A la izquierda, el exentrenador del club de baloncesto Lointek Gernika Mario López

A la izquierda, el exentrenador del club de baloncesto Lointek Gernika Mario López EFE

Baloncesto

13 años y medio de cárcel para el exentrenador de baloncesto Mario López por agresión sexual continuada a una menor

El técnico, que dirigió al Lointek Gernika y a equipos inferiores de la Selección, es condenado por unos delitos que se produjeron en 1998.

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El exentrenador de baloncesto Mario López ha sido condenado a 13 años y medio de prisión por un delito continuado de agresión sexual contra una jugadora menor de edad.

La sentencia, dictada por la sección sexta de la Audiencia de Bizkaia, concluye que López — que dirigía al Lointek Gernika y equipos inferiores de la selección española— abusó de la víctima en más de cincuenta ocasiones desde 1998, cuando ella tenía 13 años y él 31.

Estos hechos fueron aumentando en frecuencia e intensidad con el tiempo. El tribunal determinó que López se aprovechó de su posición de entrenador y de la diferencia de edad para someter a la menor, valiéndose de su conocimiento sobre su situación personal y familiar.

La sentencia subraya que la víctima no prestó consentimiento en ningún momento, ya que su voluntad estaba doblegada por el control que ejercía el acusado. El testimonio de la denunciante fue considerado totalmente creíble por el tribunal debido a su coherencia, solidez y ausencia de contradicciones.

Además, la evaluación de la Unidad Forense de Valoración Integral y las declaraciones de testigos corroboraron que la víctima se encontraba en una situación de dependencia y miedo hacia su entrenador.

Mario López, en un partido de baloncesto

Mario López, en un partido de baloncesto EFE

Por otro lado, el tribunal destacó las contradicciones en la defensa de López. En su primera declaración, negó cualquier relación con la víctima, pero durante el juicio oral admitió haber mantenido encuentros con ella, aunque aseguró que fueron consentidos.

Sin embargo, la Audiencia consideró que el acusado utilizó la violencia y la intimidación para someter a la menor, descartando cualquier posibilidad de consentimiento. Asimismo, la sentencia señala que el acusado instauró un ambiente de temor y sumisión entre sus jugadoras, lo que refuerza la calificación del delito como agresión sexual con violencia e intimidación. 

La notable diferencia de edad y la situación de vulnerabilidad de la víctima fueron factores clave en la condena.

Por todo ello, se le condena como autor de un delito continuado de agresión sexual con acceso carnal y con la agravación de víctima especialmente vulnerable, a la pena de 13 años y seis meses de prisión, y también fija una inhabilitación para ejercer de entrenador de baloncesto de menores durante el tiempo de la condena.

El tribunal impone asimismo la prohibición de acercamiento a menos de 300 metros del domicilio de la víctima por un plazo de cinco años a contar desde que el acusado comience a disfrutar de permisos carcelarios y a indemnizar a la víctima en la cantidad total de 80.000 euros por el daño causado.