Ya lo analizábamos en octubre de 2015 tras su llegada a España. Netflix conseguiría estar exenta de pagar determinados impuestos en nuestro país al haber elegido Holanda como su sede europea.

De ahí que ahora no sorprenda que, según publica Cinco Días,  las dos filiales españolas del gigante de streaming Netflix sólo pagó 3.146 euros en concepto de impuesto de sociedades en su primer ejercicio fiscal en España, según las cuentas anuales de los Gastos Servicios de Transmisión España y los Gastos de Entretenimiento España.

Según explica el diario, no sería hasta agosto de 2018 cuando Netflix creó dos sociedades en España: una dedicada a la producción y otra al marketing.  En ese periodo, las dos filiales declararon unos ingresos conjuntos de 538.921 euros y un beneficio neto de 9.439 euros.

La razón es que Netflix sigue facturando a sus clientes españoles a través de la sociedad holandesa, siguiendo así un esquema similar al de otras grandes corporaciones tecnológicas como Google, Amazon, Facebook o Apple.