Cocinar croquetas es uno de los platos típicos de la cocina de aprovechamiento en la gastronomía española, y aunque se trata de un bocado que a priori puede parecer sencillo de preparar, la realidad es que debe seguirse su receta con cuidado y con las técnicas adecuadas para que el resultado final sea perfecto, sin que se deshagan ni queden demasiado pesadas para la digestión.

En la actualidad podemos encontrar alternativas a su preparación en aceite, optando por hacerlo en una freidora de aire, donde se puede prescindir casi en su totalidad del "oro líquido", y además pudiendo conseguir una mayor suavidad y digestibilidad. No obstante, para optar por este método, es importante que las croquetas se introduzcan directamente en la freidora desde el congelador, sin que haya que pasarlas por el grifo ni por el proceso de descongelación.

Utilizar la freidora de aire para preparar unas croquetas, con el relleno que se considere oportuno, es una excelente opción para aprovechar la comida y muy saludable en la idea. De esta forma, se puede disfrutar de una técnica innovadora que permite alcanzar resultados profesionales, además de lograr unos bocados más saludables y con menos uso de aceite en el cocinado.

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Con este proceso se consiguen reducir las calorías durante el cocinado, pero además tiene otras ventajas optar por este electrodoméstico, como es el disfrutar de una mayor limpieza en la cocina y conseguir un resultado mucho más digestivo. No obstante, es muy importante cuidar tanto la temperatura como el correcto uso del aceite en spray.

Cómo preparar croquetas en la freidora de aire

Para poder disfrutar de unas croquetas perfectas en la freidora de aceite, lo más indicado es empezar por precalentar la air fryer durante 5 minutos a una temperatura de 190 grados centígrados, de manera que así se conseguirá un cocinado mucho más eficiente y con un mejor acabado final.

Otro consejo clave para poder conseguir un buen resultado y para que las croquetas no queden frías por dentro y sí crujientes y apetecibles es rociar cada croqueta antes de introducirla en la freidora de aire, utilizando para ello una mínima cantidad de aceite con un spray, lo que permitirá que puedan llegar a tener ese color exterior dorado tan característico.

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Para concluir, la tercera pauta a tener en cuenta pasa por dejar suficiente separación entre croquetas dentro de la air fryer, de manera que no se apilen ni estén pegadas las unas a las otras, ya que en ese caso se creará una masa deforme que no resultará demasiado apetecible.

Mientras que las croquetas congeladas industriales tendrán entre ellas un tamaño similar, en el caso de las caseras será importante hacerlas de manera que tengan un tamaño similar, y que se hagan al punto y de forma simultánea.

Receta de croquetas de jamón, queso fundido y puré de patatas

Una receta muy interesante para preparar en la freidora de aire es la de elaborar unas croquetas de jamón, queso fundido y puré de patatas, para lo cual necesitarás hacerte con una serie de ingredientes:

• Tres cucharadas de mantequilla sin sal.
• Jamón serrano o prosciutto, cortado en dados o trozos pequeños.
• Dos tercios de taza de puré de patatas, ya sea comprado o preparado de forma casera.
• Media cebolla pequeña picada.
• Una taza de leche.
• Un tercio de taza de harina.
• Una cucharadita de ajo picado.
• Harina.
• Dos huevos y dos cucharaditas de agua.
• Aceite vegetal (en spray).
• Tres cuartos de taza de pan rallado normal.
• Tres cuartos de taza de pan rallado panko.

Una vez reunidos todos ellos, será el momento de comenzar a preparar el relleno de las croquetas, comenzando por agregar el ajo y la harina y cocinar durante un minuto, para luego ir poco a poco agregando la leche y posteriormente el puré de patatas. Se debe mezclar hasta conseguir una masa homogénea, retirando la sartén del fuego e incorporando la mitad del jamón cortado en dados.

A continuación, habrá que enfriar bien antes de empanar, teniendo en cuenta que la mezcla del relleno se espesará mejor si utilizas el frigorífico. De esta manera, ya tendrás preparado el relleno y será el momento de comenzar con el empanado de las croquetas.

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Para empanarlas habrá que colocar la harina en un recipiente pequeño, mientras que en otro se mezclarán los huevos y el agua con un tenedor. En otro bol pequeño y con poca profundidad se mezclarán los dos tipos de pan rallado. Ahora, usando una cucharada grande, habrá que dividir el relleno frío en 12 bolsas de un tamaño uniforme.

De una en una, se irá colocando un trozo de queso y una pequeña cantidad de jamón en el centro, envolviendo hasta que el queso esté cubierto. Luego habrá que pasar cada croqueta por el huevo batido y luego por la mezcla de pan rallado, repitiendo una vez más este proceso por ambos para conseguir una capa de mayor grosor.

Cuando hayas terminado de empanarlas, solo tienes que colocar las croquetas en una rejilla y refrigerar sin tapar durante al menos 30 minutos. Ahora precalienta la freidora de aire a 190 grados centígrados, rociando las croquetas con spray antiadherente antes de colocar la bandeja en el nivel superior y cocinar durante 8-10 minutos hasta que estén doradas. Una vez finalizadas, servir en caliente para poder disfrutar de unas croquetas con un gran sabor y textura.