Ni Newey ni Fallows: esto es de lo que más presume Aston Martin de haberle robado al equipo Red Bull para 2026

Aston Martin ha emprendido una de las ofensivas más ambiciosas del paddock de Fórmula 1 en los últimos años con la vista puesta en el cambio de reglamento de la temporada 2026.

Bajo el liderazgo de Lawrence Stroll, la escudería británica no solo ha reforzado sus instalaciones y recursos, sino que ha centrado su estrategia en atraer talento técnico de alto nivel. Y en ese proceso, Red Bull se ha convertido en su cantera predilecta.

Los motivos son evidentes. Red Bull ha sido el gran dominador desde la temporada 2022 y cuenta con un equipo que en parte también fue clave en la otra era de dominio del equipo entre 2010 y 2013.

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Con una estructura técnica liderada por Adrian Newey y una plantilla de ingenieros de primer nivel, su rendimiento ha sido la envidia del resto de equipos.

Pero las tensiones internas vividas recientemente en Milton Keynes -desde la incertidumbre sobre el futuro de Max Verstappen hasta los problemas institucionales- han provocado una fisura que otros equipos no han tardado en aprovechar.

Fuga de talento sin freno

Entre los movimientos más sonados está el propio Adrian Newey, quien, tras casi dos décadas en Red Bull, decidió cambiar de aires y fichar por Aston Martin en marzo de 2025.

Su llegada supuso un antes y un después en la credibilidad del proyecto británico, donde ejerce como director técnico asociado y accionista.

Antes que él, Dan Fallows había abierto el camino. Fue el primer golpe serio de Aston Martin a Red Bull, incorporándose como director técnico en 2022.

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Aunque su etapa terminó abruptamente en 2024 tras los discretos resultados del AMR24, su fichaje marcó el inicio de la estrategia de captación que sigue vigente.

También han llegado figuras menos mediáticas pero esenciales como Giles Wood, experto en simulación, que volvió a la F1 en 2025 para sumarse al proyecto tras trabajar en Red Bull entre 2007 y 2014.

O Gioacchino Vino, actual jefe de aerodinámica, con pasado en Red Bull y Mercedes. Además, Andor Hegedus, responsable de las exitosas paradas en boxes de Red Bull, ahora coordina proyectos en Silverstone.

En total, al menos siete ingenieros han cruzado la frontera entre Milton Keynes y Silverstone, configurando lo que muchos ya definen como una "Red Bull 2.0".

Helmut Marko no ha ocultado su descontento, acusando a Aston Martin de "cazar de forma furtiva" a su personal más valioso.

Adrian Newey, junto a Andy Cowell en su primer día en Aston Martin

El verdadero golpe

Pese a la dimensión de estos fichajes, hay un movimiento que enorgullece especialmente a Aston Martin: haber arrebatado a Honda a Red Bull.

Para 2026, la escudería británica será el único cliente del fabricante japonés, que regresará de forma oficial al campeonato bajo el nuevo reglamento técnico.

Andy Cowell, jefe del equipo británico, no oculta su entusiasmo con un mensaje cargado de confianza y ambición.

"El diseño de la unidad de potencia de Honda encaja como un guante con la parte trasera de nuestro monocasco y la parte delantera de nuestra transmisión", explicó en Dazn.

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El proyecto va más allá de una simple asociación técnica. Cowell explica que se trata de una transformación estructural, donde el equipo pasa de ser cliente a convertirse en socio oficial, algo que le da voz en el desarrollo de la unidad de potencia.

"Es una transformación pasar de ser un equipo cliente a un equipo oficial", afirma el británico, resaltando también la oportunidad que representa el cambio normativo de 2026.

La relación entre Honda y Aston Martin aún no se ha materializado en pista, pero el trabajo en los simuladores y bancos de pruebas ya está en marcha.

Cowell desvela que "el hardware ha sido probado en Sakura y nuestra transmisión ha sido probada aquí, en Silverstone", lo que confirma la fase avanzada en la que se encuentra el desarrollo.

Toshihiro Mibe, CEO Honda Motor, Koji Watanabe, Presidente Honda Racing, Lawrence Stroll, presidente de Aston Martin, y Martin Whitmarsh, CEO Aston Martin Performance Technologies Reuters

Dura despedida de Red Bull

Red Bull y Honda vivieron una asociación dorada entre 2019 y 2024, con múltiples títulos y una sintonía casi perfecta. Pero el giro estratégico de los austríacos, que decidieron apostar por una unidad de potencia propia junto a Ford, ha tenido consecuencias inesperadas.

Koji Watanabe, presidente de Honda Racing Corporation, ha sido tajante respecto a una posible reconciliación futura.

"Eso no es posible en absoluto. Incluso si nos lo pidieran ahora, sería demasiado tarde para hacerlo a tiempo para 2026", dijo a Autosport.

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Las "posibilidades son nulas", ha repetido en diferentes foros, dejando claro que el futuro de Honda está únicamente vinculado a Aston Martin.

La ruptura entre Honda y Red Bull ha dejado a estos últimos ante un desafío monumental. La necesidad de desarrollar un motor competitivo desde cero con la ayuda de Ford, que no tiene experiencia reciente en la categoría, supone una desventaja estructural.

Mientras tanto, Mercedes parece posicionarse como favorito con la mejor unidad de potencia para el nuevo ciclo, y Aston Martin quiere estar muy cerca.

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Inversión sin precedentes

El plan de Lawrence Stroll no termina en fichajes y alianzas. En los últimos años, Aston Martin ha construido una nueva fábrica de última generación en Silverstone, un túnel de viento propio y ha ampliado su plantilla en más del 50%.

Además, han reclutado talento de otras escuderías como Mercedes y Ferrari para completar un equipo multidisciplinar.

Cada movimiento ha sido planeado con un solo objetivo: ser campeones del mundo. Y para ello, 2026 representa una ventana de oportunidad irrepetible.

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Con reglamentos nuevos, unidad de potencia exclusiva y una plantilla reforzada, Aston Martin aspira a romper el techo de cristal que ha limitado su evolución en los últimos años.

Fernando Alonso, uno de los grandes beneficiados de esta ambición interna, también se juega su última bala. El piloto asturiano conoce bien a Honda, tanto en sus luces como en sus sombras.

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Pero esta vez, el contexto es otro. Cowell lo resume con una frase que deja claro el momento que vive el equipo: "Todos quieren estar en las primeras posiciones de la parrilla. Todos quieren hacerlo bien".

Y si bien los titulares los acaparan Newey y Alonso, la auténtica joya del mercado 2026 parece estar bajo el capó.

Red Bull lo sabe, y lo observa con cierta inquietud. Porque en esta guerra silenciosa de fichajes, el gran robo de Aston Martin ha sido hacerse con el corazón del campeón: Honda.