Con un rotundo éxito de participación y con las victorias de Jorge Rodríguez (Liberbank Club Atletismo Toledo) y Silvia Rey (TrainingRey Mendinox) se ha saldado este domingo una nueva edición de la Legua Solidaria Villa de Esquivias. Una prueba en la que los registros y la competición quedan en un segundo plano porque el verdadero triunfo se alcanza con la causa que se persigue, que este curso ha sido la recaudación de fondos para la Fundación CIEN (Fundación Centro de Investigación de Enfermedades Neurológicas).

Así, el éxito ya se cosechó cuando durante la semana se agotaron los dorsales de una prueba que ha vuelto a resultar multitudinaria, con más de medio centenar de deportistas dispuestos a brindar un bonito espectáculo en Esquivias. Sobre una distancia de una legua, algo más de cinco kilómetros, el gran vencedor ha sido Jorge Rodríguez, del Liberbank-CAT, que ha cruzado la meta en primer lugar con un tiempo de 18:34. Por detrás de él se ha clasificado Luis Miguel Pascual (Correcobeja), con un registro de 19:35; mientras que el tercer escalón del podio ha correspondido a Aitor García (CA Alcorcón), quien ha completado la carrera en 19:39.

En la categoría femenina, la victoria ha ido a parar a manos de la joven Silvia Rey (TrainingRey Medinox), en una jornada muy especial para ella. Y es que, en los prolegómenos de la carrera se guardó un minuto de silencio en memoria de su abuelo Julio Rey, el entrenador y padre del plusmarquista nacional de maratón de su mismo nombre, que falleció este verano. La toledana dejó patente que lleva en sus genes el atletismo y se impuso con un tiempo de 21:15, por delante de Miriam Carbonero (Atletismo Alcorcón) y Ana María del Cerro (Evedeport Runners San Miguel).

En la carrera, además del citado récord de España de maratón, un Julio Rey que nunca se pierde la cita en Esquivias, han participado un gran número de deportistas de la zona de Madrid, de la provincia de Toledo y corredores locales. Entre estos últimos, cabe destacar la actuación de Javier Espinosa (CA Seseña), primer esquiviano en cruzar la línea de meta.