El Real Madrid demostró este miércoles que puede jugar de una manera diferente a lo que ha venido haciendo en los últimos años ante el Mallorca. Los blancos brillaron en el segundo triunfo de esta temporada en el Santiago Bernabéu, pero, sobre todo, el coliseo merengue disfrutó del juego de los suyos. Carlo Ancelotti planteó un juego diferente con sus rotaciones y Camavinga y Fede Valverde respondieron a la perfección para crear esta versión más vertical.

El fútbol europeo tiende cada vez más a la verticalización y el Real Madrid de Ancelotti ha dado una versión similar al estilo que impera en el viejo continente. Los merengues ya suman 21 goles en 6 partidos y han terminado de un plumazo con el debate sobre la falta de un goleador, pero este miércoles fue más allá abriendo una nueva página del librillo del italiano. Más allá del contragolpe, los blancos propusieron un ida y vuelta con una presión alta a una defensa muy tibia.

Después de la dura derrota en semifinales de la Champions League contra el Chelsea que dominó de esta manera, los blancos han descubierto su versión más canalla. El Real Madrid mandó desde el comienzo y brindó al Santiago Bernabéu un partido como el de sus mejores épocas, pero con matices que hace tiempo que no se veían. Estos encontraron en Fede Valverde y Camavinga su máximo exponente, aunque todo el equipo se comprometió en el trabajo.

Fede Valverde, durante el Real Madrid - Mallorca AFP / Europa Press

Desde Mourinho no se veía un vértigo igual en los blancos, con una implicación total de las bandas que también aprovechaban su velocidad para imponerse. Ancelotti solo descolgaba a Benzema en fase de repliegue para lanzar a sus bandas o a un Asensio que ha encontrado un filón partiendo desde la mediapunta. Además, todos ellos acumularon un buen número de recuperaciones en campo contrario gracias a la alta presión merengue.

Los sustitutos de Case

Pero todo radica en el doble pivote que creó Ancelotti con Camavinga y Valverde, que dotó de intensidad y capacidad de ganar cada choque a los merengues. El recorrido de estos dos jugadores hacía que se viera a ambos prácticamente al borde del área presionando la salida rival.

Esto demostró que esta pareja es la mejor fórmula para suplir a Casemiro. Ancelotti ya lo explicó en rueda de prensa previa al encuentro frente al Valencia: "No tenemos un jugador con sus mismas características, pero tenemos a otros con otras. Ojalá pueda jugar todos los partidos, pero si no puede, encontraremos una solución. El doble pivote es una opción". Esto lo refrendó anoche tras el encuentro: "Hay muchos que pueden jugar en esa posición, pero nadie como Casemiro defensivamente. Lo puede hacer Camavinga, Modric, Valverde, Kroos...".

Eduardo Camavinga, en un calentamiento con el Real Madrid AFP / Europa Press

Asensio se aprovechó desde la posición del '10' de esta circunstancia para ganar libertad, aunque su implicación a la hora de presionar también fue importante. La realidad es que en función del rival y sin Casemiro, Ancelotti tendrá capacidad, cuando tenga a todos sanos, de elegir un centro del campo más creativo o más físico para hacer un juego u otro. Con Camavinga, los merengues han ganado una profundidad y unas opciones muy amplias.

Desde la defensa

Este nuevo juego erigió a Alaba como 'playmaker' ante la falta de una figura más creativa en el centro del campo. El austriaco parecía un 'quaterback' encontrando espacios positivos para los atacantes, que se encontraban siempre perfilados tanto para combinar con Benzema, que agrandaba esas ventajas, o para encarar. Además, aumentó un punto su nivel defensivo visto hasta la fecha.

Si bien es cierto que los centrales deben de corregir algunas taras que han demostrado, sobre todo defendiendo hacia atrás más que hacia adelante, la velocidad del austriaco y de Militao hacen posible que la presión pueda ser más adelantada y el equipo recupere más arriba. Ambos confían muchísimo en sus capacidades físicas, así como para recuperar. Sobre todo, el caso del brasileño es más llamativo ya que no duda al ir al suelo.

A todo esto le queda al Real Madrid recuperar a sus laterales, donde la figura de Ferland Mendy se erige primordial para mantener este nivel durante toda la temporada. Ancelotti ha mostrado una carta muy útil y muy difícil de parar en un campeonato en el que la intensidad brilla por su ausencia. 

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