Dani Sánchez, jugador del Málaga CF.

Dani Sánchez, jugador del Málaga CF.

Fútbol

Dani Sánchez, jugador del Málaga CF, supera su problema de salud mental: "Me sentí al borde, pero decidí levantarme"

El futbolista volvió a jugar un partido después de haber estado un mes alejado de los terrenos de juego.

Más información: Flick, tras su imagen con Raphinha: "Estoy fuerte para lo que depare la temporada"

Publicada
Actualizada

Cada vez queda más claro que en el deporte de alta competición es tan importante el plano físico como el aspecto mental. El último ejemplo de ello lo ha puesto Dani Sánchez, el futbolista del Málaga CF, que después de un mes fuera de los terrenos de juego este pasado fin de semana volvió a jugar al fútbol.

El defensor de 25 años ha tenido que pasar un mes sin competir por un problema de salud mental que ha gestionado en silencio y del que, según sus propias palabras, está consiguiendo salir.

El malagueño se atrevió a escribir un mensaje íntimo en sus redes sociales en el que reveló el calvario por el que estaba pasando y la situación que le llevó a desaparecer de las alineaciones de su equipo.

"Estas últimas semanas y algunos meses atrás han sido una prueba muy dura para mí. La ansiedad me empujó a cuestionarlo todo, incluso lo que más amo", empezó relatando el defensor del Málaga, que se abrió en canal ante sus seguidores.

No ha sido nada sencilla la experiencia del andaluz durante los últimos tiempos para volver a sentirse a gusto consigo mismo: "Sentía que no era yo, como si estuviera peleando contra una parte de mí que no entendía. A veces, cuando no entiendes por qué las cosas no salen, el silencio pesa más que cualquier derrota".

Reconocerlo, el primer paso

Dani Sánchez también escribió que le costó encontrar qué es lo que le estaba pasando, pero ese primer paso fue el que le hizo darse cuenta de todo: "No ha sido fácil reconocerlo, pero creo que es importante aceptar que incluso los más fuertes también caemos. Yo también caí, pero aprendí a levantarme, a escucharme, a darme tiempo, a entender que la mente también necesita descanso y cuidado".

El futbolista celebró que está volviendo a encontrarse consigo mismo después de una muy mala racha: "Aunque me sentí al borde, decidí levantarme", dice de forma inspiradora.

Y por supuesto terminó con una serie de agradecimientos a las personas que le han ayudado en los peores momentos: "Quiero mencionar aunque sea brevemente a mi familia y a mi círculo más cercano. Ellos han sido un apoyo silencioso, pero fundamental. El tipo de ayuda que no hace ruido, pero sostiene".

El defensa volvió a pisar el césped este pasado domingo en el partido que su equipo, el Málaga CF, jugó ante el Real Valladolid. 23 minutos en el empate (1-1) para recuperar sensaciones y volver a sentirse futbolista.

Comunicado íntegro de Dani Sánchez

30 de noviembre, 03:00 am, me dispongo a escribir a ver qué sale:

Estas últimas semanas y algunos meses atrás han sido una prueba muy dura para mí. La ansiedad me empujó a cuestionarlo todo, incluso lo que más amo. Y eso me afectaba en cosas que siempre habían sido naturales para mí: mi confianza, mi energía, mi manera de vivir cada día y cada entrenamiento.

Sentía que no era yo, como si estuviera peleando contra una parte de mí que no entendía. A veces, cuando no entiendes por qué las cosas no salen, el silencio pesa más que cualquier derrota.
No ha sido fácil reconocerlo, pero creo que es importante aceptar que incluso los más fuertes también caemos.

Y yo caí, pero también aprendí a levantarme. Aprendí a escucharme, a darme tiempo, a entender que la mente también necesita descanso y cuidado.

En todo este proceso he estado más reservado, más en silencio, y sé que quizás desde fuera podía parecer que algo no encajaba. Y sí, seguramente muchas cosas en mi rendimiento o en mi situación tenían una explicación interna que yo mismo estaba intentando gestionar.

Pero no quiero justificar nada: lo que importa es que estoy volviendo a encontrarme. Y aunque me sentí al borde, decidí levantarme. Cada entrenamiento, cada minuto sin jugar, cada pensamiento negativo... todo lo estoy transformando en fuerza. Esta foto ha sido minutos después de finalizar el partido, aliviado conmigo mismo y sonriéndome, porque me lo merezco y porque hay gente que se merece verme así.

Hoy, gracias a Dios, vuelvo a sentir esa luz que hacía tiempo no veía. Vuelvo a recuperar mi confianza, mi ilusión, mis ganas de ser el de siempre: dedicado, ambicioso y con hambre de crecer. Estoy sonriendo otra vez, disfrutando del fútbol de verdad, sintiéndome libre y fuerte.

Quiero mencionar, aunque sea brevemente, a mi familia y a mi círculo más cercano. Ellos han sido un apoyo silencioso pero fundamental, el tipo de compañía que no hace ruido pero sostiene. Y eso se queda para siempre. Ellos serán los que me acompañen toda mi vida.

Uno puede caer, puede dudar, puede romperse un poco... pero nunca tirar la toalla. He vuelto a ser yo. Y voy a por todas.

03:45 am. Fin.