Imagen de un agente de la Policía Nacional. Sevilla
Detienen a un hombre ebrio que perdió los papeles tras no dejarle entrar a un bar de Pajarillos
El dueño del establecimiento le impidió que accediese al haber protagonizado más incidentes en otras ocasiones. Tras ello, el presunto autor intentó agredirle y acabó detenido por resistencia y desobediencia a la Policía Nacional.
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Un hombre en estado ebrio ha sido detenido el pasado 7 de noviembre en Valladolid después de perder los papeles cuando el dueño de un bar de Pajarillos le impidió entrar al haber protagonizado otros incidentes en ocasiones anteriores.
A la llegada de los agentes de la Policía Nacional, el hombre continuó en actitud agresiva intentando agredir al hostelero, llegando a golpear a los funcionarios y tirando a uno de ellos al suelo. Fue detenido por un presunto delito de resistencia y desobediencia y cuando fue trasladado a los calabozos profirió amenazas de muerte contra los actuantes.
Una llamada a la sala CIMACC 091 por parte del propietario del local requirió la presencial policial en un bar de Pajarillos, avisando de que un hombre estaba causando problemas para acceder.
Hasta el lugar se desplazó una dotación de agentes del Grupo de Atención al Ciudadano, de paisano y en vehículo camuflado, que se encontraba realizando labores preventivas de seguridad ciudadana.
Cuando llegaron se encontraron al hombre amenazando e intentando agredir al dueño del establecimiento. La víctima relató que conocía al varón, quien había causado incidentes en su local en otras ocasiones en las que se encontraba en igual estado de embriaguez, mostrándose problemático y agresivo con el resto de clientela.
Este fue el motivo por el que le impidió el acceso, a lo que el otro respondió con agresividad y violencia. Los agentes se identificaron como policías nacionales y trataron de mediar y tranquilizar al hombre, pero resultó imposible por su estado y agresividad.
Fue entonces cuando otra dotación, estos uniformados y en un vehículo rotulado, se dirigieron al local para apoyar a sus compañeros.
Lejos de rebajar su agresividad, el hombre insistió en agredir al dueño, teniendo que interponerse los policías para evitar que lo lograse. Ante la desobediencia reiterada a las indicaciones policiales y debido a que llegó a propinar algún golpe y patada a los agentes, tirando a uno de ellos al suelo, fue detenido por los presuntos delitos anteriormente descritos.
Durante todo el traslado a dependencias policiales el detenido profirió amenazas de muerte hacia los agentes. Además, durante el cacheo previo a su ingreso en calabozos se le intervino un envoltorio de plástico que contenía cocaína.
Una vez puesto a disposición judicial, la autoridad ha decretado su puesta en libertad.