Pan integral y el médico Alexandre Olmos.

Pan integral y el médico Alexandre Olmos.

Nutrición

Alexandre Olmos, médico, avisa a España: "Si compras este pan integral en el súper, estarás inflamando tu intestino"

"Si alimentas a las bacterias equivocadas con este tipo de panes, lo único que consigues es inflamación", advierte el experto.

Más información: José Abellán, cardiólogo, advierte a España sobre el huevo: "Eleva el colesterol y aumenta el riesgo de infarto"

Publicada
Actualizada

El pan sigue siendo uno de los alimentos más presentes en la mesa de los españoles, hasta el punto de representar un 4,2% del gasto total en alimentación en los hogares, según datos de la Asociación Española de la Industria de la Panadería, Bollería y Pastelería (Asemac). Pero no todo el pan es igual y elegir mal puede afectar a la salud más de lo que parece.

Aunque muchos lo consideran un básico nutritivo, otros lo ven como culpable del aumento de peso o los picos de glucosa. La clave está en su composición: los panes integrales o de masa madre aportan fibra, vitaminas y minerales y tienen un índice glucémico más bajo que el pan blanco. Sin embargo, la publicidad puede jugar malas pasadas.

"Si en el supermercado compras pan de molde, pan integral o pan con semillas pensando que es saludable, puede que estés inflamando tu intestino y robándole energía a tu cuerpo sin que te des cuenta", advierte el médico Alexandre Olmos, que ha analizado recientemente tres tipos de pan muy consumidos y poco recomendados para una buena salud.

"Pan de molde blanco, pan de semillas industrial o pan integral envasado que dura semanas", señala Olmos. Variedades de pan en las que no faltan etiquetas como "rico en fibra, con masa madre, con multicereales"... Pero el experto señala la importancia de fijarse bien en sus ingredientes.

"Cuando miras los ingredientes, encuentras esto: propionato de calcio, conservante, emulsionantes y aditivos, azúcares añadidos y jarabe de glucosa, harinas refinadas disfrazadas de integrales y luego pasa lo de siempre: te levantas hinchado, con gases, cansado, niebla mental... No es casualidad", explica Olmos.

El problema, señala el experto, está en que "tu intestino tiene bacterias buenas que te dan energía y estabilidad, pero si alimentas a las equivocadas con este tipo de panes ultraprocesados, lo único que consigues es inflamación, bajones, ansiedad y digestiones pesadas".

Y todo ello ocurre mientras se cree que se está comiendo de forma saludable. "Aunque parezca pan saludable, tu cuerpo puede estar reaccionando de forma silenciosa cada día", afirma.

Como alternativa, Olmos propone un enfoque más personalizado: "Por eso utilizamos un estudio epigenético para saber qué alimentos te están nutriendo y cuáles te están afectando de forma negativa".

Una herramienta que permite identificar cómo ciertos ingredientes influyen en la salud intestinal, el metabolismo y la energía diaria, abriendo la puerta a una alimentación más consciente.

Los panes más saludables

No todos los panes son iguales y algunos aportan mucho más que simples calorías. Según una entrevista a Jamie Gnau, instructora clínica de ciencias biomédicas en la Universidad Estatal de Missouri (EEUU) a Business Insider, el pan integral encabeza la lista de los más recomendados.

Al conservar el grano completo, aporta fibra, proteínas vegetales, vitaminas del grupo B y E, además de minerales como potasio, hierro y magnesio. A diferencia del pan blanco, no dispara el azúcar en sangre y contribuye a una digestión más lenta y saciante.

Le sigue el pan de centeno, un cereal muy rico en fibra que ayuda a estabilizar los niveles de glucosa. Es ideal para quienes buscan un pan con bajo índice glucémico y con un perfil nutritivo similar al integral.

En tercer lugar, se encuentra el pan de cereales germinados, elaborado con legumbres y granos que, al germinar, aumentan su concentración de nutrientes. Es rico en proteína, zinc, hierro, vitamina C y ácido fólico, y además es más digestivo.

El pan integral de masa madre ocupa el cuarto puesto. Su fermentación lenta mejora la absorción de nutrientes y lo convierte en una opción más digestiva, con menos impacto glucémico.

Por último, el pan multicereales cierra el ranking: aunque contiene fibra y mezcla diferentes harinas, muchas veces incluye cereales refinados, por lo que es una opción intermedia, mejor que el blanco, pero menos completa que las anteriores.

Ingredientes clave en un pan saludable

A la hora de elegir un buen pan, más allá de estas versiones más saludables y de las etiquetas, lo que verdaderamente importa está en la lista de ingredientes.

Un pan saludable debe contener ingredientes sencillos y reconocibles: harina integral de grano completo (de trigo, centeno u otro cereal), agua, levadura o masa madre y sal. En ocasiones puede llevar semillas o frutos secos, siempre que estén bien especificados y en proporciones reales.

Pan integral.

Pan integral.

Por el contrario, hay ciertos componentes que deberían hacer saltar las alarmas. Si en el envase aparecen términos como propionato de calcio, emulsionantes, estabilizantes, jarabe de glucosa, azúcar añadido o aceites refinados, es señal de que estamos ante un pan ultraprocesado.

También conviene desconfiar de aquellos que contienen “harina de trigo” sin especificar si es integral, ya que normalmente se trata de harinas refinadas, con menos fibra y nutrientes. Además, los panes que presumen de ser "multicereales" o "ricos en fibra" pueden llevar solo un mínimo porcentaje de estos ingredientes saludables, acompañados de muchos otros menos recomendables.

Por lo que, cuanto más corta y comprensible sea la lista de ingredientes, más saludable será el pan.