"Viendo a mis hijos estudiar, me di cuenta de que seguían igual que yo cuando estudiaba", explica César Lázaro, un padre de 61 años, vecino de Majadahonda. Esta podría ser la inquietud de cualquier padre o madre con hijos en edad de escolarización. La estimulación de su creatividad, en la mayoría de los casos, es algo que no está al alcance de muchos centros educativos, y el hogar se convierte en el laboratorio de la espontaneidad donde los peques pueden desplegar las alas.

Lázaro, en lugar de resignarse, decidió romper con este dictado y el año pasado lanzó el Madrid EducaCiencia Film Festival. Tras una primera edición exitosa, espera que esta renovada fiesta del cine educativo donde los protagonistas son los alumnos y profesores tenga muy buena acogida.

"Es un festival educativo online", define con simpleza Lázaro. Pero en realidad se trata de una iniciativa que ha conseguido reforzar el trinomio institucional, social y empresarial, colocando en el centro una nueva manera de enseñar: con cine. "Es impresionante lo que son capaces de hacer con una cámara y todos juntos", explica la mente detrás del Madrid EducaCiencia Film Festival. "Hemos visto cortos sobre igualdad de género, inclusión social, discapacidad o medioambiente, entre otros".

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Y algunos lo hacen desde la ciencia ficción, ensalzando la figura de los admirados superhéroes. Así es cómo algunos niños deciden demostrar su pasión e interés por los problemas sociales: "La juventud está muy implicada", reconoce Lázaro. 

El año pasado, las películas que se llevaron una estatuilla a casa fueron: Plásticos asesinos (Educación Infantil y Primaria), No tenemos Planeta B (Educación Secundaria, Bachillerato y FP Medio), Recicla… T, (Universidad y FP Superior), De mayor (Inclusión y Educación Social) y Cambiamos palabras por signos (Película más votada por el público). En total, son 6 las categorías del certamen. Todas ellas —con una duración inferior a los 15 minutos— se pueden visualizar en la plataforma de MecFilmFestival. 

"Un YouTube para y por la educación"

Lázaro cuenta que el objetivo de la plataforma no es solamente tener un soporte a través del cual gestionar el contenido que evalúa el público y el jurado del festival, sino crear "un YouTube para y por la educación" al que podrán acceder los alumnos y profesores en el aula porque, afirma, "la gente quiere aprender". 

Cuando crezcan más —en contenidos y audiencias—, los videos estarán organizados por categorías y permanecerán ahí. Lo que diferencia los videos que recibe esta plataforma de otros que se pueden encontrar en otras plataformas es cómo se aproximan a las temáticas. "La cercanía es lo que caracteriza a nuestra plataforma; hay que contarlo y la mejor forma es hacerlo de manera simpática", defiende Lázaro. 

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Uno de los cortos que más inspiraron a Lázaro trataba la donación de sangre. "Es superdidáctico", recuerda. "Ellos te cuentan qué tipos de sangre hay y cuándo es mejor donarla… ¡Y solo en dos minutos!", explica. Este padre y profesional del mundo audiovisual está muy orgulloso de lo que se ha conseguido con el festival: "Todas las películas terminan con final feliz, parten de un problema y lo arreglan". 

Un movimiento para empoderar a los chavales

"Su mensaje es: 'eliminemos todos los problemas que existen y busquemos soluciones'", afirma Lázaro. El festival de cortometrajes no es la única iniciativa que desarrolla. Desde el año pasado, ha conseguido que muchas empresas, entidades públicas y personalidades del mundo de la ciencia, se suban al carro del empoderamiento de los niños y adolescentes a través de la educación, impulsando ambiciosas acciones. 

Durante el trascurso de la primera edición, colaboraron con el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) durante sus jornadas Ciencia en el Barrio para divulgar un proyecto. Y además, organizaron una exposición el pasado mes de junio con la colaboración de Norma Editorial, la Agencia Europea Espacial, el INTA y el CSIC, bajo el rótulo Ciencia, Espacio, Superhéroes y Comics en el Palacio de Hielo de Madrid.

"A los niños y niñas les encantan los superhéroes", sostiene Lázaro. Por eso se aventuraron a organizar un taller que contó con la participación del astrofísico madrileño José Antonio Caballero, que participa en el proyecto CARMENES. "Fue fantástico, José Antonio es un amante de los cómics de superhéroes y les explicó a los niños y niñas cómo se relacionaban con los conocimientos científicos", señala Lázaro. 

El pasado mes de junio, organizaron una conferencia titulada Mujeres Líderes en Ciencia y Tecnología moderada por Sol de la Quadra-Salcedo, la hija del mítico periodista y trotamundos Miguel de la Quadra-Salcedo con otras cuatro científicas españolas. A través de esta iniciativa, desde Madrid EducaCiencia Film Festival querían "convencer y animar a las jóvenes estudiantes a perseguir carreras STEM". Ellas, tal como relata Lázaro, "contaron su experiencia personal y lo orgullosas que estaban de llegar a donde están". 

Lázaro adelante que la próxima iniciativa que quieren llevar a cabo estará relacionada con la Inteligencia Artificial (IA). Partiendo de los beneficios de esta tecnología aplicada a la educación, "queremos reunir a expertos de distintos ámbitos para que nos den las claves de cómo utilizarlas en el aula de manera segura". "Hay un componente ético muy importante", reconoce Lázaro. 

El camino hacia la II edición

El balance de la primera edición han sido 86 candidaturas en total, 8 comunidades autónomas representadas, y 3 países participantes. "Además de las películas de España, tuvimos una del colegio Inshuti (Ruanda) y del John Jay College of Criminal Justice (Estados Unidos)", señala Lázaro. Este año esperan que haya más escuelas que presenten sus originales trabajos. El proceso que siguen las películas es el siguiente: 

1. Apertura del período de inscripción (1 de septiembre de 2023)
2. Registro y acceso en la plataforma Subida del corto a la plataforma Madrid EducaCiencia Film Festival.
3. Subida del corto al servicio. 
4. Proceso de aprobación por el equipo del festival. 
5. Publicación en la plataforma - desde entonces se podrá votar la pieza audiovisual. 
6. Se cierra el período de inscripción (31 de marzo de 2024). 
7. Termina el período de votación (10-12 días después).
8. Período de deliberación de los jueces. 
9. Anuncio de los ganadores en cada categoría. 

"No hace falta que sean películas de un altísimo nivel cinematográfico, no es como un festival profesional como Cannes o San Sebastián", bromea Lázaro. Y asegura que a los jueces, entre los que se incluye la vicepresidenta y editora de los verticales ENCLAVE ODS y Magas de este diario digital, Cruz Sánchez de Lara, "en realidad les gustan todas las películas porque es una forma de apoyar el arduo trabajo de los niños, niñas y adolescentes que han participado", añade. 

Lázaro adelanta que en esta II edición "es probable que los ganadores premios muy generosos y que irán como anillo al dedo para los centros escolares que representan". "Estamos muy ilusionados; queremos que el cine se convierta en una herramienta para educar en las aulas", comenta. Y añade: "¿Quién sabe? El próximo Almodóvar podría estar ahora en clase".