El Barça se gusta en la goleada ante un vulnerable Girona y vuelve a colocarse como el líder en solitario de La Liga

El Barça ha vuelto a mandar un claro mensaje a Real Madrid y Atlético de Madrid en la lucha por La Liga: sus rivales tienen poco margen de error para recortar puntos a un equipo que se mantiene como el líder indiscutible de la clasificación. El Girona de Míchel fue la nueva víctima de un equipo que sigue invicto en 2025. [Así hemos vivido la victoria del Barça]

De principio a fin, el conjunto azulgrana pasó por encima del conjunto gironí. Los de Hansi Flick tuvieron un dominio abrumador en el partido y no dejaron ninguna opción a su rival, quienes estuvieron a merced de un equipo que nuevamente fue un rodillo en su versión más letal.

La lucha por el título de La Liga empieza a despejarse tras las victorias de Barça y Real Madrid, además del tropiezo del Atlético de Madrid ante el Espanyol. Salvo sorpresa mayúscula, el conjunto blanco será el único rival de un equipo azulgrana que ha puesto la directa en el camino por levantar el título a final de temporada.

Acoso y derribo culé

Conforme echó a rodar el balón en el partido, el Barça puso de manifiesto que el dominio del balón iba a ser solamente suyo, desactivando así el mejor arma del Girona. Los azulgranas monopolizaron la pelota e hicieron gala de la multitud de recursos que tienen en ataque para poner contra las cuerdas al equipo de Míchel.

Sólo Gazzaniga fue capaz de mantener en el partido a un Girona que sólo tuvo una ocasión durante los primeros 45 minutos: un disparo de Tsygankov nada más comenzar el encuentro que no encontró la portería de Szczesny. A partir de ahí, el conjunto gironí estuvo a merced del Barça.

La primera llegada con peligro provocó una falta al borde del área de Asprilla sobre Fermín López que sancionó el colegiado, Pulido Santana. Sin embargo, desde el VAR le llamaron para que acudiera al monitor y una vez revisada la acción por cometerse dentro del área, decidió pitar falta sobre el colombiano y balón para el Girona.

El guion del partido no cambió y el Barça tuvo un dominio abrumador sobre el Girona. La presión en campo contrario provocó que los de Míchel ni siquiera pudieran salir de su propio campo y basaran el partido en defender y buscar el contragolpe. Los de Míchel aguantaron en el partido gracias a Gazzaniga. El portero argentino evitó dos goles clarísimos, uno ante Lamine y el otro a Ronald Araujo.

La mano que sacó el portero argentino en el cabezazo del central uruguayo a la salida de un saque de esquina puede ser la parada de la jornada, sin duda. El asedio del Barça continuó aunque los de Flick no encontraron el gol hasta el minuto 43 por medio de Lamine Yamal.

El internacional español fue el encargado de ejecutar una falta lateral que se fue envenenando y el balón le golpeó de forma fortuita a Krejci en la mano, introduciéndose así en el fondo de la portería ante la incredulidad de Gazzaniga.

Mismo escenario, distinto resultado

A pesar de que el Girona estuvo a merced del Barça en la primera parte, Míchel decidió no hacer ningún cambio en su equipo, aunque sí varios ajustes. Acertó de lleno el técnico madrileño, quien castigó al conjunto azulgrana dándole de su propia medicina. El conjunto Girona subió la intensidad defensiva y tras recuperar un balón en el centro del campo, la asistencia sensacional de Blind dejó solo a Danjuma y el neerlandés no falló ante Szczesny.

El dominio abrumador que tuvo hasta el momento el Barça no se tradujo en el resultado con el empate del Girona, lo que provocó que a los jugadores azulgranas les entrasen las dudas. Trataron de reaccionar los de Flick y Eric García tuvo el 2-1, pero su disparo lejano fue repelido por el palo. Perdonó el español, pero no Lewandowski.

En una buena jugada colectiva iniciada por Gerard Martín en la banda izquierda, el lateral asistió a De Jong, quien puso un centro al área que encontró el pase de Fermín López a Lewandowski para que el polaco, en boca de gol, castigara la falta de contundencia de Krejci para adelantar de nuevo al Barça en el partido.

Ferran Torres celebra el gol marcado ante el Girona. EFE

No se conformó el conjunto azulgrana con el resultado y fue a por más goles, aunque el Girona no dudó en amenazar con el empate en algún contraataque. Sin embargo, un robo de balón de Frenkie de Jong en campo propio propició el segundo gol de Lewandowski ante una defensa visitante completamente desarmada. El polaco, pichichi de La Liga, encarriló el partido pero fue Ferran Torres quien lo sentenció.

'El Tiburón', quien había ingresado al terreno de juego en la segunda parte, hizo el 4-1 al rematar un centro lateral de Gerard Martín, protagonista en la banda izquierda del Barça. El Barça se guardó en el bolsillo tres nuevos puntos que le hacen quedarse de nuevo en solitario en lo más alto de la clasificación. Tres puntos sobre el Real Madrid y nueve ya de ventaja sobre el Atlético de Madrid.