Antoine Griezmann, derrumbado tras la eliminación en Champions del Atlético de Madrid

Antoine Griezmann, derrumbado tras la eliminación en Champions del Atlético de Madrid Reuters

Fútbol ATLÉTICO DE MADRID 2-2 BAYER LEVERKUSEN

El Atlético, fuera de la Champions tras fallar un penalti en la última jugada ante el Leverkusen

El partido en el Civitas Metropolitano terminó con polémica y con una jugada pocas veces vista en el mundo del fútbol con el fallo de Carrasco. 

26 octubre, 2022 23:09

El Atlético de Madrid está eliminado de la Champions. El equipo rojiblanco ha tenido el final más cruel y extraño posible en la máxima competición continental. Tenía que vencer al Bayer Leverkusen para seguir con vida, pero hicieron el peor partido posible en el momento que más lo necesitaban. El empate ante el conjunto alemán deja a los de Simeone con el único consuelo de pelear por la Europa League. [Narración y estadísticas: Atlético de Madrid 2-2 Bayer Leverkusen].

El encuentro terminó con un desenlace digno de Hollywood. Con un Atleti volcado, el colegiado pitó el final del encuentro. Sin embargo, el VAR entró para rearbitrar la última jugada y pitar penalti por una mano dentro del área. Los jugadores volvieron al terreno de juego y Carrasco falló la pena máxima. El primer rechace, rematado de cabeza por Saúl, se fue al larguero y el segundo fue despejado por el propio Yannick tras recibir un disparo de Reinildo. El equipo de Xabi Alonso se salvó de milagro cuando todos estaban bajo palos.  

Finalmente, el encuentro terminó en tablas y el Atleti tiene ya imposible alcanzar al Oporto en la clasificación, por lo que viajará a Portugal en la última jornada con el único aliciente de clasificarse para la Europa League, ya que el Leverkusen también tiene opciones de pase. Ridículo estrepitoso con un final circense en un Metropolitano que, eso sí, terminó entregado a la épica y al corazón que le pusieron sus jugadores. Lo que faltó fue cabeza para derrocar a una defensa que hacia aguas por todos lados. 

Errores graves en defensa

El Atlético de Madrid se jugaba la vida en la quinta jornada de la fase de grupos de la Champions League. El Barça, que había caído eliminado tras la derrota del Viktoria Pilsen ante el Inter de Milán, les había robado todo el protagonismo, pero los de Simeone estaban tan en la cuerda como los azulgrana. Un hecho que se terminó demostrando. 

El cuadro colchonero arrancó madurando la posesión con mucha pausa y calma. Pero esa tranquilidad dejó de ser tal cuando empezaron a aparecer los graves errores defensivos del Atlético de Madrid. En el minuto 9, Antoine Griezmann intentaba tirar un caño para sacar de manera elegante un balón por el carril zurdo cerca de su área. La floritura no salió como el galo esperaba y el Leverkusen montó su ataque en pocos toques. Hlozek habilitó el buen desmarque de Diaby y el atacante la envió a guardar colándola por la escuadra de la portería de Oblak con un gran zurdazo. 

Casi no se habían sentado los aficionados colchoneros y su equipo ya iba cediendo en el marcador. Ni siquiera saber que el Oporto había hecho sus deberes goleando al Brujas parecía haber impulsado a los rojiblancos. Poco a poco, el Atleti fue encontrando vías para hacer daño al Leverkusen, aunque siempre por acumulación de futbolistas que por buen fútbol. 

El primero en probar suerte fue Correa, que dispuso de una gran ocasión en el minuto 12 con un disparo raso desde dentro del área que se topó con la buena parada de Hradecky. Ese primer aviso serio hizo creer a los de Simeone que empataron el choque en el 22' con la mejor jugada de todo el partido. Después de una buena combinación de pases, Correa arrancó en diagonal desde banda izquierda. Jugó con Griezmann, que de espaldas a la portería rival se la cedió para la llegada de Carrasco y el belga conectó un disparo raso y certero que se coló pegado al poste. 

Con el marcador empatado, el Atleti recuperó su buen nivel de juego y empezó a darle más sentido a sus ataques. Sin embargo, los errores defensivos volvieron a aparecer. Correa perdió un balón en la zona de castigo ante Arimi. Este condujo y vio la llegada por banda izquierda de Hudson-Odoi que tras tirar un par de recortes batió a Oblak por el centro de la portería. Otra vez tocaba remar a contracorriente en el desastre del Metropolitano. 

El tanto supuso un mazazo terrible del que el Atleti tardó muchos minutos en recuperarse. Dejaron alguna llegada más de peligro, pero no fue hasta el 40 cuando volvieron a probar a Hradecky, que se mostraba fuerte bajo palos. El descanso llegó y Simeone tuvo la oportunidad de buscar una reacción. 

Los jugadores del Bayer Leverkusen celebran el gol de Hudson-Odoi ante el Atlético de Madrid

Los jugadores del Bayer Leverkusen celebran el gol de Hudson-Odoi ante el Atlético de Madrid Reuters

Un final de locura

A juzgar por la salida tras el paso por vestuarios así fue. El Atlético de Madrid salió con una marcha más, presionando arriba en cada acción e intentando buscar el tanto del empate para soñar con la remontada. Solo tardaron cinco minutos en hallar su premio. Carrasco cedió un balón atrás para la frontal del área y ahí apareció Rodrigo de Paul, que había salido en el descanso. El argentino levantó la cabeza y disparó con mucha precisión para hacer el empate. 

El Atlético de Madrid tenía toda la segunda mitad por delante para el gol de la victoria ante una defensa muy endeble y seguir vivos en Champions. Pero el paso de los minutos solo consiguió que hubiera grandes dosis de precipitación. Reinildo y Kondogbia lo probaban desde lejos en dos acercamientos, pero sus disparos se marchaban alejados. 

A partir de la hora de partido, el más activo en los colchoneros fue Griezmann, que dispuso de varios intentos. Primero con un disparo desde la frontal que le salió muy centrado cuando estaba completamente solo. Después al intentar aprovechar un rechace tras un lanzamiento lejano de Carrasco que detuvo muy Hradecky. Y por último, con una especie de volea acrobática tras una dejada de Cunha dentro del área. Hasta de cabeza lo probó el galo, pero no halló el premio del gol. 

El Leverkusen, que solo se dejó ver en la segunda mitad con una contra peligrosa de Hudson-Odoi y otra de Paulinho, ambas bien resueltas con dos paradones de Oblak, se terminó encerrando abajo y jugando con fuego ante el empuje de un Atleti voluntarioso, pero sin mucho acierto. 

Así fue como llegó el descontrol final. Ya con Joao Felix sobre el terreno de juego, se produjo la jugada más loca de toda la Champions. El Atleti estaba colgando balones arriba con Oblak como delantero cuando el árbitro pitó el final. Sin embargo, intervino el VAR y es que un zaguero del Bayer Leverkusen había tocado el balón con la mano. Penalti y última oportunidad para los de Simeone. 

El partido, que ya había escuchado su silbato de cierre, se reanudó para ver como Carrasco fallaba el penalti tras una gran parada de Hradecky. Saúl envió el rechace al larguero con un testarazo y Reinildo estrelló el segundo balón en las piernas de un Carrasco que había quedado aturdido por su fallo. Griezmann ni siquiera se atrevió a tirar. Algunos jugadores del Atleti pidieron que se repitiera el penalti, pero ya no hubo segunda reanudación. Los rojiblancos dicen adiós a la Champions y tendrán que ir a Portugal a pelear por su billete de Europa League contra el Oporto. 

Yannick Carrasco falla su penalti contra el Bayer Leverkusen en Champions

Yannick Carrasco falla su penalti contra el Bayer Leverkusen en Champions Reuters

Atlético de Madrid 2-2 Bayer Leverkusen

Atlético de Madrid: Oblak; Molina, Giménez (Joao Félix, 87'), Hermoso (Saúl, 46'), Reinildo; Witsel, Kondogbia; Correa (De Paul, 46'), Griezmann, Carrasco; Morata (Cunha, 61').

Bayer Leverkusen: Hradecky; Frimpong, Kossonou, Tapsoba (Tah, 61'), Hincapié, Bakker; Amiri, Andrich; Hlozek; Diaby (Paulinho, 77'), Hudson Odoi (Adli, 61').

Goles: 0-1, 9' Diaby. 1-1, 22' Carrasco. 1-2, 29' Hudson Odoi. 2-2, 50' De Paul.

Árbitro: Clement Turpin (Francia). Amonestó con tarjeta amarilla al local Giménez (79') y a los visitantes Hradecky (65'), Bakker (66') y el entrenador Xabi Alonso (41').

Incidencias: partido correspondiente a la quinta jornada del grupo B de la Liga de Campeones ante 63.803 espectadores.