La tortilla gigante que se elabora en un pueblo de Valladolid

La tortilla gigante que se elabora en un pueblo de Valladolid Ayuntamiento de Laguna de Duero

Valladolid

La sorprendente tortilla gigante de un pueblo de Valladolid: más de dos metros y 1.000 raciones

Pesa 250 kilos y tiene un curioso truco para poder darle la vuelta.

Más información: Una tortilla de 900 raciones: "Para hacer algo así hay que estar un poco loco"

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Hay tradiciones que no deberían perderse nunca y los pueblos saben mucho de estas. Momentos de reunión entre vecinos, mayores y pequeños, para celebrar, compartir y revivir momentos que crearon sus antepasados.

Y cuando hay uno de los productos más típicos de los españoles por medio, mejor aún. Una tortilla gigante es lo que cada año se elabora en un municipio vallisoletano ante la atenta mirada de las decenas de personas que se acercan para contemplar este momento.

Cómo se elabora, de qué manera se le da la vuelta, cuál es el truco para que no se pegue. Son muchas las preguntas y solo la mano de un sabio tiene las respuestas. Jesús Martín Repiso es el encargado de hacer esta obra de arte.

Una tortilla de patata gigante de más de dos metros de diámetro y 250 kilogramos. En total, 1.000 raciones con 1.100 huevos, 160 kilos de patatas, 15 kilos de cebollas, 20 de jijas, 15 litros de aceite y 3 kilos de sal.

Todo ello cocinado durante horas para que los vecinos de Laguna de Duero saboreen esta delicia. Sobre las 16:30 horas de la tarde llegaba la tortilla al pinar y la expectación se centraba en saber cómo le daban la vuelta.

Lo hacen con motivo del Día de la Vieja, una tradición que reviven desde hace años y por la que pidieron a Jesús que fuera el encargado de darle forma a este manjar, puesto que está acostumbrado a hacer comidas en grandes cantidades.

Los vecinos dándole la vuelta a la tortilla

Los vecinos dándole la vuelta a la tortilla Ayuntamiento de Laguna de Duero

Empezaron con 300 raciones y han ido incrementando con los años debido al éxito que estas tenían, y que cada vez más gente quería participar en el encuentro.

Para darle la vuelta, según confesaba el protagonista, en una entrevista a EL ESPAÑOL- Noticias de Castilla y León, han diseñado un sistema compuesto por dos postes de hierro, un puente arriba y poleas.

Lo hace como si fuera una "campana", utiliza una paellera de casi dos metros y le pone unos ejes al lado que se levantan con una grúa por el peso que tiene. La suspende hacia arriba y cuando coge altura, la empuja.

Para evitar que la tortilla se queme ha creado un quemador especial para butano, ya que hay que ponerlo a la potencia adecuada dado que "si le das mucha fuerza, se quema. Y si le das poca, no cuaja".

En definitiva, un día en el que mayores y niños disfrutan alrededor de uno de los alimentos más típicos del país.