Al vino se le han atribuido científicamente en los últimos años muchos beneficios para nuestra salud, muchos tenemos bien interiorizado eso de “una copita de vino diaria no hace daño”, pero cuando la sociedad en general se empeña tanto en las propiedades beneficiosas de algo concreto, a muchos otros nos asaltan las dudas de si será esto realidad o habrá algo más detrás que simplemente nuestra salud.

El Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación de la Universidad Autónoma de Madrid afirma tras un nuevo estudio sobre el vino, que esta bebida alcohólica previene la aparición de caries. Alega el estudio que in vitro, es decir en un entorno de laboratorio (hecho omitido en diversidad de medios), el vino tinto tiene propiedad antibacteriana frente a algunas bacterias típicas de la placa dental. Pero no sólo es el vino tinto el que tiene dicho beneficio, sino que también se ha observado en el vino sin alcohol y en el agua con extracto de semillas al 12% de alcohol.

El problema que siempre suele ocurrir es que se tergiversan y manipulan las conclusiones de los estudios por los medios para hacer la noticia más atractiva, interesa más comentar que el vino tinto ayuda a prevenir las caries a especificar que esto se ha demostrado en un entorno controlado y que hay otras bebidas con la misma función.

Lo característico de bebidas como el vino es que sus beneficios no son anunciados en el etiquetado como ocurriría con cualquier otro producto, por lo cual son datos que nos son dados a conocer mediante los distintos medios de comunicación. Esto ocurre porque según el artículo 4 apartado 3 del Reglamento Europeo 1924/2006 relativo a las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos: “En las bebidas con una graduación superior al 1,2 % en volumen de alcohol no podrán figurar declaraciones de propiedades saludables.” Suponemos que esto se establece con el único fin de no fomentar la ingesta descontrolada de alcohol, ya que por un lado el vino puede ser beneficioso y nadie lo pone en duda, pero ingerido en grandes cantidades puede contribuir a enfermedades y adicciones, ya que el alcohol está considerado una droga por la OMS, que define a estas como tal: “Droga es toda sustancia que, introducida en el organismo por cualquier vía de administración, produce una alteración de algún modo, del natural funcionamiento del sistema nervioso central del individuo y es, además, susceptible de crear dependencia, ya sea psicológica, física o ambas.”

En definitiva, cada uno debe analizar el nivel de veracidad que le aporta cada noticia y no creer que es oro todo lo que reluce. Desde luego, lo que está claro es que tomar vino no es de las mejores cosas que uno puede hacer para cuidar su salud dental, creo que en esto todos estamos de acuerdo, yo catalogaría más la noticia como algo anecdótico que como una solución.

Fuente | 20Minutos