Isak, el '9' que rechazó al Madrid y está a punto de generar un terremoto en la Premier: 150M y un posible efecto dominó

Mucho ha llovido desde que el nombre de Alexander Isak comenzara a retumbar en los despachos de los mejores clubes del mundo. Apodado como el nuevo 'Ibra' en 2017, el sueco no ha dejado de dar pequeños pasos hasta convertirse en uno de los delanteros más codiciados del mundo.

Tiene 26 años y su carrera ha seguido siempre una progresión muy lineal hasta explotar definitivamente en la Premier League. Maravilló a todos en el AIK Solna y el Real Madrid no dudó en llamar a su puerta. Sin embargo, Isak hizo lo que pocos se atreven a hacer: rechazar al club blanco.

Una decisión arriesgada. El club más prestigioso del mundo se interesó por él cuando apenas tenía 18 años. Pero Isak decidió firmar por el Borussia Dortmund, siempre una fábrica inagotable de talento. Llegaba a un ecosistema seguro.

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Su llegada parecía encajar como anillo al dedo, pero su rendimiento en el conjunto teutón acabó estando muy lejos de lo esperado. No rompió en crack, quizá le pilló muy verde la aventura, y tuvo que dar un paso atrás en su carrera, provocando las dudas de mucha gente sobre su potencial.

Finalmente, Isak llegó a España, pero fue para recalar en la Real Sociedad. Lo hizo a cambio de 15 millones y fue ahí donde comenzó a mostrar algunas de sus cualidades. Marcó 9 goles en Liga en su primer año, subió hasta los 17 en el segundo e hizo 10 en el tercero.

Unas cifras aceptables, pero que servían de complemento a todo lo que podía aportar el sueco más allá del gol. Un jugador veloz y letal al espacio, con capacidad de asociación y muy inteligente sobre el terreno de juego. Todo ello acabó con el Newcastle poniendo 70 millones encima de la mesa al inicio del curso 22-23.

La explosión definitiva

Su fichaje generó mucho revuelo, especialmente por la cantidad que se pagó por él. Una apuesta muy fuerte de un Newcastle que inició con él un proyecto muy ambicioso de la mano de Arabia Saudí. Y el tiempo le ha acabado dando la razón.

Su primer año en el fútbol inglés le sirvió de adaptación. Marcó 10 goles en 22 partidos de Premier League y las críticas sobre su figura comenzaron a hacerse más fuertes. Tenía 24 años y dos campañas consecutivas sin superar la decena de tantos.

Isak celebra un gol con el Newcastle. EUROPA PRESS

Fue entonces, cuando más en el alambre caminaba, el momento en el que explotó de forma definitiva. La temporada 23-24 fue letal. Marcó 21 goles en Premier y 25 entre todas las competiciones para colarse entre los mejores '9' del mundo.

Sintiéndose por fin un líder, Isak pasó de ser un gran goleador a un jugador total. Esta última temporada ha sido el segundo máximo goleador de la Premier con 23 tantos y su trascendencia ha llegado mucho más allá de los goles.

Un giro de guión

Isak parecía estar muy cómodo en Newcastle. Era el máximo ídolo de la afición y había vuelto a llevar a su equipo a disputar la Champions League. Sin embargo, comunicó de manera sorpresiva su intención de abandonar el club.

De golpe y porrazo se encendieron todas las alarmas. El Liverpool, que apenas unos días antes había firmado a Ekitike por 95 millones, se metió de lleno en la operación. Tanto es así que, según medios ingleses, ya tiene un acuerdo con el futbolista.

Quedaría por tanto negociar el fichaje con el Newcastle, algo que no parece fácil teniendo en cuenta los 150 millones que pueden pedir las 'Urracas'. Eso sí, el Liverpool parece dispuesto a hacer un 'all in' y firmar su tercera compra este verano por encima de los 100 millones.

La operación podría resolverse en días, algo que están deseando desde la Real Sociedad ya que recibiría algo de dinero por haber tenido a Isak en sus filas durante varios años.

Concretamente, el reparto de lo que ingresaría la Real Sociedad por el traspaso de Alexander Isak este verano (por 150 millones de euros) se compone de dos conceptos diferentes: el mecanismo de solidaridad FIFA y la cláusula de plusvalía reservada por el club txuri-urdin.

El mecanismo FIFA apunta que el 5% del valor del traspaso de un futbolista se reparte entre los clubes formadores entre los 12 y los 23 años. En el caso de Isak, jugó en la Real desde los 19 hasta los 22. Es decir, cuatro temporadas.

Isak celebra su gol con la Real Sociedad La Liga

El máximo organismo del fútbol internacional establece que por cada temporada entre 16 y 23 años, el club formador recibe el 0,5% del traspaso total por año de formación. Por tanto, los vascos recibirían un 2% del traspaso (3 millones de euros).

Pero la cifra aumentaría al aplicar la cláusula de plusvalía, un derecho que se guardó la Real Sociedad en el momento en el que vendió a Isak al Newcastle a cambio de 70 millones en 2022.

Concretamente, se guardaron un 10% de la plusvalía de una futura venta, lo que equivaldría a un total de 8 millones. Por tanto, podrían ingresar 11 millones por el simple hecho de que Isak cambiara Newcastle por Liverpool.

Efecto dominó

Todavía no hay nada oficial, pero una salida de Isak rumbo al Liverpool podría provocar un efecto dominó en el mercado de fichajes. En primer lugar, el Newcastle dispondría de una cantidad muy suculenta para reinvertir el dinero.

El objetivo es Sesko, delantero del Leipzig que parece haber concluido su etapa en Alemania. Un futbolista también pretendido por el Manchester United, pero que podría acabar con las 'Urracas' si le ponen delante un proyecto Champions.

Del mismo modo, la operación Isak-Liverpool podría afectar al futuro de Rodrygo. El futbolista del Real Madrid encaja como anillo al dedo en el Liverpool, pero se quedaría sin hueco con la llegada del sueco.

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Tampoco podría ir al Bayern, quien acaba de fichar a Luis Díaz, por lo que las opciones del brasileño serían cada vez menores.

En definitiva, todo el mundo mira expectante esta partida de ajedrez que acaba de comenzar, pero que se podría resolver por la vía rápida. Isak quiere salir, el Liverpool lo quiere fichar y únicamente queda convencer al Newcastle y desatar otro seísmo en el mercado.