Miguel Molina posa para una entrevista en el concesionario de Ferrari de Madrid.

Miguel Molina posa para una entrevista en el concesionario de Ferrari de Madrid. Borja Sánchez EL ESPAÑOL

Motor

Miguel Molina: "Ganar Le Mans y el Mundial de Constructores ha sido lo más importante de mi vida. Ahora quiero el de Pilotos"

EL ESPAÑOL habla con el corredor del WEC tras convertirse en el primer piloto de nuestro país que gana un Campeonato del Mundo con Ferrari.

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Aunque muchos no sean conscientes de ello, hay vida más allá de la Fórmula 1 en el automovilismo español. De grabar a fuego esta idea en la retina de los aficionados se encargan personas como Miguel Molina (Lloret de Mar, 1989). La suya es una de esas travesías hacia el éxito que merecen la pena ser contadas. Y es que durante años, ha permanecido batallando contra el ostracismo.

Su caso recuerda, en cierto modo, al de pilotos como Alex Palou, otro de los grandes estandartes del motor español que no ha necesitado de la Fórmula 1 para abrirse camino y, sobre todo, para hacer historia. Y es que Miguel Molina lleva años forjando una trayectoria nunca antes vista. Ha pasado de hollar el Everest a conquistar su propia Luna. Y todo, desde el Sol del universo automovilístico: Ferrari.

Miguel Molina es, como antes lo fueron Fernando Alonso, Carlos Sainz o Alfonso de Portago, un 'chico Ferrari'. En los últimos años, el catalán ha vivido la cara amable del deporte, la de estar siempre peleando por las victorias. Sin embargo, no siempre ha sido así. Aunque la fuerza demostrada en los momentos duros y su resiliencia natural le han llevado a forjar un carácter paciente y una mentalidad de hierro.

Como la mayoría de niños que sueñan con ser pilotos, Miguel empezó deslumbrando en el karting mientras seguía por televisión los primeros pasos de Alonso en la Fórmula 1. En ese momento aún no podía sospechar que su camino sería tan diferente al del asturiano. Y aunque pasó por los monoplazas, haciendo su debut en el año 2004, en 2010 cambió totalmente de registro dando el salto a los turismos.

A pesar de haber cosechado alguna victoria y varios podios, fue en el DTM donde llegó su primera gran explosión al convertirse en el primer piloto español en ganar una carrera en esta modalidad del automovilismo. Era la primera vez que hacía historia para nuestro deporte a lo grande, pero no sería la única.

Después llegó el paso a los GT y, sobre todo, al universo de la Resistencia, donde el de Lloret de Mar ha encontrado su verdadero hábitat. En el año 2017 llegó a la escudería AF Corse, lo que le permitió estar vinculado a una casa tan importante como Ferrari, la cual le acogió como si se tratara de su propia familia. Y a partir de ahí llegaron los años más dorados.

Triunfos como el de las SprintX GT Championship Series o el de las European Le Mans Series le sirvieron para hacerse un nombre y, sobre todo, para encontrar la oportunidad de su vida: formar parte de la estructura de Ferrari en la modalidad de los Hypercar a partir de 2023. Ese fue el año en el que nació el proyecto con el que Ferrari se ha convertido en el mejor equipo del Campeonato del Mundo de Resistencia.

Tras seis títulos consecutivos de Toyota en el Campeonato de Constructores, este año, la escudería del Cavallino Rampante ha conseguido romper con esa hegemonía. Además, ha supuesto un momento vital para la marca, la cual no ganaba un Mundial por equipos desde que lo hiciera en el año 2009 en la Fórmula 1.

Un triunfo del que Miguel Molina ha sido partícipe escribiendo otra página más en su legendaria carrera y es que el catalán se ha convertido en el primer piloto español de la historia en ganar un mundial con la escudería italiana. Un hito que suma a su victoria en las 24 Horas de Le Mans del año pasado, algo que solo habían conseguido hasta la fecha Marc Gené y Fernando Alonso para nuestro país.

Después de aquel éxito, Molina atendía a EL ESPAÑOL para celebrar un logro muy importante. Ahora, el de Lloret de Mar se vuelve a sentar para charlar largo y tendido con este medio después de haber ido un paso más allá. Y reconoce que no se conforma con esto, ya que en su mente tiene planes de futuro, siempre vestido de rojo.

Este año ha vuelto a quedar en el podio del Campeonato del Mundo de pilotos sumando una victoria y cuatro presencias en el cajón durante la temporada. Y confiesa a EL ESPAÑOL cuál es el siguiente reto que ya tiene entre ceja y ceja, el cual le volvería a poner, de nuevo, en lo más alto de la historia ferrarista y del motorsport nacional.

Nielsen, Fuocco y Molina celebran su victoria en Qatar 2025.

Nielsen, Fuocco y Molina celebran su victoria en Qatar 2025. Ferrari Media

Hagamos un poco de memoria Miguel. Hablábamos hace más o menos un año y medio cuando venías con el título de las 24 Horas de Le Mans bajo el brazo. ¿Cuánto te ha cambiado la vida ese éxito?

Bueno, no ha cambiado mucho.​ Lógicamente ha cambiado el palmarés.​ Pero a nivel cotidiano, a nivel diario no, no mucho.​Un poco más de reconocimiento, un poco más de popularidad, pero muy poco. Y eso realmente también está bien, no está mal, no es algo que haya explotado y eso a mí me gusta porque soy una persona muy tranquila, que me gusta ir un poco a lo mío y en ese sentido está bien.

En tu caso como que lo agradeces, ¿no? No sé si llegaste a tener un poco de preocupación o de miedo por ver si iba a venir un boom muy grande...

No, en ningún momento pensé que podía ser un boom que cambiara cien por cien mi vida.​ Así que estoy igual que siempre, sin cambiar muchas cosas, todo en orden, todo bien.

El año pasado fue muy bien en Le Mans, este año no fue tan bien por una descalificación. ¿Cómo viviste todo aquello? ¿Consideras que fue una decisión injusta o demasiado estricta?

Eso tampoco es algo sobre lo que yo pueda opinar mucho. Fue una situación donde lógicamente había unas cosas que no estaban en el reglamento. Fueron cuatro tornillos que se cayeron durante las últimas horas de carrera.​ Eso no influía en ningún tipo de beneficio a nivel de rendimiento.

Pero las decisiones las tomaron los comisarios y así fue. Sí que es cierto que quizá ahí nos privó un poco de poder luchar por el campeonato de pilotos porque perdimos 38 puntos que eran muy importantes.

¿Fue más grande el palo de perder la oportunidad de toda la temporada que el de no poder hacerlo bien en Le Mans?

Sí, porque es una carrera donde sabes que puntúa doble, donde tienes que hacerlo bien para poder tener opciones al final de año y cuando sales de allí con 0 puntos, lógicamente es más complicado.

Analizándolo ahora con la perspectiva de los meses, te hace ver un poco las dos caras del deporte, ¿no? El año pasado consigues la victoria más importante de tu carrera y este año, sin embargo, esa descalificación por un problema en la flexión del alerón te priva de otro reto como ganar el título de pilotos. En muy poco tiempo pasas del todo a la nada y quien sabe si el año que viene vuelves a pasar de la nada al todo.

Bueno, eso es el mundo del deporte.​ La mayoría de veces las cosas van mal y muy pocas veces las cosas van muy bien.​ Por eso, cuando hay resultados como los que tuvimos el año pasado, hay que aprovecharlos y hay que disfrutarlos. Sobre todo porque no sabes cuándo va a ser la próxima vez.

Entonces, resultados como los que ha habido este año a nivel más personal en Le Mans o así, son más lo normal.​ Pero, al fin y al cabo, creo que tampoco ha sido un año negativo, ha sido un año muy positivo a nivel de marca, a nivel de Constructores, que era el objetivo que teníamos este año y estoy muy contento en ese sentido.​ También por tercer año consecutivo estoy entre los tres primeros del Campeonato del Mundo de Pilotos, o sea que creo que podemos decir que ha sido un año positivo.

El año pasado estábamos celebrando un éxito, este año estamos celebrando otro éxito, otro hito histórico. Eres el primer campeón español con Ferrari de un Mundial de Constructores. ¿Qué se siente al volver a hacer historia aquí?

Pues un honor, porque todo empezó en este ambiente, en el ambiente de la Resistencia, donde hubo una persona que tenía unas ideas muy claras de lo que quería para sus coches: vendía coches para poder competir en este tipo de carreras y eso lo hace mucho más histórico. Lo hace mucho más bonito y es un honor para nosotros poder seguir escribiendo esta historia.

Llevábamos mucho tiempo sin ganar un Mundial y así nos lo habían hecho saber.

Ferrari al final es la marca del motorsport más grande del mundo, pero llevaba mucho tiempo sin conseguir este éxito. ¿Cómo notas que ha caído y cómo notas que se ha vivido también dentro de la familia de Maranello este título tan esperado?

Creo que las imágenes lo describen muy bien.​ Para nosotros era muy importante porque somos un equipo y un proyecto joven, llevamos muy poco tiempo en este campeonato, en esta categoría y conseguirlo después de haber logrado tres victorias en Le Mans...

Conseguir un Campeonato del Mundo para nosotros es muy importante y para la marca también lo ha sido por lo que dices.​ Llevábamos mucho tiempo sin poder conseguir un Campeonato del Mundo de Constructores y así nos lo han hecho saber, que están muy contentos. Hemos tenido siempre el apoyo incondicional de toda la gente de Ferrari.

No sé si durante este tiempo habéis sentido un poquito la presión porque se consiguiera ese título y si ahora es como una liberación.

Se ha notado que, a medida que iba pasando el Campeonato, hacia las últimas carreras sí que ha habido esta presión. Bueno, tensión más que presión, porque era una situación muy importante y era el objetivo del año.​ Sí que es cierto que Le Mans son unas 24 Horas muy importantes para cualquier tipo de marca o para nosotros, pero este año teníamos el objetivo real de conseguir el Campeonato de Constructores y, a medida que iban pasando las carreras, lo veíamos más cerca, pero a la vez con esa presión de decir: no podemos fallar en nada porque tenemos que conseguirlo.

Recuerdo un poco en Brasil donde no puntuamos con ninguno de los dos coches y Cadillac hizo primero y segundo y se acercó muchísimo en el Campeonato. Ahí empezó un poco la tensión. Pero al fin y al cabo creo que hemos conseguido el resultado, el objetivo del año y para nosotros es muy importante.

El año pasado tu nombre en los titulares iba acompañado siempre del de Fernando Alonso y Marc Gené por ser los únicos campeones españoles de las 24 Horas de Le Mans. Este año tu nombre ya está solo.

No sé cómo se siente Miguel Molina, el Miguel Molina que empezó a pilotar hace muchísimos años sobre todo, cuando mira hacia atrás un poco y ve la historia que está forjando en una casa como Ferrari.

Pues a veces no te das cuenta de lo que conlleva y de lo que hay detrás de toda esta historia.​ Nuestra vida pasa tan rápido... Hoy estás en un sitio, mañana estás en otro, estás pensando ya en lo siguiente... Que cuando te paras a pensar realmente es cuando ves que las cosas se están haciendo bien y en estos últimos tres años creo que, a nivel profesional, estoy muy contento, estoy muy feliz de haber conseguido lo que estamos consiguiendo.

Como digo, conseguir las 24 Horas de Le Mans a nivel profesional creo que ha sido el momento más importante de mi trayectoria deportiva, pero estos tres últimos años, luchar por el Campeonato de Pilotos los tres años y ganar el de Constructores con Ferrari... Cuando te paras a pensar ves que están saliendo bien las cosas y estoy en un muy buen momento.

¿Qué nota le pones a tu 2025? Una victoria, cuatro podios...

Pues positiva, sobre todo en momentos clave ha ido muy bien.​ Recuerdo quizá en Austin, donde tuve que luchar por la segunda posición, que conseguí adelantar al Peugeot. A nivel personal creo que ese ha sido el punto mejor de mi temporada.​ Me vi muy competitivo, muy bien, así que creo que ha sido un año positivo, un año bueno y con buena nota.

¿Y qué nota le pones al proyecto de Ferrari? Sobre todo valorando estos tres años en los que se habéis conseguido victorias en Le Mans, se ha conseguido el Campeonato de Pilotos y ahora el de Constructores.

Es que hemos ganado casi todo, o todo.​ Entonces un 10.​ Superarlo ahora es muy difícil porque ganando todos los campeonatos que hemos podido y las 24 Horas de Le Mans en tres ocasiones no lo puedes superar. No hay más. Pero mantenerlo va a ser complicado y ahora hemos puesto el nivel muy alto.

No competimos solos, sabemos que las otras marcas nos tienen ya en el punto de mira desde que llegamos y cada vez vienen más marcas, cada vez la competitividad va en aumento y mantenernos a este nivel va a ser lo complicado, así que estamos preparados, pero creo que puede ir bien y podemos seguir en este camino.

Se dice mucho de ti que una de tus mayores virtudes es que eres un muy buen hombre de equipo. ¿Cuál crees tú que es tu mayor virtud y cuál crees tú que es tu mayor aspecto a mejorar?

Creo que me siento muy cómodo con el rol que tengo de ser también el piloto más experimentado de mi grupo, con mis dos compañeros.​ Me siento bien con eso, además todavía soy rápido, si no, no estaría aquí.​ Así que estoy disfrutando de las carreras muchísimo.

​A veces no simplemente conduciendo, sino con todo lo que conllevan en sí las carreras y eso para mí es muy importante.​ Estoy disfrutando desde que llego al circuito hasta que me voy. El fin de semana en sí lo disfruto muchísimo y esté dentro o fuera del coche para mí son momentos muy bonitos y para eso estoy aquí.

Miguel Molina dentro del box de Ferrari.

Miguel Molina dentro del box de Ferrari. Ferrari Media

Hace un año y medio, cuando ganaste en Le Mans, te puse al lado de otro piloto español como Alex Palou que también está fuera de la Fórmula 1.

Un año más los dos volvéis a acumular éxitos y entonces te quiero preguntar si crees que se valora poco todo lo que no es Fórmula 1 y si tú, a lo largo de tu carrera, te has sentido un poco menospreciado.

¿Sientes que lo que estás consiguiendo quizá no tiene la repercusión que debería? Porque además no solo estás consiguiendo éxitos, sino que son cosas que no ha conseguido nadie.

Bueno, es que tampoco depende de mí esto, entonces es un poco, no voy a decir inútil, pero pensar en cosas así tampoco...​ Creo que en cierta manera esto está evolucionando porque ahora es mucho más accesible a la gente entender que hay más cosas que la Fórmula 1.​ El Campeonato del Mundo de Resistencia está evolucionando muchísimo, están entrando nuevas marcas, está cogiendo una popularidad mucho mayor y, por consecuencia, nosotros también.

Alex está haciendo lo mismo con la IndyCar en Estados Unidos, es la situación que es.​ También creo que esto va a ir cambiando porque cada vez, como digo, es mucho más popular, la gente entiende más, los coches son muy espectaculares cuando los ves, cuando ves las carreras por primera vez ves que hay mucho enganche y mucha competitividad, muchas marcas diferentes luchando por ganar la carrera... Entonces creo que eso está cambiando e irá evolucionando y espero seguir unos años más para poder ver esta evolución.

Pero, al fin y al cabo, es lo que es y tampoco siento que, por ejemplo, cuando el año pasado conseguimos las 24 Horas de Le Mans, hubiera poca repercusión. Hubo una repercusión muy buena.​ Entonces, cuando hay cosas bonitas o cosas buenas, los medios ya dan eco a todas estas cosas y, por consecuencia, tu popularidad sube.​ Creo que es una evolución. El Campeonato en sí está evolucionando y, por consecuencia, todo crecerá.

Después de ganar Le Mans te preguntaba cuál era tu siguiente reto, cuál era tu siguiente objetivo, y me decías que no sabías, que habías cumplido un sueño y que todavía no lo habías pensado. ¿Ahora ya lo tienes?

Creo que, viendo tan cerca este año que hemos podido luchar por el Campeonato, tiene que ser el objetivo a corto plazo el año que viene, intentar conseguir el Campeonato del Mundo de Pilotos. Es lo que a nosotros nos falta por conseguir y ese ha de ser el objetivo que seguro que nos pondremos para el año que viene.

El resto, intentar conseguir ganar otra vez las 24 Horas de Le Mans, porque lo que se siente allí una vez subes al podio y pasas por el pasillo de pit lane es una cosa indescriptible, pero creo que el objetivo del año que viene tiene que ser el Campeonato del mundo de Pilotos.

Si tienes que elegir una, ¿te quedas con el Campeonato del mundo?

Ahora sí, ahora que tengo Le Mans, sí (risas).

Y hablando un poquito de tu futuro, ¿hasta cuándo te ves de rojo?

Espero verme muchos años.​ Ahora tengo contrato hasta el 2027 con Ferrari, pero creo que es una marca donde se ha demostrado que hay mucha lealtad por los pilotos. Llevamos ya muchos años ahí y espero verme muchos años más.​ Se está muy bien trabajando con los italianos, son muy parecidos a nosotros, así que espero estar muchos años más.

¿La Resistencia juega a favor en la edad y en la experiencia de un piloto?

Yo creo que sí porque hay muchos momentos en los que no solo es tener velocidad, que lógicamente con la edad a veces la vas perdiendo un poco, esa velocidad pura de una vuelta, de hacer una clasificación... Es ley de vida.​ El deporte es así.

Pero la Resistencia conlleva no solo eso, lleva muchas cosas. Como digo, desde fuera puedes dar tu visión, desde dentro lees las carreras de una forma diferente, entonces por eso se alarga un poco más la carrera deportiva en este mundo, porque no solo es necesaria la velocidad pura, así que todo lo que podamos seguiremos ahí.

Ya te hago la última para terminar. ¿Qué vas a hacer en las próximas semanas y en los próximos meses? ¿Cómo ves tus vacaciones?

Espero acabar pronto ya todas las obligaciones; ahora estamos aquí en Madrid.​ Después me voy para Bolonia, que a las 05:00 horas de la mañana cogeremos un vuelo para Uzbekistán, que tenemos la gala de la FIA para recibir el premio y después de vuelta. Y espero terminar, pasar las Navidades en casa con la familia, con los niños y en enero, a mediados de enero, ya empezamos otra vez, o sea que habrá poco tiempo, pero todo el tiempo que tengamos lo intentaremos aprovechar al máximo.