Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha (Ó. HUERTAS)

Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha (Ó. HUERTAS)

Región CAMBIO DE CRITERIO A LAS POCAS HORAS

Así explicaba Page por qué se decidió que siguiese habiendo clase: "Se puede coger en un columpio"

12 marzo, 2020 13:18

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, comparecía este jueves a mediodía para informar sobre las nuevas medidas adoptadas en la comunidad autónoma para detener, en la medida de lo posible, la propagación del coronavirus. Entre ellas, el cierre a las visitas en todos los centros de mayores, la suspensión de los eventos culturales multitudinarios y de los actos con colectivos vulnerables como las personas de avanzada edad, entre otras. Sin embargo, el Comité Ejecutivo de Respuesta y Preparación Frente al Coronavirus de Castilla-La Mancha, que se había reunido durante casi tres horas, no consideraba necesario en base a la situación actual suspender las clases en los centros educativos de la región. Pocas horas más tarde, después de que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, recomendase a todas las regiones poner fin temporalmente a la actividad lectiva en todos los niveles educativos, Castilla-La Mancha decidía suspender las clases desde este mismo viernes.

Durante la rueda de prensa de la mañana, el propio García-Page insistía con vehemencia en que la autoridad sanitaria no recomendaba, en ese momento, cerrar las guarderías, colegios e institutos de Castilla-La Mancha, algo que sí habían hecho la Comunidad de Madrid o el País Vasco, y también la propia Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), algo que ha provocado fuertes críticas de parte del presidente.

"La experiencia nos ha demostrado, a lo largo de estos 15 días, que la prudencia ha limitado por completo el riesgo e, incluso, que la prohibición de ir a clase puede ser lo que más complique o disperse el virus.No vamos a plantear, hoy por hoy, la suspensión de la actividad lectiva aunque no lo descartamos a medio o largo plazo siempre que lo recomiende la autoridad sanitaria regional y también nacional", explicabaPage. Sin embargo, todo acabó precipitándose muchísimo antes de lo previsto.

El jefe del Ejecutivo autonómico llegaba a señalar: "Es mejor que (los alumnos) se laven 3 o 4 veces al día las menos en los colegios antes que dejarles sueltos en los parques, en las calles o en los centros comerciales". "El contagio se puede producir perfectamente en un columpio", añadía.

Además, Page explicaba que la intención de Castilla-La Mancha era analizar la decisión a tomar "centro a centro" en el caso de que apareciesen casos positivos por coronavirus en la comunidad educativa, como ya ha ocurrido en las provincias de Guadalajara o de Toledo.

En la misma línea que el presidente, la consejera de Educación, Cultura y Deporte, Rosa Ana Rodríguez, afirmaba durante el pleno celebrado en las Cortes regionales que el Gobierno de Castilla-La Mancha no podía tomar la decisión "en este momento" de cerrar los centros educativos en la región porque, según explicaba, el número de casos no lo aconsejaba y las autoridades sanitarias no lo habían indicado.

Finalmente, Castilla-La Mancha, en torno a las 17 horas de este jueves, Castilla-La Mancha ha acabado anunciando la suspensión de las clases a partir de este mismo viernes, tal y como le pedían los sindicatos educativos y en línea con el resto de regiones españolas.