Javier Lambán, Emiliano García-Page y Ximo Puig, en una imagen de archivo.

Javier Lambán, Emiliano García-Page y Ximo Puig, en una imagen de archivo. Efe

España

Ximo Puig, Javier Lambán y García-Page dan plantón a Pedro Sánchez en el Comité Federal del PSOE

Los tres mandatarios, tradicionalmente críticos con las directivas de Ferraz, se han ausentado por motivos personales.

18 marzo, 2023 12:00

Los presidentes autonómicos de Aragón, Javier Lambán, Castilla La-Mancha, Emiliano García-Page, y la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, no han acudido este sábado al Comité Federal del Partido Socialista que se celebraba en Madrid en la sede de la calle Ferraz. 

Fuentes cercanas a Page y Lambán -ambos entre los líderes regionales más críticos con la gestión de Pedro Sánchez- han confirmado que su ausencia se debe a motivos personales. Desde el entorno del líder manchego indican que Page no ha podido asistir tras el fallecimiento inminente de una persona cercana, y para este mediodía ya contaba con actos institucionales en la localidad de Tobarra (Albacete).

Desde el entorno del presidente de Aragón aseguran que a Lambán le ha surgido un imprevisto familiar, que ya había confirmado su presencia y lo tenía todo preparado para acudir pero finalmente ha tenido que cancelar su viaje a Madrid.  En el caso del presidente valenciano, la coincidencia de este evento con la festividad de las Fallas en Valencia ha impedido su presencia. 

No es la primera vez que estos líderes regionales declinan asistir a diversos actos de Sánchez con el resto de colegas de partido. De hecho, el pasado mes de noviembre, ni Page ni Lambán acudieron a su estreno como presidente de la Internacional Socialista. Lambán aludió en aquel entonces a que se ausentaba por motivos familiares, sin especificar nada más.

[Page y Lambán 'plantan' a Sánchez en su estreno como líder de la Internacional Socialista]

Puig, Page y Lambán venían mostrándose muy críticos con Sánchez por numerosos motivos. Entre ellos, la reforma de los delitos de sedición y malversaciónEn torno al inicio del pasado mes de diciembre, a raíz de la reforma de estos dos tipos penales, se produjo una suerte de revolución en las filas socialistas y los barones críticos comenzaron a alzar la voz.

Los barones argumentaban que esta clase de reformas resultarían muy difíciles de asumir por muchos ciudadanos fuera de Cataluña. Con las elecciones autonómicas en el punto de mira, algunos barones apostaron por marcar perfil propio. García-Page, que siempre se había mostrado en contra, pidió al Gobierno que "no nos tomen por tontos".

Lambán se sumó a las críticas y dijo, en torno a esas fechas, que "malversar es, en cualquiera de sus modalidades, corrupción". "El Estado no debe desarmarse ante delitos de esa magnitud, sino que debe rearmarse para impedir de manera radical la hoja de ruta del independentismo", añadió.

Limar asperezas

Pese a las reprobaciones que le llegaban de estos barones y su entorno, Sánchez había conseguido limar asperezas con los líderes regionales más críticos con sus decisiones al frente del Ejecutivo. Tal y como apuntó EL ESPAÑOL, el presidente del Gobierno había logrado poco a poco reconducir la relación con algunos de ellos, concretamente con Lambán y Puig. El que se había mantenido todavía alejado era Page. El acercamiento y la foto entre ambos estaba prevista para este sábado pero la muerte de esa persona querida y cercana para Page ha impedido el acercamiento que se iba a producir este fin de semana.

[Cinco barones del PSOE plantan cara a Sánchez en el último mes con la vista puesta en las elecciones]

En el cónclave de este sábado se ratifican las listas electorales de cara a las elecciones próximo mes de mayo. De cara a los citados comicios, en la dirección del partido creen que en algunos territorios la marca de Pedro Sánchez podría hacer un flaco favor a las aspiraciones de sus líderes autonómicos.

Por eso el partido, ahora en periodo preelectoral, no ha venido censurando a sus dirigentes de una forma tan severa cuando se han salido del redil elevando las críticas a Moncloa o a Ferraz, como hizo Lobato con su plan fiscal que contradice a las medidas impulsadas del Gobierno del país. O como han hecho Lambán y Page en repetidas ocasiones. 

El PSOE está intentando conseguir un difícil equilibrio que sea rentable electoralmente: que las medidas económicas del Gobierno ayuden a las candidaturas autonómicas, que los candidatos tengan su propio tirón desvinculándose de las medidas poco populares del Ejecutivo, pero que no se desvinculen tanto como para perjudicar a la marca.