Movistar movió el árbol y cayó Contador

Movistar movió el árbol y cayó Contador

Ciclismo

Movistar movió el árbol y cayó Contador

Durísima etapa en el Macizo Central en la que Greg Van Avermaet se lució y Alberto Contador quedó apeado de la general debido al elevado ritmo impuesto por Movistar.

6 julio, 2016 17:40

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No es cainismo, sino ciclismo. Al fin y al cabo, en este deporte no se corre por países sino por equipos comerciales. “Sabía que Movistar iba a hacer la carrera a tope. Estaba mentalizado para ello”, comenta Alberto Contador (Tinkoff) entre dientes. “Han ido muy rápido en las subidas”, tercia Dave Brailsford, máximo responsable de Sky. “Han tirado para hacer daño”, concluye Purito Rodríguez (Katusha). “Han tirado a morir”, remata Contador, víctima del ataque telefónico. [Así te hemos contado la quinta etapa].

Los últimos 50 kilómetros de la quinta etapa del Tour de Francia, final en Le Lioran, se prestaban a la imaginación con cuatro puertos de los cuales dos tenían kilómetros enteros de pendientes de doble dígito. Era además la última de una tríada de jornadas maratonianas de más de 200 kilómetros y cinco horas de sillín. La fatiga acumulada y el cambio de terreno (del llano a la media montaña) garantizaba explosiones. Movistar las buscó. [Así está la clasificación general del Tour de Francia]. 

En las primeras estribaciones del Puy Mary, segunda de las subidas puntuables, una fila azul tomó el mando del grupo. La fuga estaba lejos; eran sus miembros quienes se jugarían la victoria de etapa y el maillot amarillo. Este movimiento se realizaba con vistas a París. Uno a uno los gregarios de Nairo Quintana fueron aportando su máximo. El pelotón los sufrió y fue adelgazando. Se quedó el vigente líder, Peter Sagan. Después Vincenzo Nibali, que perdió ocho minutos y borró de un plumazo la polémica sobre si el líder de Astana sería Fabio Aru o él. Luego cedió Mikel Landa, pasando el testigo de segunda baza de Sky a Sergio Henao toda vez que Geraint Thomas se ha descartado y tiene una lesión torácica.

Alberto Contador ya bajó el Puy Mary a cola. Llegado el Col du Perthus, Movistar se quedó sin elementos y el Sky de Chris Froome tomó su testigo. Fue un rato de relativo respiro que cesó cuando el magro grupo de favoritos topó con la última subida del día. Ahí tensó el local Romain Bardet (Ag2r), conocedor de la ascensión y de su complicado descenso, buscando crear un hueco que le permitiera rascar unos segundos de ventaja y de gloria frente a sus paisanos. El dúo de Movistar, con Alejandro Valverde y Nairo Quintana, le secundó. Los demás les siguieron…

Y Contador dijo adiós. El pinteño llegó a meta con apenas medio minuto de pérdida que, acumulado con las anteriores, apenas suma 1’20”. No obstante, el tiempo es irrelevante frente a la sensación de inferioridad. “El Tour se ha puesto muy difícil. Habrá que dejar de pensar en luchar por la general y sondear qué otras posibilidades hay. No llegaré bien a Pirineos [este fin de semana], pero para Alpes quizá sí esté”. Será extraño ver como cazaetapas a un Contador que hoy no contó con ayuda de su equipo, Tinkoff. “Hubo un poco de desorganización”, admitió cuestionado por cómo Rafal Majka y Roman Kreuziger hicieron la carrera por su cuenta.

Mientras tanto, Movistar rehusó un papel de villano que no es tal. “Aceleramos para probar nuestras sensaciones y las de nuestros rivales”, dijo Alejandro Valverde evitando aludir directamente a Contador. “Hay que trabajar para obtener beneficios”.

Azules aparte, la otra cara de la moneda para la representación española la ofreció Purito Rodríguez con un sprint poderosísimo en meta: obtuvo tres segundos sobre el resto del grupo que le colocan cuarto de la general encabezada ahora por Greg Van Avermaet (BMC), el más fuerte de la fuga de nueve que se jugó los premios parciales. El belga podrá disfrutar de la prenda mañana, llegada masiva en Montauban. Después vendrán los Pirineos, primer bloque montañoso de este Tour de Francia.