Terminó la incertidumbre y empiezan las quinielas. Este jueves, Pedro Sánchez fue investido presidente del Gobierno en el Congreso de los Diputados con 179 votos a favor y 171 en contra después de cuatro meses de duras negociaciones. El jefe del Ejecutivo, en el cargo desde junio de 2018, consiguió finalmente el apoyo de los independentistas catalanes de Junts que, con sus siete diputados, eran determinantes para garantizar que el socialista revalidara el cargo, pero su apoyo no ha salido barato.

A cambio de su voto afirmativo, y del de los siete representantes de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), el PSOE se ha visto obligado a prometer, entre otras medidas, una Ley de Amnistía para los encausados por el referéndum ilegal y la declaración unilateral de independencia de octubre de 2017 y la condonación de 15.000 millones de euros de deuda de Cataluña.

Dos medidas que han generado una gran polémica en la política nacional, con duras críticas tanto de las formaciones de la oposición, PP y Vox, como de históricos miembros del PSOE, y contra las que se llevan convocando concentraciones frente a la sede de los socialistas en la calle Ferraz de Madrid, y en otros puntos de España, desde hace más de 10 días, algunas de ellas finalizando con disturbios y cargas de la Policía contra los manifestantes más exaltados y radicales.

Pero a pesar de todo, Pedro Sánchez ha conseguido finalmente su propósito, y ha logrado ser investido presidente del Gobierno en primera votación con mayoría absoluta, ya que a los 14 votos de Junts y ERC se han sumado los 31 de Sumar, su socio en el Ejecutivo, los seis de EH Bildu, los cinco del Partido Nacionalista Vasco (PNV), uno del Bloque Nacionalista Galego (BNG) y uno de Coalición Canaria. Ahora toca formar Gobierno y es previsible que haya profundos cambios con respecto a la actual composición del Ejecutivo. 

Puente, la estrella emergente del PSOE

En las quinielas suenan con fuerza dos nombres de socialistas de Castilla y León: el vallisoletano Óscar Puente y la leonesa Andrea Fernández. El diputado y exalcalde de Valladolid entre 2015 y 2023 cuenta con muchas posibilidades de formar parte del nuevo equipo de Gobierno de Pedro Sánchez tras su sonada intervención en la réplica al líder popular Alberto Núñez Feijóo en su investidura fallida, el pasado mes de septiembre. 

Puente, muy cercano a Sánchez desde las primarias que en 2017 le devolvieron a la secretaría general del partido tras el golpe interno de octubre de 2016, ha formado parte, además, del equipo negociador del jefe del Ejecutivo de cara a la investidura y está presente en todas las quinielas para ser uno de los miembros del futuro Gobierno, (ministro o incluso vicepresidente) cuya composición es previsible que se anuncie, como muy tarde, el próximo lunes.

Aunque el objetivo de Sánchez es el de reducir el número de departamentos ministeriales, que en la legislatura anterior fue de 22, todo parece indicar que Puente asumirá casi con total seguridad una cartera. No hay que olvidar que el presidente del Gobierno ya ofreció un ministerio al entonces alcalde de Valladolid tras ganar la moción de censura de junio de 2018, aunque Puente prefirió quedarse en el Ayuntamiento de Valladolid. Entre las carteras que podría asumir el exregidor se encuentran Transportes y Movilidad y Cultura, siendo esta última especialmente simbólica ya que estaría presente en los Premios Goya de febrero de 2024, que tendrán lugar en la ciudad.

El exregidor ha mostrado, además, en múltiples ocasiones su compromiso con la ciudad y su intención de presentarse a las elecciones municipales de 2027 para tratar de recuperar la Alcaldía. Un objetivo que se antojaría complicado si finalmente asume una cartera ministerial ya que sería complicado compaginar un Ministerio con la labor de oposición en el Consistorio vallisoletano al popular Jesús Julio Carnero.

Andrea Fernández, la gran apuesta para Igualdad

La leonesa Andrea Fernández, actual secretaria de Igualdad del PSOE, tiene muchas papeletas para convertirse en la próxima ministra de Igualdad. La joven, nacida en el municipio de Valencia de Don Juan y de tan solo 31 años, ha tenido como dos de sus caballos de batalla la lucha contra la prostitución y la regulación de la pornografía y se ha convertido en una auténtica promesa de la formación.

Los socialistas tienen claro que quieren recuperar la cartera de Igualdad y reconocen que fue un error entregar ese Ministerio a Podemos, concretamente a Irene Montero. Después de una legislatura de continuas tensiones y polémicas, especialmente a colación de la Ley del 'solo sí es sí', que el PSOE se vio obligado a reformar con el apoyo del PP, los de Pedro Sánchez quieren volver a calmar las aguas en Igualdad con alguien de su máxima confianza como Fernández.

Un Gobierno de perfil más político: la incógnita de Óscar López

El presidente del Gobierno tiene la clara intención de configurar un Ejecutivo con un perfil más político que el de los últimos cuatro años de cara a una legislatura que se avecina especialmente dura, con una oposición que le acusa de haber dado un "golpe de Estado" y que ha llegado a calificar de "ilegal" al Gobierno por sus pactos con los independentistas. En esa tesitura, surge un nombre que podría ocupar otro Ministerio: Óscar López.

El segoviano es actualmente el jefe de Gabinete de Pedro Sánchez, su mano derecha en el Gobierno, y podría dar el salto al Ejecutivo para contribuir a incrementar ese barniz más político y menos técnico. También suena en las quinielas el nombre de Javier Izquierdo, senador por Valladolid y Secretario de Estrategia y Acción Electoral en la Ejecutiva Federal del PSOE, hombre de la máxima confianza del presidente y que también podría terminar asumiendo una cartera.

La leonesa Margarita Robles podría salir del Gobierno

Esa renovación del Gobierno se cobraría, además, una víctima de Castilla y León: la leonesa Margarita Robles. La actual ministra de Defensa, con un perfil más independiente y considerada del ala más conservadora del Ejecutivo, tiene pocas posibilidades de continuar al frente del Ministerio. Robles ha tenido continuos rifirrafes con el sector de Unidas Podemos del Ejecutivo y, si bien ahora el nuevo socio será Sumar, es previsible que Sánchez termine prescindiendo de ella en la nueva configuración del Gobierno.

Otra posible baja que afectaría a Castilla y León sería la de la delegada del Gobierno, Virginia Barcones. La actual representante del Ejecutivo en la Comunidad, que lleva dos años en el cargo, podría dejar el cargo después de las última polémica con respecto al reparto de inmigrantes en la Comunidad, tras la cual tanto PP como Vox pidieron su dimisión. Un nuevo Gobierno de España del que podrían formar parte varios representantes del PSOE de Castilla y León.