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    El mejor aperitivo

    Si intentas seguir una dieta saludable o de adelgazamiento, es probable que uno de los momentos en los que se hace más complicado es el aperitivo. Estas comidas son toda una institución en España porque, además de comer, son un momento de socialización. Lo más habitual es tomar una bebida alcohólica o azucarada, lo que no hace mucho bien a nuestra salud. Las opciones de comida tampoco son mucho mejores.

    Patatas fritas, torreznos, aperitivos industriales… Todos ellos se caracterizan por ser alimentos sumamente calóricos, pero con pocos nutrientes beneficiosos e interesantes para nuestra salud. El principal problema de estos aperitivos es consumirlos en exceso, superar fácilmente el número de calorías diarias recomendadas y, en consecuencia, dejar de comer otros alimentos que sí producen un beneficio en nuestro organismo.

    De todas formas, no tenemos por qué destruir el aperitivo. Existen algunas opciones que, consumidas en raciones moderadas y razonables, son beneficiosas y, además, reducen el hambre para evitar hacer un sobreconsumo de calorías. A continuación, 4 aperitivos saludables y típicos de España.

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    Las aceitunas

    Uno de los alimentos más típicos de la gastronomía española son las aceitunas. Si bien es cierto que se trata de un alimento muy calórico —100 gramos de este producto suponen casi 200 kilocalorías—, se trata de un alimento repleto de nutrientes. Uno de sus mayores beneficios es su contenido en grasas cardiosaludables, similar al del aceite de oliva.

    Destacan las grasas monoinsaturadas y, entre ellas, el ácido oleico. Sin embargo, las aceitunas cuentan con ciertos nutrientes que no tiene el aceite de oliva. El más importante es la proporción de fibra que contienen, un 4,4% del total del alimento. Por último, las aceitunas son una buena fuente de vitamina E, un potente antioxidante.

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    Los altramuces

    Conocidos como chochos en algunas regiones de España, este famoso aperitivo es una desconocida fuente de proteínas vegetales. Los altramuces son legumbres y, por lo tanto, una buena opción para sustituir los aperitivos más ultraprocesados. El porcentaje de proteínas que contiene un altramuz supera el 36% de su composición.

    De todas formas, no conviene abusar de estos pequeños alimentos ya que cuando reunimos 100 gramos, suponen para nosotros unas 370 kilocalorías. Otro componente que convierte a los altramuces en un aperitivo saludable es la fibra, contienen un 34% de este nutriente que aporta efecto saciante y, por tanto, nos ayuda a evitar un sobreconsumo de calorías.

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    Los mejillones

    Tanto en verano como en navidades, la bandeja de mejillones alegra los aperitivos previos a la comida. En este caso, se trata de un alimento con un valor energético bajo: comernos 100 gramos de este alimento sólo supone 60 kilocalorías para nosotros. Eso sí, esta misma cantidad aporta casi 11 gramos de proteínas de alta calidad.

    Los mejillones no contienen muchas grasas, pero en ellas destacan los ácidos grasos omega-3, según explica la Fundación Española de Nutrición (FEN). Estas grasas son conocidas por todos por sus beneficios para la salud cardiovascular. Además, los mejillones contienen una larga lista de minerales tales como el selenio, el fósforo, el hierro, el zinc y el yodo.

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    Los pistachos

    Los frutos secos son uno de los aperitivos más típicos. Eso sí, muchas veces no elegimos los mejores: optamos por aquellos que contienen mucha sal o, incluso, han sido bañados en miel. Estos alimentos pueden ser muy beneficiosos si elegimos aquellos que han sido poco procesados y con poca sal.

    Los pistachos, concretamente, son un alimento muy calórico —100 gramos superan las 600 kilocalorías—, pero contienen una gran cantidad de grasas saludables. De hecho, más de la mitad de la composición de un pistacho está formada por grasas. También contiene un buen porcentaje de fibra (6,5%), varios minerales y la anteriormente citada vitamina E.

J. R. R.