Imagen de una avispa velutina o asiática.

Imagen de una avispa velutina o asiática.

Ciencia

La incontrolable multiplicación de la velutina en España, la avispa asiática que ha matado a tres personas en dos semanas

Esta especie invasora se concentra principalmente en la zona de la cordillera Cantábrica, pero ha llegado a extenderse a Cádiz y Málaga.

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Las claves

La avispa asiática velutina ha causado la muerte de tres personas en dos semanas en España, destacando su riesgo para la salud humana.

Desde su detección en Navarra en 2010, la velutina ha colonizado gran parte del norte de España y se está expandiendo hacia el sur.

La especie es altamente adaptable, formando nidos en distintos entornos, lo que complica su control y erradicación.

Se estima que la avispa velutina avanza alrededor de 100 kilómetros al sur cada año, aumentando el riesgo de invasión en nuevas áreas.

La muerte de tres hombres en solo dos semanas por picaduras de avispas velutinas o asiáticas ha hecho que las miradas vuelvan a posarse de nuevo en este insecto invasor que está colonizando la Península Ibérica, con una presencia predominante en Galicia.

La especie se detectó por primera vez en Navarra en el año 2010. Desde ahí se extendió al País Vasco y comenzó su expansión por la península. Actualmente, está asentada en el norte peninsular, sobre todo en Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, y Navarra, pero no se queda ahí.

Sigue avanzando por Castilla y León, La Rioja y Cataluña. Incluso, se han llegado a detectar nidos en la Comunidad Valenciana y Andalucía. En el sur, la última detección ha sido en Málaga, donde apareció esta especie por primera vez el pasado tres de octubre, pero también se ha visto en zonas como Cádiz o Jaén.

Algunas voces hablan de un aumento extraordinario de estos insectos y no es para menos. Las cifras del Ministerio para Transición Ecológica y el Reto Demográfico hablan de un aumento de menos de un centenar de nidos retirados en el año 2010 en todo el país a superar los 25.000 desde 2022.

No solo pueden extenderse desde la cordillera Cantábrica, advierte Xesús Feás, miembro de la Academia de Ciencias Veterinarias de Galicia. El experto en esta especie invasora expone que el insecto ha colonizado también el norte Portugal y entra en España también desde el país lusitano.

Feás cree que en los próximos años su expansión continuará avanzando poco a poco hasta estar presentes en toda la Península Ibérica. Es más, no se quedan ahí, ya que, tal y como dice el académico gallego, ya se han detectado nidos en las Islas Baleares. En las Islas Canarias no hay datos de registro, pero cuentan con una guía de actuación ante la posible invasión.

La página web Avispa Asiática, que recopila datos ofrecidos por el MITECO y las comunidades autónomas, estima que la expansión del insecto se produce a una media de 100 kilómetros hacia el sur cada año.

Una especie muy versátil

Feás destaca que una de las características principales de la avispa asiática es su plasticidad. Es decir, que son capaces de formar sus nidos en cualquier sitio. Ningún entorno, rural o urbano, está exento de poder albergar un avispero.

"Hay nidos en todos lados: en los edificios, en las copas de los árboles, dentro de las propias colmenas [de abejas], en medio de los muros, etcétera", ilustra el experto en estos insectos.

De hecho, en las tres muertes producidas las últimas semanas, las picaduras se produjeron después de que los fallecidos pisaran nidos que se encontraban en el suelo. Cuando los hacen así pueden hacerlos entre la maleza o, incluso, en huecos que haya en la tierra, por lo que pueden estar ocultos, explica Feás.

En esos casos, para recibir la picadura no hace falta que los pisen, puede bastar con que alguien se acerque con una herramienta ruidosa (como las que se usan para desbrozar en el campo) para que se sientan amenazadas y salgan a atacar.

Feás destaca también que se sienten "muy cómodas en entornos urbanos". Para demostrarlo, el científico pone el ejemplo de Santiago de Compostela: en 2015 se detectaron 3 nidos en la ciudad y tres años más tarde eran 971. "Se convirtieron en la primera actividad del cuerpo de Bomberos".

El experto las define como "una entidad móvil": tienden a iniciar la colonia en un lugar, pero acaban subiendo el nido a la copa de un árbol.

Más agresivas y peligrosas

Una característica que diferencia a la avispa velutina de la común, que se puede encontrar habitualmente en España, es que son más agresivas e inyectan más veneno con sus picaduras.

La inmensa mayoría de muertes por esta picadura se da en personas alérgicas. La ciencia calcula que entre el 3% y el 10% de la población puede desarrollar esta hipersensibilidad, cuenta Feás. No obstante, el deceso también puede ocurrir en personas sin esta condición.

Depende del número de picaduras que se reciban o de la parte del cuerpo en la que ocurran. Por ejemplo, la garganta puede ser una zona comprometida por el paso de las vías respiratorias.

Si nos ataca una avispa asiática, la picadura no suele pasar de la rojez, un dolor intenso y un pequeño bulto, pero más de 50 pueden comprometer seriamente la salud por la cantidad de veneno. Un avispero puede albergar hasta 1.300 ejemplares, cuenta el experto gallego.

Para Feás es "fundamental" retirar los nidos lo más pronto posible desde su detección. El científico recuerda que, a diferencia de otras especies, la avispa velutina "no tiene un calendario biológico". Esto significa que permanecen activas todo el año, de ahí la importancia de quitar los avisperos en cualquier estación.

No obstante, el académico gallego pone el foco, sobre todo, en la temporada de otoño e invierno, cuando experimentan un pico de población. Esta medida es especialmente importante "al principio de la invasión", si se quiere intentar erradicar su presencia en nuevas zonas.