Margarita Salas. Foto Bernardo Díaz

Desde el Centro de Biología Molecular Margarita Salas (Canero, Asturias, 1938) ha puesto -y pone con sus estudios sobre el virus phi29- la ciencia española en lo más alto. Académica de la RAE desde 2003, esta investigadora, que forjó su vocación junto a Severo Ochoa en Estados Unidos, ha visto cómo por los laboratorios españoles ha pasado la mejor generación de talentos de toda la historia. Este viernes abre el Foro de la Cultura en la Universidad de Burgos -organizado en colaboración con la Obra Social "la Caixa" y Fundación Caja de Burgos- con una conferencia sobre la biomedicina del siglo XXI. Salas analizará cómo los avances obtenidos en Biología Molecular han repercutido, y lo harán cada vez más, en la Medicina. "En definitiva, en nuestro bienestar", señala a El Cultural.

Pregunta.- Hemos pasado del genoma de los miles de millones a la secuenciación individual por menos de 1.000 euros. ¿Estamos condenados a la fiscalización de nuestras secuencias genéticas?

Respuesta.- Yo consideraría la secuenciación del ADN desde un punto de vista positivo, porque servirá para diagnosticar y prevenir enfermedades y, eventualmente, curarlas con los tratamientos más adecuados teniendo en cuenta nuestro perfil genético.

P.- La replicación del fago phi-29 es, quizás, una de las más estudiadas en biología molecular gracias a su grupo de investigación. ¿Se puede extrapolar a otros fagos o a otros virus de organismos superiores?

R.- El mecanismo de replicación del material genético descubierto en el caso del fago phi29 ha sido extrapolable a otros fagos así como a virus animales y de plantas.

P.- La polimerasa de este virus, ¿ha sido superada en biología molecular por otras enzimas o todavía tiene vida para largo?

R.- La polimerasa del fago phi29 todavía tiene larga vida y aún no ha sido superada por otra polimerasa distinta a phi29. Sin embargo, nosotros hemos construido variantes de la polimerasa de phi29 que superan a la original producida por el fago.

P.- ¿Considera que el siglo XXI podría ser el del salto a la sociedad de la biología molecular y sus aplicaciones?

R.- La biología molecular ya comenzó su andadura en la segunda mitad del siglo XX y ha producido resultados sorprendentes, tanto desde el punto de vista básico como por sus aplicaciones. Ciertamente, en el siglo XXI seguirá siendo esencial esta disciplina.

P.- Nuevos informes de ámbito internacional siguen situando a la mujer por debajo en cuanto al número de plazas y puestos de relevancia... ¿Dónde seguimos equivocándonos?

R.- Hemos avanzado mucho en la consideración de la mujer, pero aún nos queda algún tiempo para que la mujer alcance la situación que se merece por su trabajo.

P.- ¿Cómo vive la diáspora científica por la que atraviesa España en estos momentos?

R.- Es muy desolador ver que los investigadores jóvenes que adquieren una excelente formación en España tienen muy pocas posibilidades de realizar su investigación en nuestro país.

P.- ¿Qué investigación destacaría de la ciencia española en estos momentos?

R.- En España existen excelentes centros y equipos de investigación que actualmente están realizando investigaciones de gran calidad en diversas áreas.

P.- ¿Ve posible en estos momentos que España dé un científico como Severo Ochoa o Ramón y Cajal?

R.- Es difícil, debido a la poca financiación para la investigación que existe en España y a que todavía somos pocos investigadores en nuestro país.

P.- Lance un SOS a nuestros políticos, algo que deberían hacer de forma urgente para elevar la ciencia al lugar que se merece.

R.- Aumentar la financiación del 1,3% del PIB actual para llegar al 2%, que es la media de la Unión Europea. También deberían eliminar trabas burocráticas.

@ecolote

Burgos, educación y pensamiento

José Antonio Marina, Ángel Gabilondo, Luisgé Martín, Julia Navarro, Agustín Fernández Mallo, Enrique Urbizu, Jaume Plensa, Guillermo Solana, Juan Luis Arsuaga, Antonio Lucas y Stefano Mancuso, entre otros, son algunos nombres que desde este viernes participarán también en el Foro de la Cultura de Burgos, bajo el lema "Identidades, en la frontera". Esta segunda edición que se celebra en la localidad castellano-leonesa pretende, según su filosofía programática, "buscar reflexiones colectivas para huir de las verdades sacralizadas y entender las relaciones sociales como un motor de transformación comunitaria". También estará presente entre sus preocupaciones la globalización de la cultura y sus problemas éticos, educativos, políticos, artísticos y socioculturales. Pensadores, educadores, escritores, científicos, gestores culturales y arquitectos se preguntarán por el papel de la educación en estos procesos y por sus efectos en las identidades culturales, nacionales, religiosas, sexuales y lingüísticas. El programa de actividades fue presentado el pasado mes de septiembre por el escritor griego Petros Márkaris en CaixaForum Madrid.