... Ahí han colaborado todos los antiguos reinos, señoríos, condados, coronas en la formación de España. Eso es España y es el país más antiguo de Europa.

Pero el conflicto catalán...

(Interrumpe) El conflicto catalán será, en todo caso, un conflicto español. No entiendo el conflicto castellano, el conflicto madrileño, el conflicto cartagenero… no, no. Es conflicto español. No juguemos con España. No se lo admito a nadie jugar con España, ni a los catalanes ni tampoco a los no catalanes. Nadie puede tocar eso. Y menos cuando tenemos una Constitución en la que todos nos pusimos de acuerdo de forma mayoritaria. Respetemos al país, respetemos España, respetemos la democracia y respetemos, por supuesto, la Constitución y la ley. Y protejamos, sin duda alguna, al Poder Judicial.

Le mencionaba la autodeterminación de Cataluña

Es que no cabe. En la Constitución no cabe la autodeterminación de Cataluña ni tampoco que todos los españoles decidiesen que Cataluña no formara parte de España. Imaginemos que en España se dijese: "Estamos hartos de los catalanes, que se vayan...". Eso sería profundamente inconstitucional, aparte de insolidario. Y del otro lado exactamente igual. Y, además, todos los catalanes no son independentistas. Como todos los españoles no son antidemócratas, como pretende el independentismo.