Los dentistas alertan de la peligrosa moda del turismo dental en Marruecos: "Viajar para eso es una temeridad"

Acaba de empezar la época más esperada para la mayoría de personas, la temporada de vacaciones. Con la llegada del calor y del sol, muchos están deseando abandonar sus puestos de trabajo por unos días para desconectar y reponer fuerzas.

Playa, piscina, montaña, hoteles, restaurantes… son palabras muy habituales desde las últimas semanas. Habrá incluso quien se decida por disfrutar de un viaje fuera de España. Uno de los destinos de moda es Marruecos, que puede ofrecer un poco de todo: gastronomía, cultura, aventura…

Sin embargo, hay quien publicita al país norteafricano como algo más que un destino turístico para conocer una nueva cultura y disfrutar de sus platos más típicos. También incluyen packs de turismo dental, algo sobre lo que los odontólogos españoles ya están alertando.

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Se anuncian en TikTok y por unos 1.200 euros por paciente, 2.000 si es para dos personas, se pueden contratar estas ofertas que incluyen vuelo, alojamiento, dietas, excursiones y la colocación de carillas dentales, un tratamiento estético.

El precio resulta llamativo, y sustancialmente más barato, si se tiene en cuenta que en España que las carillas de composite (el material que emplean los odontólogos marroquíes en la oferta) cuestan entre 100 y 400 euros por pieza dental.

"Viajar para eso es una temeridad", sentencia Óscar Castro, presidente del Consejo General de Dentistas de España. Al experto le preocupa que en Marruecos los controles sanitarios y las acreditaciones de profesionales sean más laxos que, por ejemplo, en España.

"En terceros países vas a ciegas, no sabes si se cumplen las normativas", señala. No es lo único que le preocupa. Para poder hacer aplicar este tratamiento correctamente, es necesario realizar un estudio previo de la salud dental del paciente.

Esto incluye radiografías para ver el estado del hueso y comprobar que el soporte de cada diente está bien. Los viajes ofertados tienen una duración de unos tres días, por lo que Castro duda seriamente de que de tiempo a realizar el tratamiento incluyendo esta revisión previa.

Lo barato sale caro

El experto advierte también sobre los riesgos que pueden entrañar este tipo de ofertas. "Como mínimo, puede ser el fracaso del tratamiento", pero como máximo puede ser cualquier problema de salud agregado o, incluso, la pérdida de los dientes, subraya el experto. "Lo barato sale caro".

Como ejemplo de este problema, pone un paciente con una caries. Sin esa evaluación previa, es muy probable que la carilla se ponga y no se pueda detectar el daño del diente, lo que puede hacer que el problema se vaya agravando en silencio.

En el caso de que la lesión llegue al nervio: "Están asegurados una infección y unos problemas graves después", alerta el presidente del Consejo General de Dentistas de España.

No queda ahí, según cuánto avance la lesión, destaca Castro, el paciente puede hasta perder la pieza dental afectada por la caries. "No basta con hacer un trampantojo y taparla. Si pones una carilla sobre un diente dañado, lo agravas más todavía".

Castro recuerda también que cuando estos casos salen mal, la sanidad pública es quien tiene que ocuparse de atender a los pacientes, con la consecuente sobrecarga de un sistema que ya está bastante mermado

Diferentes materiales

Las carillas que ofertan los packs para ir a Marruecos son de composite, un material que también es muy común en España y que, de hecho, suelen ser las más baratas de las opciones que ofrecen los profesionales.

Sin embargo, que sea el mismo material no significa que sea igual de bueno, advierte el presidente del Consejo General de Dentistas de España. Con este componente, el rango de precios es muy variable, igual que su calidad.

Si se piensa en lo barata que sale esta oferta publicitada en TikTok, el odontólogo cree que no sería raro que se ahorraran costes en detrimento de la calidad del material y, por lo tano, de la seguridad del tratamiento y de los pacientes.

Ecos del pasado

Algo así, por desgracia, no es desconocido para los odontólogos españoles. Hace unos años se puso de moda ir Turquía para colocarse implantes dentales a precios mucho más bajos que en España.

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"Fueron cientos de personas y luego tuvimos que encargarnos de las consecuencias los dentistas españoles", dice Castro. Él, personalmente, no tuvo ningún paciente con este problema, pero sabe de colegas que sí los atendieron.

El experto recuerda por teléfono a otro odontólogo que, en aquel momento, atendió a más de una decena de personas que habían acudido a ponerse implantes o coronas dentales en Turquía y sufrieron las consecuencias.

Estos pacientes acabaron con las coronas despegadas o con infecciones en la boca, entre otros, cuenta el profesional. Algunos, incluso, perdieron dientes. En casos como estos, por ahorrar dinero, hay personas que se exponen a tratamientos mucho más agresivos, pero, si fracasan, acaban gastando el doble.

De las ofertas de Marruecos aún no se ha conocido ningún paciente con problemas, Castro cree que todavía es pronto. No obstante, conociendo la experiencia de Turquía, los odontólogos españoles han querido avisar para intentar prevenir. "Cuando llegan las consecuencias se preguntan en qué pensaban", sentencia.