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Salud

Proyecto HOPE: menor tiempo de espera y mejor atención para pacientes oncológicos

La iniciativa HOPE, HOspital de Día PErsonalizado, puesta en marcha en el hospital madrileño Fundación Jiménez Díaz, permite a los pacientes oncológicos reunir todas sus citas en una, disminuyendo en un 97% el tiempo de duración de un tratamiento.

3 febrero, 2023 12:17

Cuando se diagnostica un cáncer, la vida da un giro. No solamente por lo que supone la aparición de la enfermedad sino porque, a partir de ese momento, en la agenda de la persona se cuelan “un maratón de pruebas, citas hospitalarias y procedimientos médicos que reducen su calidad de vida”, cuenta la doctora Cristina Caramés Sánchez, jefa asociada del Servicio de Oncología Médica de la Fundación Jiménez Díaz

Los pacientes oncológicos pasan una parte importante de su tiempo en el hospital de día para recibir tratamiento, un proceso que resulta a menudo muy poco ágil por los largos tiempos de espera. En 2018, los profesionales de la Fundación Jiménez Díaz atendieron la sugerencia de cambio que pedía un grupo de pacientes por la interferencia que suponía en sus vidas diarias pasar largos periodos en el centro y, convenidos de la necesidad de mejorar, crearon el proyecto HOPE (HOspital de día PErsonalizado), liderado por la doctora Caramés. El objetivo, asegura la especialista, era “mejorar los resultados clínicos y transformar el statu quo del tratamiento del cáncer mediante la implantación de un modelo de atención centrado en el paciente”.

La primera meta era reducir en más del 75% los tiempos muertos que sufrían los pacientes para recibir sus tratamientos en el hospital de día oncológico. El resultado inicial fue que las esperas disminuyeron un 80% y, según confía la facultativa, “esperábamos, a medida que el proyecto se consolidara, poder acercarnos al 100%”, algo que han conseguido, ya que actualmente el tiempo medio para recibir un tratamiento se ha reducido en un 97%. Esto supone un gran beneficio para la calidad de vida del paciente, que puede restringir al mínimo posible el tiempo que pasa en el hospital.

HOPE: HOspital de día PErsonalizado

En el proceso tradicional de un hospital de día, el paciente pasa por varias áreas asistenciales antes de recibir su tratamiento para, por ejemplo, realizarse análisis de sangre, para cuyos resultados debe esperar también en el centro, para los que debe posteriormente esperar resultados. Después pasa consulta con enfermería, luego con oncología, acumulando tiempos muertos en cada una de estas fases, pues son citas programadas de forma independiente.

Ahora, gracias al proyecto HOPE, se ha revertido el trasiego habitual de los pacientes acercándose a la consulta. Para ello se ha creado una unidad de práctica integrada en el hospital de día, una estructura para prestar atención a través de equipos multidisciplinarios altamente coordinados, organizados en torno a una condición médica específica. Son responsables del ciclo completo de atención de un proceso, se ubican alrededor de un espacio, miden procesos y resultados en equipo (en lugar de individualmente) y aceptan corresponsabilidad de los resultados y sus costes. De esta manera, son los profesionales sanitarios los que se movilizan en torno al paciente, que dispone de una única cita en el hospital, para que sea en el mismo sillón en el que recibe su tratamiento donde también se le realiza el análisis de sangre y donde recibe la visita del oncólogo.

La doctora Cristina Caramés.

La doctora Cristina Caramés.

"Nos preocupa no solo que se cure, sino que el tratamiento interfiera lo mínimo en su vida cotidiana; para ello, el proyecto HOPE se centra en proporcionar al paciente oncológico el mayor confort y agilidad en su tratamiento con los máximos niveles de seguridad, con la consecuencia inmediata de una evidente mejora en su calidad de vida", explica la doctora Caramés.

La reducción en los tiempos de espera es quizá el factor con beneficios más inmediatos para los pacientes pero, desde el punto de vista de los oncólogos, “la estandarización del proceso incorporando la estructuración de la recogida de datos clínicos, el trabajo interdisciplinar y la comunicación con el paciente más allá del espacio físico del hospital y siempre que lo necesite, ha permitido una mejor identificación de las complicaciones o efectos adversos y ha facilitado anticiparse a los mismos, disminuyendo la proporción de visitas a urgencias e ingresos hospitalarios por efectos secundarios graves. Y todo esto haciendo un uso más responsable de los recursos", resalta la especialista.

En este sentido, añade: “Hemos observado una mejora drástica en los resultados clínicos, con una disminución de hasta el 38% en los ingresos hospitalarios por toxicidad grave del tratamiento del cáncer y, gracias a la eliminación de todo el tiempo espera entre citas y los viajes innecesarios, las citas innecesarias entre ciclos se han reducido en un 62%”.

Además, desde la puesta en marcha de HOPE, los pacientes han reportado una mejora significativa en su experiencia de atención oncológica, con un aumento del NPS (Net Promotor Score) del Hospital de Día del 75% al 95%, lo que demuestra la optimización que la iniciativa proporciona en la calidad de vida de los pacientes, destacando como cambios que estos aprecian más positivamente la disminución de los tiempos de espera y los desplazamientos, el acceso instantáneo a su equipo asistencial a través del Portal del Paciente, en la aplicación propia de Quirónsalud, y, en general, una atención más centrada en ellos

Las dudas sobre cómo actuar debido a los efectos secundarios del tratamiento son un problema frecuente en la atención del cáncer. Según explica la doctora Caramés, “los pacientes se ven obligados a buscar asesoramiento médico fuera de horario entre ciclos. Esto lleva a un aumento de las visitas no programadas en consulta y visitas a Urgencias, generando, en muchas ocasiones, una mala experiencia tanto en la práctica profesional como en los pacientes y familiares”. Para combatirlo, y proporcionar un mejor apoyo, se ha instaurado un asistente virtual en el Portal del Paciente, cuyo algoritmo permite clasificar los síntomas de los pacientes según la gravedad, ofreciéndoles consejos que han sido previamente definidos por el equipo de Oncología.

La iniciativa fue galardonada en los Premios Quirónsalud, en la categoría ‘Innovación Asistencial’, que reconoce los proyectos innovadores que favorecen la mejora de la atención en los centros sanitarios y la utilización de las nuevas tecnologías para este mismo fin. Así mismo ha recibido uno de los premios de Enova Health 2021, premio profesor Barea 2022, premio grupo español Pacientes con cancer 2022, entre otros.

HOPE se puso en marcha, en un principio, para el grupo de pacientes con cáncer de mama metastásico del que surgió la idea, pero pronto el proyecto se extendió para beneficiar a pacientes con tumores digestivos, de pulmón, melanoma, uroteliales, ginecológicos... y hasta poder llegar a la gran mayoría, pues HOPE democratiza, facilita el acceso y la equidad y permite a todos los pacientes oncológicos sentirse mejor durante el proceso de recibir el tratamiento. Se puede decir que HOPE aplica el “vive y deja vivir”, dando vida e interfiriendo lo mínimo en la calidad de vida.