Yolanda Díaz junto a Ione Belarra en una imagen de archivo. EP

Yolanda Díaz junto a Ione Belarra en una imagen de archivo. EP

Política CRISIS EN EL GOBIERNO

Preocupación entre los socios del Gobierno por la ruptura de Podemos: "Ione y Yolanda no se hablan"

"No sabemos con quién negociar en Podemos porque están peleados", admite el portavoz de uno de los socios preferentes del Ejecutivo.

18 marzo, 2022 03:51

La invasión de Ucrania amenaza con cobrarse su primera víctima política en España: la cohesión interna de Unidas Podemos. "No sabemos con quién negociar en Podemos porque están peleados, Ione Belarra y Yolanda Díaz no se hablan", constata el portavoz de uno de los partidos convertidos en socio preferente del Gobierno.

La decisión de entregar armas a Ucrania y el anuncio de Pedro Sánchez de que quiere elevar el gasto de Defensa hasta el 2%, de acuerdo con los compromisos adquiridos con la OTAN, no sólo han abierto una fisura en el seno del Gobierno.

También han puesto en evidencia las discrepancias entre las dos cabezas visibles de la coalición Unidas Podemos: la ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra (secretaria general del partido), y la vicepresidenta de Trabajo, Yolanda Díaz, designada por Pablo Iglesias como cabeza de la lista para las próximas elecciones.

En ambos conflictos, Ione Belarra ha decidido seguir las consignas que Iglesias dicta al partido en su labor de tertuliano y columnista político. Por su parte, Yolanda Díaz ha optado por alinearse con el presidente, Pedro Sánchez, para reforzar la cohesión de la coalición. Los socios del Gobierno apuntan a que la ruptura entre ambas ya es total.

La encuesta de Tezanos

Esta situación de división interna del Ejecutivo se produce cuando comienzan a multiplicarse las movilizaciones en la calle por el deterioro de la economía. Con una agresiva huelga de transportistas que ya provoca problemas de abastecimiento en grandes superficies, una manifestación por el precio de la luz convocada por Vox para el sábado, con el fin de capitalizar el malestar social, y otra de agricultores anunciada para el domingo, que cuenta con el apoyo del PP. La tormenta perfecta.

Tras un nuevo cambio en el método de estimación, la última encuesta del CIS marcaba este jueves un nuevo retroceso de Podemos, que cae del 13,6% de intención de voto registrado en febrero al 11,8%. El CIS de Tezanos anuncia que el nuevo liderazgo de Alberto Núñez Feijóo permite al PP remontar hasta el 23,8%, pero queda a siete puntos largos del PSOE, que alcanzaría un 31,5% (crece casi tres puntos desde febrero).

Todo ello implica un riesgo para el PSOE: que Podemos quede tan debilitado (también por compartir la responsabilidad en las decisiones más polémicas del Gobierno) que la izquierda no pueda sumar en las próximas elecciones.

"Evidentemente, preferimos que suban las fuerzas de izquierdas a que lo hagan las fuerzas de la derecha", ha señalado este jueves en el Congreso de los Diputados el portavoz de la Ejecutiva socialista, Felipe Sicilia, para quien la encuesta demuestra que "los ciudadanos confían en el PSOE y en el presidente Pedro Sánchez en los momentos más difíciles y de mayor incertidumbre".

Divididos frente a Putin

El sondeo del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) trae otra mala noticia para Podemos: el 70% de los españoles está a favor de entregar armas a Ucrania para que pueda defenderse de la agresión ordenada por el presidente ruso Vladímir Putin.

La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha sido la más beligerante con esta decisión y también se ha manifestado en contra de elevar el gasto de Defensa hasta el 2% del PIB: "España necesita más ingresos mínimos vitales, más ayudas para pagar la factura de la luz, más profesores y no más tanques", señaló el miércoles.

Desde el PSOE, Sicilia se muestra convencido de que Unidas Podemos acabará asumiendo la necesidad de aumentar el gasto en Defensa, porque responde a un compromiso internacional adquirido por España: "Pertenecer a un club como la OTAN supone unas ventajas, pero también implica cumplir nuestros compromisos", recuerda.

El proyecto político que la vicepresidenta Yolanda Díaz quiere lanzar para las próximas elecciones generales, en alianza con fuerzas regionales como Compromís, provoca todo tipo de recelos en Podemos, ya que todavía se desconoce qué papel jugará el partido morado en esta operación.

Impuesto a las eléctricas

Yolanda Díaz volvía a dar un paso adelante este jueves al reclamar, en una entrevista en RNE, la creación de un impuesto extraordinario a las eléctricas para compensar a los consumidores por el aumento de la factura de la luz.

Y de nuevo salía a replicar el portavoz socialista Felipe Sicilia para preguntarse, ahondando en la división interna del partido morado: "¿Es una propuesta de Yolanda Díaz o de Podemos? El Gobierno está dispuesto a estudiar todas las medidas. Vamos a hablar con todas las fuerzas políticas para llegar a un gran acuerdo".

Sicilia ha subrayado que, pese a las discrepancias surgidas durante las últimas semanas, "en el Gobierno hay unidad de acción, hay más cosas que nos unen que las que nos dividen".

Otro factor pone las cosas aún más difíciles. Si hasta ahora Podemos había mostrado una gran capacidad para agitar las calles, este fin de semana el Gobierno se enfrenta a varias movilizaciones que exigen medidas urgentes para frenar la subida de la luz y los carburantes, en sectores como el agrario y el transporte.

Vox asalta las calles

La ministra Raquel Sánchez se ha mostrado especialmente contundente al calificar la huelga de transportistas como un "boicot organizado por sectores minoritarios, apoyados en muchos casos por la ultraderecha, que están utilizando la violencia y no los órganos de diálogo establecidos para plantear sus reivindicaciones".

Un diputado de ERC mostraba este jueves en el Congreso su inquietud ante la posibilidad de que Vox logre el sábado una enorme movilización, capitalizando el "miedo" que provoca la guerra de Ucrania y el malestar social, en la manifestación convocada para protestar por la factura de la luz.

Todo ello, señala el mismo representante político, ante la "parálisis" que transmite en la situación actual del Gobierno, que ha decidido centrar todos los esfuerzos en lograr que el Consejo Europeo autorice "desacoplar el precio del gas" de la factura eléctrica, entre otras medidas destinadas a rebajar el recibo de la luz. 

Sólo tras el Consejo Europeo del 24 y 25 de marzo, el Gobierno decidirá otras opciones -como las que reclamaron los barones del PP en la Conferencia de Presidentes de La Palma- para rebajar los impuestos del gas, la electricidad y los carburantes. "No tendría sentido tomar medidas antes", insisten desde el PSOE.