El mundo de Marcel Proust, uno de los grandes narradores del siglo XX, resumido en diez claves.

Magdalena

Los últimos párrafos de la primera parte de “Combray”, capítulo inicial de Por el camino de Swann, constituyen una de las secuencias fundamentales de la literatura del siglo XX. Una magdalena mojada en té libera la memoria del narrador: “Aquel sabor era el del trozo de magdalena que (…), me ofrecía mi tía Léonie, después de haberlo mojado en su infusión de té o tila”. Simboliza la capacidad de algo (un olor, un sabor) para rescatar viejos recuerdos antes olvidados.

[Marcel Proust: la vida como literatura]

Encierro

La mala salud y la dedicación obsesiva a su obra llevaron a Proust a una reclusión que a partir de 1914 adquiere rasgos de confinamiento severo. Rompe los vínculos con el exterior y se encierra en su cuarto, en el número 102 del Boulevard Haussmann de París, forrado con láminas de corcho para amortiguar los ruidos y potenciar la sensación de aislamiento. El dormitorio de Proust puede visitarse en el Museo Carnavalet, y conserva la cama de latón en la que trabajaba el escritor (y donde murió), su chaise longue, su pelliza y su bastón.

Tiempo y memoria

Son los grandes temas de Proust, que les aplica un tratamiento literario absolutamente personal, complejo, exigente, en el que comparecen el pensamiento, la sensación y la imaginación.

Henri Bergson

En la concepción proustiana del tiempo resulta esencial la influencia de Bergson, casado con una prima de la madre del escritor, y autor, entre otros, de Materia y memoria.

[En busca del modelo escondido: quién es quién en la gran obra de Proust]

Asma

De frágil salud, Proust sufrió ataques de asma desde la infancia, algunos de los cuales estuvieron a punto de provocarle la muerte. Consultó a numerosos médicos, fue diagnosticado como neurasténico y falleció a los 51 años a causa de una neumonía.

André Gide

Proust envió el primer tomo de En busca del tiempo perdido a la editorial Nouvelle Revue de Française, que lo rechazó a instancias de André Gide. Finalmente publicó Por el camino de Swann con su propio dinero en la recién creada Grasset, en 1913. Un año después, Gide reconoció su error en carta al propio Proust, admitiendo que no había leído el texto y que en su decisión había pesado su imagen de “esnob”.

La tumba de Proust en el cementerio Père-Lachaise de París

Tumba

Fue enterrado en el cementerio parisino de Père-Lachaise, donde yace junto a los restos de su padre y de su hermano. Su tumba de mármol negro recibe la continua visita de admiradores. Oscar Wilde y Sara Bernhardt son algunos de sus “vecinos”.

Caso Dreyfus

Proust, cuya madre era judía, evoca en En busca del tiempo perdido la célebre polémica que sacudió la sociedad francesa entre 1894 y 1906. El escritor se posicionó públicamente a favor del capitán Alfred Dreyfus, acusado injustamente de traición.

'El amor de Swann', de Volker Schlöndorff

Cine

Luchino Visconti y Joseph Losey intentaron adaptar, sin éxito, la novela de Proust, algo que sí lograría Volker Schlöndorff en 1983 al estrenar la fallida El amor de Swann, protagonizada por Jeremy Irons, Ornella Muti, Fanny Ardant y Alain Delon. En 1999 y 2000, Raoul Ruiz y Chantal Akerman adaptaron respectivamente El tiempo recobrado y La prisionera (La cautiva).

Arte

Culto y sensible, su obra está plagada de referencias a los salones literarios que frecuentó en su juventud, en los que trató a creadores y artistas. Y escribió: “Solo a través del arte podemos salir de nosotros mismos y saber lo que otra persona ve”.

Cronología

1871, 10 de julio. Valentin Louis Georges Eugène Marcel Proust nace en París.

1880. Sufre su primera crisis asmática grave.

1888. Comienza a frecuentar los salones parisinos.

1889. Ingresa como voluntario en el servicio militar.

1895. Empieza a escribir Jean Santeuil, novela que nunca llegó a terminar.

1896. Publica Los placeres y los días.

1906. Fallece su madre.

1907. Comienza la escritura de Por el camino de Swann, la primera parte de En busca del tiempo perdido.

1913. Publica Por el camino de Swann.

1914. Refuerza su reclusión y su ruptura de vínculos con el exterior.

1919. Publica A la sombra de las muchachas en flor.

1920-21. Publica El mundo de Guermantes.

1922. Publicación de Sodoma y Gomorra.

1922, 18 de noviembre. Muere a los 51 años a causa de una neumonía. En una de sus últimas salidas, el 18 de mayo, coincide en una cena con James Joyce

y Picasso.

1923. Se publica La prisionera.

1925. Albertine desaparecida.

1927. El tiempo recobrado.

1952. Jean Santeuil.