Morante de la Puebla, en su adiós a los ruedos.

Morante de la Puebla, en su adiós a los ruedos. Gtres

Salud

El grave trastorno de Morante de la Puebla por el que ha llegado a recibir 'electroshocks': "Pensé en la muerte como alivio"

El torero fue diagnosticado cuando tenía 22 años y ha pedido en varias entrevistas que se normalice la necesidad de recurrir al psiquiatra.

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J. Rodríguez
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El famosísimo torero Morante de la Puebla se retiró del toreo por sorpresa al término de la Corrida de la Hispanidad. Después de cortar dos orejas, el matador sevillano cortó su coleta y las gradas de Las Ventas le despidieron con una ovación.

Sólo hace unos meses, el torero confesaba al diario ABC que lidiaba desde sus 22 años con el trastorno disociativo, un problema de salud mental por el cual llegó a decir "he pensado en la muerte como alivio". El torero ha cumplido recientemente 46 años.

Morante describió su trastorno como una afección que le desconecta de sus emociones, una enfermedad "muy compleja, muy triste y muy dolorosa". Y sobre sus pensamientos de muerte aclaró: "No me lo puedo permitir. Tengo una familia y una responsabilidad".

Este trastorno disociativo se acompaña de episodios de depresión severa e, incluso, agorafobia, lo que supuso una traba en su carrera como torero durante años. Morante, de hecho, se sometió en cierto momento a terapia electroconvulsiva.

Es decir, lo que comúnmente conocemos como electroshocks, que se debe recibir con anestesia general y puede provocar episodios de amnesia. "Te duermen entero y te las dan. La memoria me falla un poquito, pero el doctor dice que es normal", dijo tras la sesión, tal y como recuerda ¡Hola!.

El torero tuvo que viajar a Miami en 2004, donde recibió este tratamiento que le permitió regresar al ruedo. "Todo esto lo hago por el toreo. Podría estar más tiempo con otro tipo de tratamiento, pero tenía confianza en este, aunque fuera más agresivo", dijo.

"Creí que era el más rápido y, para la temporada, el tiempo mandaba", explicó, según recoge el diario AS. "La visita al psiquiatra se debe normalizar, como el que va a un fisio o a un médico general. Le cuentas tu problema, cómo es el día, la noche y te manda un tratamiento".

Desconexión emocional

Tal y como explicó Morante, la Clínica Mayo describe los trastornos disociativos como afecciones que implican una pérdida de conexión entre pensamientos, recuerdos, sentimientos y entorno. Esto provoca problemas de control de la vida cotidiana.

"Los trastornos disociativos suelen surgir como reacción a acontecimientos impactantes, angustiosos o dolorosos y ayudan a alejar los recuerdos difíciles", explica la Clínica Mayo. Esto se manifiesta con problemas como la pérdida de memoria y la desconexión de la identidad.

En los peores momentos de su lucha contra este trastorno, Morante llegó a decir que "no podía seguir así. No tenía fuerzas ni para vestirme de torero y me pasaba los días llorando". Los síntomas de este tipo de trastornos pueden ser muy angustiosos.

La Clínica Mayo señala entre ellos la sensación de estar separado de ti mismo y de tus emociones, pensar que las personas y las cosas que te rodean están distorsionadas y no son reales e, incluso, tener un sentido "borroso" de tu propia identidad.

Sentir estrés es uno de los aspectos más característicos de este trastorno, que además puede dificultar su gestión. Las situaciones estresantes, como el trabajo, también agravan este tipo de trastornos. Puede generar problemas con el entorno del paciente.

El riesgo de depresión, ansiedad, episodios de amnesia —tanto de períodos de tiempo, como de acontecimientos, personas o información personal— y los pensamientos y comportamientos suicidas aumenta con esta enfermedad.

Según la Clínica Mayo, este tipo de trastornos son más probables en las personas que han sufrido abusos físicos, sexuales o emocionales a largo plazo durante la infancia.

Otros eventos impactantes, preocupantes o dolorosos prolongados durante la infancia podrían tener igual desenlace. Por tanto, una manera de prevenir este tipo de trastornos es prevenir precisamente estos acontecimientos en la vida de los niños.