Nick Kyrgios, en su campaña de OnlyFans

Nick Kyrgios, en su campaña de OnlyFans

Tenis

OnlyFans usa el deporte para lavar su imagen: del patrocinio a Kyrgios a ser el salvavidas de los pequeños, pero sin erotismo

El auge de deportistas en la plataforma evidencia una estrategia para dejar atrás el estigma del contenido sexual y atraer a una nueva audiencia.

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Durante años, OnlyFans ha sido sinónimo de contenido erótico, una etiqueta que le ha valido fama mundial, ingresos millonarios… y también un estigma que limita su expansión.

Desde 2024, la plataforma ha redoblado esfuerzos para romper con esa imagen reduccionista y ha encontrado en el deporte una inesperada tabla de salvación. Su objetivo: atraer a nuevas audiencias, mejorar su reputación pública y convencer a marcas que aún dudan de asociarse con su nombre.

El paso más visible en esta estrategia ha sido la incorporación de tenistas del circuito ATP como embajadores o creadores de contenido en OnlyFans.

Alexandre Müller, luciendo el patrocinio de OnlyFans

Alexandre Müller, luciendo el patrocinio de OnlyFans

Nick Kyrgios fue el pionero en 2023. Pero la gran sorpresa ha llegado con Alexandre Müller, actual número 39 del mundo, que se ha convertido en el nuevo rostro visible de este viraje estratégico.

“OnlyFans quiere cambiar su imagen. No se trata solo de cosas eróticas. Por eso me patrocinan”, aseguró el francés en una entrevista para Clay Tenis.

Cercanía con los fans

Müller, considerado por algunos como “el tenista más sexy del mundo”, ha aclarado que en su perfil no hay desnudos ni contenido explícito.

Lo suyo es el contenido lifestyle: entrenamientos, gimnasio, gastronomía, playa… un acceso privilegiado a su día a día como deportista profesional.

“Uno publica lo que quiera mostrar. En mi caso, cosas de tenis, gimnasio, restaurantes, playa, lo que sea”, explica. Aunque reconoce haber recibido peticiones subidas de tono por parte de sus seguidores, subraya que no las atiende: “No puedo contarlas… es personal”.

Este nuevo modelo es una apuesta de OnlyFans por redirigir su contenido hacia sectores con menos riesgo reputacional y mayor legitimidad pública. El deporte, que combina visibilidad, pasión y grandes comunidades de fans, es un vehículo perfecto para ello.

Müller no ha ocultado que su fichaje no es aislado. Según sus propias palabras, “este año muchos tenistas van a firmar con OnlyFans”, lo que confirma que la plataforma está cerrando acuerdos con más figuras del circuito ATP.

Salvavidas para los humildes

Kyrgios, siempre disruptivo, fue el primero. Pero en el horizonte ya se vislumbra una auténtica ola de deportistas. Y no solo en el tenis. La plataforma ya ha seducido a nombres importantes de otras disciplinas.

La luchadora Paige VanZant, la futbolista Madelene Wright, la boxeadora Ebanie Bridges o la baloncestista Liz Cambage son solo algunos ejemplos.

Esta última, incluso, llegó a afirmar que ganó 1,5 millones de dólares en una semana en OnlyFans, una cifra superior a lo que había ingresado en toda su carrera profesional.

Este fenómeno revela una verdad incómoda: el deporte profesional no garantiza estabilidad financiera para todos.

Liz Cambage, de Las Vegas Aces

Liz Cambage, de Las Vegas Aces Instagram (ecambage)

Mientras los grandes campeones se embolsan contratos millonarios, muchos atletas deben buscar fuentes alternativas de ingresos. Ahí es donde entra OnlyFans, como una plataforma que les permite monetizar su marca personal sin intermediarios.

“OnlyFans me permite pagar a mis entrenadores, tener a mi preparador físico más a menudo en los torneos”, declaró Müller. “Mi año lo planifico según lo que gano”.

Lo mismo ocurre con la tenista australiana Arina Rodionova, quien también ha recurrido a la plataforma para sostener su carrera deportiva.

“Es una señal de los tiempos”, resume el consultor Mark Borkowski, entrevistado por Daily Mail. “El verdadero escándalo no es que los atletas estén recurriendo a OnlyFans, sino que tengan que hacerlo como primera opción”.

Más allá del erotismo

La propia historia de OnlyFans ayuda a comprender esta evolución. Su creador, Tim Stokely, nunca concibió la plataforma como un sitio para contenido sexual explícito, sino como un espacio donde influencers y celebridades pudieran compartir contenido exclusivo a cambio de una suscripción mensual.

Sin embargo, el modelo acabó atrayendo masivamente a creadores de contenido para adultos, lo que generó ingresos millonarios pero también cerró muchas puertas en términos de reputación y alianzas comerciales.

Lucia Javorcekova, la exciclista que se ha pasado a Onlyfans y publica gratis sus contenidos

Lucia Javorcekova, la exciclista que se ha pasado a Onlyfans y publica gratis sus contenidos

Hoy, el objetivo es reconducir esa deriva y volver al concepto inicial. Y ahí es donde el deporte y el fitness ocupan un lugar clave.

OnlyFans ha explicado que “los aficionados quieren conocer a las personas reales detrás de sus estrellas del deporte favoritas, y nuestra plataforma les brinda esa oportunidad”.

Pese al cambio de estrategia, el riesgo reputacional sigue presente, especialmente en deportes donde la imagen pública lo es todo.

Borkowski advierte que todavía hay un doble rasero, sobre todo para las mujeres: “Las cláusulas de moralidad siguen siendo una trampa en un mundo deportivo que se dice progresista, pero es profundamente conservador”.

El caso de la ultrarunner Sabrina Stanley ilustra esta tensión. Tras anunciar su patrocinio con OnlyFans, el debate estalló en redes sociales y foros deportivos. Muchos cuestionaban si una atleta de resistencia debía asociarse a una plataforma con pasado sexual, aunque su contenido no tuviera nada de explícito.

Para OnlyFans, la incorporación de figuras del deporte no solo es un giro estratégico: es una apuesta a largo plazo para reposicionarse en el mercado global.

Si consigue atraer a decenas de atletas, influencers del fitness o músicos, podrá diversificar su audiencia, suavizar su imagen y acceder a nuevas fuentes de ingresos menos estigmatizadas.

Los patrocinadores aún miran con recelo, pero la cultura está cambiando. Los creadores quieren independencia, contacto directo con sus comunidades y monetización sin filtros. OnlyFans se lo da. En palabras de Borkowski: “Es un negocio inteligente”.

Y si figuras como Kyrgios, Müller o Rodionova logran normalizar su presencia en la plataforma, puede que en unos años OnlyFans sea más conocido por su apoyo al deporte que por su vínculo con la industria del sexo.

Porque en esta nueva etapa, la empresa británica ha entendido que el cuerpo sigue vendiendo, pero la reputación también importa.

Y pocas cosas generan más admiración, disciplina y carisma que un deportista profesional en su día a día. Solo queda ver cuántos más seguirán sus pasos. ¿El próximo gran fichaje? Puede estar ya entrenando para ello.