María López. Foto: Begoña Rivas.

La directora del Museo Carmen Thyssen-Bornemisza de Málaga, María López, y Tomás Llorens, miembro del Patronato de la Fundación Palacio de Villalón, que gestiona esta pinacoteca, han presentado su dimisión tras poco más de 15 días desde la inauguración de este nuevo espacio expositivo de la ciudad.



López ha justificado su dimisión aludiendo al "incumplimiento" de determinados aspectos incluidos en su contrato, mientras que el historiador, en una carta en la que comunica su dimisión, ha dudado de la "credibilidad" del museo.



Llorens, que fue conservador jefe del Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid, alude al nuevo organigrama de la institución malagueña, aprobado el pasado mes de marzo y que supuso la incorporación de la plaza de gerente, que ocupa Javier Ferrer, hombre de confianza del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y hasta entonces coordinador general del Ayuntamiento, dejando a López como directora artística. En ese desplazamiento de última hora se encuentran alguna de las claves de esta controversia.



Elena Vozmediano, presidenta del Instituto de Arte Contemporáneo, ha recordado al hilo de la sorprendente noticia "un principio general que, al parecer, no se ha cumplido en el Museo Carmen Thyssen de Málaga: la necesidad de que la gestión de las instituciones culturales que combinan iniciativa privada y financiación pública se base en acuerdos detallados y públicos que busquen el beneficio de los ciudadanos, no de los particulares o de los partidos políticos".



Para ella, "las prisas por inaugurar el museo han dejado muchos cabos sueltos en la definición de un proyecto sin futuro más allá del tiempo de cesión de la colección. Es habitual que los museos financiados por las administraciones públicas tengan un gerente que supervise la gestión económica, pero no que ese cargo se invente cuando ya está funcionando la institución y sea ocupado por una persona con un claro perfil político. La elevada aportación del Ayuntamiento de Málaga al museo exige la máxima transparencia en todas sus actuaciones y en sus cuentas".



Por su parte, el Museo Thyssen de Málaga ha defendido su modificación de la estructura directiva mediante un comunicado: "Fue introducida en pro de la mejora y optimización en la gestión del Museo Carmen Thyssen Málaga. El objetivo de este cambio ha sido siempre agilizar la gestión interna de la pinacoteca. Dicha estructura bicéfala es la implantada en muchas instituciones culturales homólogas". Y ha añadido que "de ninguna manera, el buen funcionamiento del museo se verá afectado por estas dimisiones, ya que todo el personal de la institución mantiene el ritmo habitual de trabajo y un alto nivel de efectividad".



El Museo Carmen Thyssen-Bornemisza fue inaugurado el pasado 24 de marzo, abriendo al público el día 25. Ubicado en el Palacio de Villalón, una edificación palaciega del XVI, en pleno centro histórico, alberga una colección permanente de la baronesa compuesta por unas 230 obras, que recorren el arte del siglo XIX español, con especial atención a la pintura andaluza.