Tadej Pogacar, abatido.

Tadej Pogacar, abatido. REUTERS

Ciclismo TOUR DE FRANCIA

Jonas Vingegaard hace a Tadej Pogacar humano: el Granon pone patas arriba el Tour de Francia

Tras más de 60 km. de ataques y un ciclismo mágico, Pogacar sucumbió en las rampas donde Vingegaard demostró que es algo más que un aspirante.

13 julio, 2022 17:57

La mejor etapa de la última década y quizá de este siglo se vivió este 13 de julio en Los Alpes Franceses. Jonas Vingegaard presentó su candidatura a rey tras demostrar que el pequeño príncipe Tadej Pogacar es humano. El danés de Jumbo - Visma reventó en las faldas del Col du Granon, una cima a la que solo se había llegado una vez en la historia, al joven del UAE - Team Emirates en una batalla que comenzaron 60 kilómetros antes en otras dos cotas míticas como el Télégraphe y el Galibier.

Solo podía quedar uno tras una batalla titánica en una etapa con dos puertos fuera de categoría, uno de primera y otro de segunda que se convirtieron en el único cóctel explosivo que ha podido hasta ahora con Pogacar en una gran vuelta. Desde que presentó su cartel en su primera grande, La Vuelta 2020, el esloveno de 23 años no había mostrado ninguna debilidad. Lo más parecido había sido un ataque del propio Vingegaard en el Mont Ventoux.

Vingegaard llegó a meta con 2'51'' de ventaja sobre el joven talento esloveno. Pogacar, que reconoció una "pájara" de la que desconoce los motivos y prometió venganza para mañana mismo, pierde ahora mismo 2'22'' con el danés. Lo mejor es que queda la mitad del Tour por delante para que la clasificación pueda dar más vueltas. Teniendo en cuenta el ímpetu ofensivo de estos dos ciclistas, el espectáculo está asegurado.

Para conseguir ese cóctel, Jumbo tuvo que hacer una estrategia casi suicida. El panal del equipo amarillo puso a Wout Van Aert y Christophe Laporte por delante en la fuga, a Primoz Roglic atacando en el Télégraphe y el Galibier, a Sepp Kuss y Steven Kruijswijk apareciendo como abejas siempre delante al servicio de sus compañeros y al propio Vingegaard minando la moral de Pogacar durante todo el día. No se separó ni un solo segundo de él hasta que llegó su ataque definitivo.

Vingegaard hizo un ataque a la vieja usanza cuando quedaban más de cuatro kilómetros y medio de ascensión al Granon. Rafal Majka, el gregario de Pogacar que volvió con los mejores tras la 'Jumbada' de dejar caer a Wout Van Aert en el descenso del Galibier para volver a meter entre los favoritos a un Roglic que desde su caída no es el mismo, tiraba de su líder sin capacidad de reacción. El polaco se desfondó y Tadej se quedó solo. Ahí empezaba su agonía.

Le atacaba Geraint Thomas para herir su moral. Después llegarían David Gaudu y Adam Yates a hacer lo mismo. Mientras tanto, Vingegaard caminaba hacia la gloria superando a Romain Bardet y Nairo Quintana. El cielo se abría para recibir al danés de 25 años, dos más que Pogacar. Es un dato que hay que tener en cuenta cuando se habla del ciclista del UAE. Tadej volverá, si su estado físico no se ha visto comprometido durante la etapa. Este 14 de julio, fiesta en Francia, tendrá la ocasión.

Pogacar, humano

Tras una primera semana en la que Pogacar dominó, todo su esfuerzo se le acumuló en sus piernas en las rampas del Granon. La mano de hierro con la que imponía su superioridad se vio opacada en el segundo día de gran montaña, con las cotas más altas de todo el Tour, y un calor excesivo en el que Vingegaard siempre ha demostrado moverse como pez en el agua. Estos animales siempre han acompañado a Jonas, ya que de joven compaginaba los entrenamientos con su trabajo en una conservera.

Eso sí, Pogacar no ha dicho su última palabra. "No sé qué me ha pasado hoy. Quiero competir y darlo todo de aquí a París para acabar este Tour de Francia sin ningún remordimiento. Esto no se ha acabado todavía. Jonas me ha metido tres minutos hoy, y tal vez sea yo quien le meta tres minutos a él mañana. Vamos a luchar hasta el final", avisa el esloveno. Tadej promete batalla para una jornada como la de mañana que puede ser igual de exigente.