La rebelión de Haliburton: de jugador más "sobrevalorado" según sus compañeros a héroe de las remontadas de Indiana

En la previa de los Playoffs de la NBA, una encuesta anónima entre los jugadores realizada por The Athletic reveló que el base de Indiana Pacers Tyrese Haliburton (25 años) era el más sobrevalorado de la liga para sus colegas.

Con su tiro ganador en las últimas décimas del primer partido de las Finales contra Oklahoma, ya son cuatro los game winners con los que ha silenciado a los críticos y a las hinchadas rivales en el último mes.

Su venganza es personal, pero también colectiva. Nadie esperaba a los Pacers en la final, pero después de cinco remontadas imposibles ya nadie puede burlarse del lema de sus aficionados: "En 49 Estados, se llama baloncesto, pero esto es Indiana".

En octubre del año pasado, las casas de apuestas daban a los Pacers las mismas opciones de llegar a las Finales que a los New Orleans Pelicans.

La franquicia de Louisiana acabó en el 14ª puesto del Oeste con 21 victorias y 61 derrotas. Mientras, los Pacers han firmado una segunda mitad de curso espectacular contraria a todo pronóstico, pero también a toda lógica.

Su camino a las Finales es la viva imagen de un equipo que no se rinde y que está dispuesto a desafiar a los haters. Hasta en cinco ocasiones perdían por 15 puntos en el último cuarto y las cinco, cantaron victoria.

El primer golpe llegó en el quinto partido de la primera ronda ante Milwaukee Bucks. Indiana perdía por siete (118-111) a falta de 34,6 segundos del final.

Nadie en la historia había remontado una diferencia así, pero a falta de 1,4 segundos, Haliburton clavó un game winner (119-118) y los Pacers finiquitaron la serie (4-1).

El padre de Haliburton invadió la pista y acabó encarándose con la estrella rival, Giannis Antetokounmpo, y los Pacers vetaron su entrada en el pabellón en los próximos partidos.

La prensa estadounidense enfatizó la venganza de Haliburton. Otros, pensaron que fue flor de un día y que los Pacers caerían ante el campeón del Este en la temporada regular: los Cleveland Cavaliers.

La rebelión de Haliburton: de jugador más "sobrevalorado" según sus compañeros a héroe de las remontadas de Indiana Pacers

Cuestionado por la posibilidad de que su nivel tuviera que ver con la encuesta en la que sus colegas lo tachaban de sobrevalorado, se limitó a decir que confiaba en sí mismo y que estaba centrado en la cancha.

Tras asaltar Cleveland en el primer partido, los Pacers repitieron la hazaña en el segundo. Perdían por siete puntos (119-112) a falta de 48 segundos y acabaron ganando 120-119 con una canasta de Haliburton a falta de 1,1 segundos.

El 0-2 en la eliminatoria destrozó mentalmente a los Cavaliers y acabaron sucumbiendo por 4-1.

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Ya en finales de Conferencia, la gente comenzó a respetar a los Pacers, aunque de nuevo, se dio el favoritismo a los New York Knicks, que venían de cargarse al campeón (Boston Celtics).

Pero los Pacers volvieron a hacerlo. En el primer partido, los Knicks marchaban con 9 puntos de ventaja (121-112) a falta de 51,1 segundos para el final.

De nuevo, sobre la bocina, Haliburton obró el milagro para mandar el partido a la prórroga y ganar a la postre. Otra vez, un 0-2 que acabaría matando a sus rivales.

Contra todos los pronósticos, Indiana estaba en las Finales. Con Oklahoma City Thunder como gran favorito, se volvió a ningunear a los Pacers.

Si estaban allí, era por su suerte en los instantes finales, no por la profundidad de su banquillo, su ritmo frenético de juego o sus intensas ayudas defensivas. El favorito les iba a aplastar.

Haliburton, el más buscado tras su 'game winner' ante Oklahoma en el primer partido de las Finales. Reuters Reuters

Oklahoma acabó la regular season con el mejor récord de la temporada y marchaba 8-1 en estos Playoffs en sus partidos como local.

El partido refrendó la disparidad entre ambos equipos. Oklahoma fue por delante el 99,9% del tiempo. Pero volvió a pasar.

Los Thunder ganaban por 15 a 9:42 del final (94-79), pero afalta de 0,3 segundos para el final del partido, un desajuste defensivo de los Thunder fue aprovechado por Haliburton.

El base se elevó en suspensión desde media distancia ante la pasiva mirada de Jalen Williams y el balón, una vez más, entró.

Cuarto game winner en cuatro rondas de Playoff y quinta remontada imposible (de 15 o más puntos) de los Pacers en el último mes.

Oklahoma sigue siendo favorito, aunque los argumentos lógicos cada vez pesan menos y la ventaja de campo ya es historia.

Haliburton celebra su tiro ganador ante Oklahoma. Reuters Reuters

Milagro contra la historia

Ninguno de los dos equipos han ganado nunca el título, ya que Oklahoma renunció a heredar el campeonato de 1979 que ganaron los Seattle Supersonics cuando trasladaron la franquicia.

Los Pacers ganaron tres títulos en la era ABA, pero no en la era NBA.

De hecho, solo han jugado unas Finales, las de 2000, donde el equipo entrenado por Larry Bird y comandado por Reggie Miller chocó contra los Lakers de Kobe y Shaq.

Oklahoma también sabe lo que es jugar una final, aunque también tropezaron ante un super equipo.

Los Thunder contaban con unos jovencísimos Kevin Durant, Russell Westbrook y James Harden, pero cayeron 4-1 ante los Miami Heat de LeBron James, Chris Bosh y Dwayne Wade.

El favoritismo de Oklahoma no solo tiene que ver con su récord de esta temporada, sino con la estadística histórica.

Los Pacers accedieron a los Playoffs desde el 4º puesto del Este. Desde 1996, todos los campeones han quedado en los tres primeros puestos de su conferencia. El último precedente son los Houston Rockets de 1995, hace treinta años. 

Pero estos Pacers liderados por Haliburton se crecen ante la adversidad y los pronósticos que pretenden hacerles de menos. Si hay que estar sobrevalorados, que sea con un anillo en la mano.