Gamarra defiende que Casado es "implacable contra la corrupción" y lo desmarca de Bárcenas

La actual dirección del PP quiere poner distancia con Luis Bárcenas y desmarcarse ante las implicaciones de la última confesión del extesorero de la formación, en la que admite la existencia de una caja b y acusa a Mariano Rajoy de destruir las pruebas de la contabilidad secreta.

Dos días después de la confesión, el líder popular, Pablo Casado, intentó desmarcarse de esa época. "Ese PP ya no existe", aseguró este viernes. La misma estrategia de desmarque que ha utilizado este sábado la portavoz parlamentaria del partido, Cuca Gamarra, quien ha defendido que la actual dirección del partido no tiene "nada que ver" con el que fuera su tesorero y ha defendido a Casado.

"Casado es implacable con toda conducta que se aparte de un criterio ético y moral y de compromiso y ejemplaridad con los españoles y, por tanto, no tenemos por qué hacer nada más", ha asegurado Gamarra.

La supuesta corrupción en el seno del PP ha vuelto a la primera línea tras conocerse el escrito que Bárcenas ha remitido a la Fiscalía Anticorrupción en el que se ofrece a colaborar. En el documento, el extesorero sostiene que a principios de 2009, tras el estallido del caso Gürtel, entregó una copia de los llamados papeles de Bárcenas a Rajoy, que los trituró en una máquina de destrucción de documentos "sin saber que yo guardaba copia".

Ante estas nuevas informaciones, la dirección del PP se ha visto obligado a marcar distancias. Gamarra ha remarcado que la actual Ejecutiva dirigida, con Pablo Casado al frente, no tiene "nada que ver con ese asunto". "Miramos hacia delante", ha apostillado.

Ante las demandas de algunos partidos de dar más explicaciones en torno a las declaraciones de Bárcenas, Gamarra ha apuntado que es un asunto que está en los tribunales y sobre el que ya han sido "suficientemente contundentes".