Cartel de Diana Quer en uno de los coches de Protección Civil desplegados en el operativo.

Cartel de Diana Quer en uno de los coches de Protección Civil desplegados en el operativo. G. Araluce

España

La Guardia Civil reduce a un radio de 7 kilómetros la búsqueda de Diana Quer

Los agentes tratan de averiguar qué hizo la joven desaparecida entre las tres y las cuatro de la madrugada en la localidad de Taragoña.

10 octubre, 2016 12:52

Noticias relacionadas

Siete kilómetros. Ese es el radio en el que se centran las pesquisas en torno a la desaparición de Diana Quer. La Guardia Civil rastrea en este área de Taragoña, el último lugar en el que estuvo la joven desaparecida antes de su desaparición. Tratan de obtener cualquier dato o pista que tenga valor suficiente para esclarecer, al menos en parte, el caso.

De acuerdo a informaciones emitidas por Antena 3, las pesquisas de los agentes se centran ahora en este radio de siete kilómetros. La señal del teléfono móvil de Diana Quer les ha llevado hasta este punto. Según los datos obtenidos a través del terminal, la joven pasó al menos una hora en Taragoña, distante a unos veinte minutos de A Pobra do Caramiñal, donde Diana veraneaba con su madre -también Diana- y su hermana Valeria.

Fue entre las tres y las cuatro de la madrugada. A esas dos horas, el terminal de Diana Quer recibió datos a través de la señal de telefonía móvil ubicada en Taragoña. Las pesquisas se sostienen en buena medida gracias a los avances del equipo tecnológico.

Recorrido hecho por Diana Quer la noche de su desaparición.

Recorrido hecho por Diana Quer la noche de su desaparición.

Todo apunta a que Diana Quer no se separó de su teléfono móvil la noche en la que desapareció. Tras pasar el rato con sus amigos en el parque de Valle-Inclán -coincidiendo con las fiestas patronales de A Pobra-, Diana emprendió el camino de vuelta a su casa. En algún momento se subió a bordo de un coche que la llevó hasta Taragoña, distante a unos veinte minutos: las señales emitidas por su teléfono móvil así lo certifican.

A partir de ahí, el vacío. Los investigadores tratan de averiguar qué hizo la joven madrileña en esa hora que pasó en Taragoña. Los efectivos sospechan que estuvo en alguna vivienda en desuso de las muchas que hay en este escenario: en Taragoña viven 2.200 personas, pero hay muchas casas vacías que sólo las abren sus propietarios en épocas vacacionales.