El director del Servicio de Estudios Económicos de Castilla y León (ECOVAEstudios), Juan Carlos De Margarida, indicado que el incendio en la Sierra de la Culebra tendrá "consecuencias directas" que se reflejarán en el aumento de los costes para el conjunto de la provincia, "los cuales se harán más notables en los mercados laborales locales, con pérdidas temporales o definitivas de negocios que dependían de los espacios naturales de la zona".

El director del ECOVAEstudios acudía esta mañana a Zamora capital para presentar su Observatorio Económico correspondiente al primer trimestre, así como las perspectivas para el año 2022. Y bajo este contexto, Margarida ha destacado que la provincia de Zamora tiene varias debilidades económicas a tener en cuenta. El economista ha destacado que "la baja población y el alto grado de envejecimiento, así como la imposibilidad en unos años para implantar industrias en las zonas forestales; la falta de visión estratégica entre el sector público y privado, así como la fuerte competencia a nivel nacional e internacional para la provisión de productos forestales, perdiendo gran parte de especies forestales e industria agroalimentaria" son muy negativos para la recuperación en Zamora.

Como conclusión, el director de ECOVAEstudios ha lanzado una serie de recomendaciones que pasan por "mejorar la coordinación entre Consejerías en cuestiones que afectan el sector forestal, particularmente en los ámbitos de agricultura, ganadería e industria. Además, se debe reforzar la colaboración con las confederaciones hidrográficas en actividades concretas, tales como la restauración de la vegetación de ribera y el apoyo".

Por todo ello, De Margarida ha asegurado que "debido al futuro incierto, tanto en al ámbito económico como poblacional de la zona afectada por incendio y declarada como zona catastrófica, es de suma importancia que acceda a los fondos Next Generation para una regeneración socioeconómica rápida y gestionados de forma eficiente y eficaz por los gobiernos autonómico y de España".

Observatorio Económico

Sobre el Observatorio Económico del primer trimestre De Margarida ha indicado que "estamos ante una situación de emergencia económica que se está trasladando a una emergencia social hacia los más vulnerables, lo que hace que los ciudadanos cada vez sean más pobres", tal y como ha manifestado su director Juan Carlos De Margarida.

El economista ha indiciado que sobre las perspectivas económicas del conjunto de Castilla y León es que se sustentan en una realidad socioeconómica nada halagüeña, "sobre todo por la invasión en Ucrania, las sanciones impuestas a Rusia, la inflación y el incremento del coste de las energías", ha declarado De Margarida. A su vez, ha aseverado que "se necesita un plan de acción conjunto del BCE y los Gobiernos de la UE para frenar la subida de precios actual y evitar una estanflación".

Adentrándose en las variables analizadas por ECOVAEstudios para la provincia de Zamora, se ha demostrado que "se mantiene la tendencia general de aumento del IPC, como en el resto de la región y España", así como que nos encontramos ante una población "que descendió un 1,26%, donde casi el 31% tiene más de 65 años, lo que hace que sea una provincia con una altísima tasa de envejecimiento y la que mayor caída porcentual de población registra".

En relación con el mercado laboral de Zamora, en concreto en el número de contratos registrados en marzo de 2022 "que ha sido de 3.778, ha supuesto un ascenso en tasa interanual del 6,33%, siendo mayoritariamente temporales (71,36%) y en el sector servicios (64,27%)".

En cuanto al tejido empresarial, "Zamora es una provincia con un fuerte predominio de microempresas, ya que casi el 95% tiene menos de cinco trabajadores", y el dato que De Margarida ha querido resaltar es "que entre 2017 y 2021 el saldo del número de empresas ha disminuido en 507 en Zamora".

De Margarida ha constatado que "los datos adelantados de inflación son verdaderamente muy malos y hay que reconocer que se han desbordado todas las expectativas". El incremento desaforado de la inflación ha supuesto una fuerte minoración de la renta y el consumo de los ciudadanos, el peligro inminente de un traslado a márgenes empresariales y salarios, una revalorización de las pensiones. Además, ha añadido que "la depreciación del euro ha provocado que las importaciones (gas, petróleo…) se hayan vuelto todavía más caras y que junto con la pérdida de la competitividad de las exportaciones, en donde los precios de los productos españoles son más altos que la media de la zona europea, está provocando una inestabilidad económica que provocará una desestabilización en el ámbito social a finales de año".