El cultivo del pistacho en España es un sector en auge. Nuestro país cuenta con un clima ideal para el cultivo de este árbol de clima mediterráneo, con temperaturas suaves en invierno y cálidos veranos. En los últimos años, la superficie plantada de pistacho en nuestro país ha aumentado de forma considerable, pasando de 2.000 hectáreas en 2006 a más de 55.000 hectáreas en 2023. Una extensión que tiene a Castilla-La Mancha como la principal zona de producción, con más del 75 % del total de hectáreas cultivadas, seguida a gran distancia por Andalucía, Extremadura y Castilla y León.

Una de las empresas españolas que más ha apostado por este cultivo en la región ha sido Atitlan, el grupo empresarial valenciano liderado por Roberto Centeno -yerno de Juan Roig (Mercadona)- y Aritza Rodero, que tras la desinversión con la venta de sus olivares en 2022 ha enfocado su actividad agroindustrial hacia la producción del pistacho en Castilla-La Mancha. A través de Elaia, la plataforma de agroalimentación del grupo, Atitlan ha incorporado 800 nuevas hectáreas de este cultivo hasta alcanzar las 3.200 dedicadas a su producción.

Una extensión suficiente para que el grupo empresarial se haya incorporado como mayor accionista -aunque su posición no supera el 50 %- del proyecto La Mancha Farms Pistachos S. L., la mayor procesadora de pistacho de España que se está construyendo en la carretera de El Bonillo, en Socuéllamos.

En este término municipal ciudadrealeño, La Mancha Farms ha iniciado la edificación de la procesadora dentro de una parcela de unos 45.000 metros cuadrados y una inversión inicial de nueve millones de euros. Un equipo, cuya puesta en funcionamiento se prevé para dentro de un año, capaz de tratar cerca de diez millones de kilos de pistachos al año y con unas expectativas de empleo cercanas a las treinta personas.

La Mancha Farms Pistachos es una sociedad limitada dedicada al cultivo de frutas, frutos secos, especias y cultivos para bebidas constituida en febrero de 2022 y domicilio social en Socuéllamos.

Por su parte, el grupo empresarial Atitlan logró en 2022 un beneficio neto consolidado de 73 millones de euros gracias a la desinversión de activos en olivar y almendro hacia otros cultivos como el pistacho, aguacate o los cítricos.

La compañía cuenta con una red de compañías variada y agrupada en los sectores agroalimentarios (Elaia, Guillem Export, Sea Eight), energía (Helios), inmobiliario (Ares), industria y servicios (Padel Galis, Imex Products y The Bridge), además de una cartera de inversiones financieras de más de 125 millones de euros, entre ellas la participación en el fondo de deuda alternativa Terram Capital.